UNO

6.1K 342 97
                                    

León

-No te vas a casar.

Ivanna pone los ojos en blanco. Miro a mi primo Sasha.

-Dile que no va a casarse.

-León, basta- dice Sasha.

Agarro a Ivanna por los brazos.

-¿Tienes idea de cómo trata la Yakuza a las mujeres?

-¿Cómo tú pedazo de imbécil? Y suéltame.

-Yo no golpeo a las mujeres.

Ivanna levanta una ceja.

-Tengo un hueso roto que desmuestra que sí.

-¡Y yo tengo otro roto por tu culpa!- grito.

Ella sonríe. Odio que haga eso.

-De nada, gattino.

Aprieto la mandíbula.

-Te aviso que como te cases con ese tonto y feo japonés empiezo una guerra con la Yakuza- miro a toda mi familia- Estáis todos avisados.

Sasha me agarra por el brazo.

-¿Se puede saber qué cojones te pasa?

Me zafo de su agarre dando un tirón.

-Lo que me pasa es que no entiendo cómo puedes aceptar esto.

-No lo estoy aceptando, le he dado la opción a Ivanna de que sea ella quién decida si casarse o no.

-Y no lo va a hacer.

-No puedes decidir por ella, León. Contrólate.

Me muerdo la lengua para no golpear a nadie. Miro a mi padre que también me mira, no está contento con mi arrebato, puedo verlo. Que se jodan todos. La fiesta de cumpleaños sigue adelante, cada uno está en algún lado de la casa de mi primo conversando, yo estoy en el sofá exterior junto a la piscina con Fiama a mi lado. No debería haberla traído, ella me insistió y dije que sí para dejar de escucharla.

-¿Estás seguro de que Ivanna te cae mal?- pregunta mi hermano Luca.

Se sienta a mi lado.

-Como el culo- contesto.

-¿Y por qué parecías celoso?

-No son celos, stronzo. Ivanna es familia me guste o no, habría actuado igual por cualquiera de las otras mujeres.

Mi hermano asiente. Fiama suspira.

-¿Aburrida?- pregunta Luca.

-No, esto está bien, pero esperaba ver algo más de Moscú que una casa.

-Si no estás contenta puedes largarte- le digo.

Observo a Ivanna mientras Fiama me dice algo que no escucho. Me pongo de pie y sigo a Ivanna adentro de la casa. La sigo por el pasillo, cuando entra en el baño me meto rápidamente y cierro la puerta con seguro.

-¿Qué haces? Vete imbécil, tengo que hacer mis cosistas.

-Ivanna...

-¿Ya no soy la zorra fría?- pregunta cruzándose de brazos- O espera, mejor, la princesita rusa de hielo. No sé cuál me gusta más.

-Escucha, por favor, no te cases sin amor.

-¿Por qué te preocupa tanto? Es mi vida, haré con ella lo que me de la gana.

Doy varios pasos hacia adelante hasta que tengo a Ivanna acorralada entre la pared y mi cuerpo. Su olor a frutas silvestres me invade hasta el cerebro. Odios las putas frutas silvestres.

LEÓN #3 [Disponible en físico]Where stories live. Discover now