CAPITULO 5

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*



— ¿Que estabas hablando con Tom? - mi hermano se acerca a la mesa llena de comida en la que estoy, hay de todo aquí, desde salado hasta dulce y mucho alcohol fino.

— Nada que te importe - digo y muerdo una fresa.

— Te está coqueteando tonta, te diste cuenta ¿No?

— Pues no, solo fue una charla normal, además me cae mal, prefiero a Bill.

¿Tanto se notó que era coqueteó?

Obvio que lo noté solo me hago que no sé nada.

No quiero que me vean interesada en el.

— Si, solo no digas eso, por qué puede pasar algo entre ustedes en menos de lo que imaginas, ya sabes, así es la vida hermanita.

Puede que el tarado de mi hermano tenga razón, muchas veces he dicho a algo que no y termina por sucederme.

— Solo ten cuidado con quién te metes Megan, no quiero terminar haciendo lo que pasó la última vez.

Un corrientazo pasa por mi cuerpo, recordando lo que pasó esa vez, con uno de mis ex, mi hermano lo vio cuando me pegó una bofetada
Esa noche el lo golpeo hasta dejarlo en el hospital por unos cuantos días, el nunca dijo nada por qué mi hermano lo amenazó.

El es protector, es mi hermano y es quien debe hacerlo cuando mi padre no pueda o no se entere, que por lo general no lo hace, por qué no me gusta. Así que es a Alex a quien le digo lo que pasa en mi vida, a veces.

*

— ¿Por cuanto tiempo se irán? - cuestiono a mis padres mientras como de mi cereal sentada en su gran cama.

— La semana completa cariño, no te preocupes te dejaré suficiente dinero en la tarjeta, tu hermano irá donde su novia - dijo mi padre, quien con prisa arreglaba una pequeña maleta con sus cosas.

— ¿Que? Eso no me lo habías dicho papá

— Ni nosotros, nos dijo hace un momento, tranquila hija, dile a Alice y Verónica que vengan así no te sentirás sola ¿Está bien? - toma mi cara en sus manos y me da un beso en la frente.

*

— ¡Hello! ¡Hello! - veo cruzar la puerta de mi casa a Alice quien grita y junto a ella a Verónica - ¿Cómo estás bitch?

— Hola niñas, muy bien ¿Y ustedes?

— Me alegro, nosotras muy bien, aunque algo cansada de escuchar de Bill, Alice no ha dejado de hablar de el

— ¡Si! Cuéntame, que paso, como pasó, todo.

Después de que les dijera lo que pasó esa noche, y lo que me hacía sentir Tom, terminamos en la piscina de mi casa.

— ¿Estarás sola toda la semana? - dijo Verónica sentándose al borde de la
piscina

— Si ¿Podrían quedarse conmigo mientras llegan mis padres?

Alice sale del agua y bebe de su gaseosa — Pero claro que sí, debemos pensar que haremos, y se me acaba de ocurrir una idea - dice y nos da una sonrisa pícara que ya conocemos.

— Si estás pensando que llame a Bill, no lo haré.

— ¿Por qué no?

— Por que estamos solas en mi casa, estás loca por el, y temo a que hagas algo estúpido.

— Pero Megan, estamos de vacaciones, no está tan mala la idea no crees

— ¿Tú también Vero?

— Megan no seas aburrida, aparte de lo que nos dijiste te conozco y sé que te gustaría que Tom estuviera aquí ¿o no?

A veces odio que me conozcan tan bien mis amigas, y bueno si, no lo negaré.

Me gustaría que el taradito estuviera aquí, y que mejor que no están mis padres.

Eres una pícara Megan.

Te mueres por el, admítelo que te encanta.

Mi conciencia no me deja en paz, pero si tiene razón.

— La vida es una - Alice pone su mano en el aire invitándonos a poner la de nosotras encima.

— Si a todo - dice Verónica

Suspiró y las miro — Hagámoslo

— ¡Si! - Llevamos los brazos hacia arriba y gritan como locas

— Llamalo, espero diga que si, además es fin de semana - dice Alice super emocionada.

~

Hola
— Hola Bill ¿Cómo estás?
— Bien Megan ¿Y tú?
— Bien gracias, oye Bill ¿Que haces?
— En casa ¿ Y tú?
— Si también, oye ¿Que te parece si hacemos algo hoy? Estoy con mis amigas
— Me parece bien
— Vale te envío la dirección por chat
— ok, nos vemos.

— Que loquita, pareces una niña pequeña saltando a mi lado.

— Lo siento, es que el me encanta.

— ¿Vendrá solo?

— No sé vero, pero por el momento creo que sí.

— ¡No puede ser! ¡Es el día más feliz de mi vida!  - dice Alice y se lanza al agua.

*

Estamos jugando en la piscina, hasta que veo a una de las empleadas venir hacia nosotras.

— Señorita Megan, un chico en la puerta pregunta por usted ¿lo hago pasar? Se llama Bill

Alice grita— ¡Llegó!

— Si por favor, gracias Juana, Alice actúa natural por favor

Rodea los ojos — Tranquila ya se, no demostrar el hambre, entiendo.

— Hola Megan, tu casa es muy linda - dice Bill entrando con una gran sonrisa.

— Gracias Bill, ven vamos a la piscina

Veo como la cara de Alice cambia de emoción a una de estúpida enamorada.

— Ellas son mis amigas.

— Hola, mucho gusto chicas.

— Hola - dicen al unísono

— Soy Verónica - le da la mano.

— Y yo Alice ¿Cómo estás?

— Bien chicas ¿ Y cuál es el plan?

— Bueno cualquiera que se nos ocurra, tengo casa sola por toda la semana - pongo mi brazo en el hombro de Bill.

— ¿También se fueron tu padres? - cuestiona el gemelo con cara de asombro.

— Si ¿Por qué? ¿Los tuyos también?

— Si, igual toda la semana.

— Osea estás solo también - habla Alice con picardía

— Si, bueno, con mi hermano. Quedamos al tanto de algunas cosas de papá en la empresa.

Al decir eso lo recuerdo, su cara, sus ojos, su nariz, sus labios, su aroma.

Admitiré que me gusta, pero me da miedo ver de esa manera a Tom kaulitz, miedo por enamorarme, es lo que no quiero que pase.

Por qué una vez que pasa, es como si la otra persona tuviera control sobre ti, y es lo que no quiero, por qué el que se enamora pierde.

Y Tom se ve que es un hombre que ha tenido las chicas que ha querido, que no está acostumbrado a un no, el guapo de su grupo de amigos. Lo se, aunque no los conozca.

Es el fuckboy, que con su mirada solamente te pone nerviosa, pero que quiere protegerte, y quiere que solo seas para el.











- Espero les guste, pueden dejar sus comentarios, 💋 besos -

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