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Roier's Pov 📍
── ¿Qué te dijo Lili? ── Preguntó Aldo una vez Roier terminó la llamada.
── Ya viene en camino, ahorita le ando enviando la ubicación ── Comentó Roier mientras le enviaba el mensaje a Lili ── Ya está, dice que va de camino a la gasolinera y en unos 10 minutos está aquí.
── Bendita sea la pinche Lili ── Dijo Osvaldo mientras suspiraba ── Esa morra no nos deja abajo.
── Su futuro novio y esposo está aqui wey, obviamente la pendeja se va a mover rápido ── Dijo Aldo ── Nosotros le valemos madres.
── Tú quizá pinche nahual, yo no, a mi la pinche Lili me quiere wey ── Osvaldo acomodó su copete y se acomodó en el asiento ── Yo estoy tranquilo wey, la ayuda ya viene asi que no hay pedo.
── Ojala la Lili no choque o algo wey, nos quedamos sin la ayuda y sin la pinche gasolina ── Murmuró Aldo mientras cruzaba sus brazos.
Roier miró a su amigo rápidamente y le soltó una palmada en la cabeza ── No digas esas mamadas wey, ¿quieres que me infarte o algo?, ¿qué haría yo sin Lili?, no mames, no me quiero quedar solo en este mundo de mierda ── Murmuró el pelinegro.
── ¿Y nosotros verga? ── Cuestionó Osvaldo con un tono ofendido ── Nos tienes a nosotros.
── Si pendejo, pero ustedes jamas serán ella ── Respondió rápidamente el pelinegro ── Si le pasará algo no encontraría a nadie más como Lili... ── Roier se acomodó en el asiento trasero y cerró los ojos ── Pinche lluvia culera.
Aldo miró a Osvaldo con las cejas alzadas ── Funcionó el plan ── Susurró Aldo.
── Se logró mien, que emoción ── Respondió Osvaldo ── Unos meses más y ya se viene el bodorrio mien, y luego los hijos me cae.
Roier encendió su celular y se encontró con un mensaje de Lili, el cual decía que estaba cerca del lugar en donde se encontraban barados, el pelinegro suspiró y relamio sus labios, la lluvia era cada vez más fuerte y esta cubría las calles en su totalidad, esperaba que Lili no tuviera ningún inconveniente, y llegará rápido, no solo para ayudarlos, si no también para asegurarse de que Lili estuviera bien.
Quería a su Lili en una sola pieza.
── ¿Y si después nos vamos a chingar un helado wey? ── Cuestionó Osvaldo ── Se me antojó uno wey, algo heladito para acompañar el clima.
── No antojes wey ── Dijo Aldo mientras tocaba su barriga ── Ya me va a dar hambre no mames.
── Paso wey, estoy llenisimo, me zampe dos hamburguesas, rompi mi dieta fit ── Murmuró Roier ── Ya valieron verga los abs.
