another day

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capítulo uno,

Suspira viendo como aquel cliente abandona la tienda con su café y una bolsita con semillas en mano, se da la vuelta y limpia lo poco que ensucio, logrando que el lugar se vea limpio y ordenado, revisa la hora, suspira de nuevo y mira la ventana, esperando que alguien llegué; siempre esperando.

Pensando en todo y nada, sabe que nadie llegará en 10 minutos, es el tiempo que queda para que su turno acabe, piensa en lo que hará cuando llegue a su casa, le dará la cena a su gato, se dará una ducha, cenará, revisará sus pendientes y luego dormirá mientras suena música relajante de fondo.

Cuando la alarma de su reloj suena, suspira y se da la vuelta para cruzar la puerta y dirigirse hacia el cuarto de empleados para quitarse el delantal, tomar su mochila e irse de aquel lugar.

No tarda mucho en llegar a su casa porque no es muy lejos. Deja las llaves en el mesón, se descuelga la mochila, sonríe hacia su gato por poco segundos y luego suspira.

– Hola pequeñín, ¿me extrañaste? yo sí te extrañe a tí – le dice Felix hacia el pequeño felino que se restriega su cabeza en su mano.

Lee Felix, un joven chico Australiano que ahora vive en corea, estudia repostería, vive solo y, no tiene amigos, no habla con nadie, no tiene ningún contacto agregado además de su poca familia y tampoco se queja, bueno, sí se lamenta pero no se queja.

Es decir, está acostumbrado a pasar sus días en soledad, no completa porque claramente su pequeño gatito Melón lo acompaña y debes en cuando habla con su jefa, su compañero de trabajo, y obviamente con los profesores. Es decir, gente que pasa de los 30 años, probablemente.

No es que haya hecho nada malo, para nada, simplemente la gente no lo nota, lo dejan de lado, intento hacer amigos pero siempre lo dejaban de lado al mes o parecido, y de tanto intentarlo se cansó, luego lo acepto y termino con acostumbrarse, ya no le pareció desalentador simplemente estar siempre solo, así era la vida que le tocó lamentablemente.

Felix, suspira, entra al baño dejando de acariciar a su mascota y entra al baño de su departamento, vive solo porque después de que empezará a trabajar (porque quiso) desde los 16 años, y que a los 18 tuviera lo suficiente ahorrado para irse, sus padres le regalaron un departamento, así que ahora vivía ahí, y no se quejaba pues la universidad le quedaba lejos en donde anteriormente vivía con sus padres y hermanas.

Al mirarse al baño hace un mueca, tiene ojeras, el pelo desordenado y piensa que quizás esta más delgado. Nunca se ha quejado de su belleza, bueno, quizá un poco sí cuando era más pequeño porque los niños le hacían burlas por sus preciosas pecas, al ser el único con ellas, Felix a veces deseaba poder tener otro rostro, porque que a los 13 te digan que eres horrendo y que nadie te querrá nunca, te hace querer poder quitarte el rostro y tener uno distinto, uno que sea aceptado.

Suspira recordando aquello, ya no tiene esos pensamientos, no le molestan y tampoco le parecen lindas sus pecas, solo están ahí. Como la mera existencia de él mismo, al menos eso siente él.

Poco a poco se desnuda para meterse a la ducha, abre la regadera y deja que el agua empapé su delgado cuerpo. Suspira y se dedica a bañarse.

Al salir se envuelve en una toalla y se cambia, se cubre con su pijama afelpadito y luego se seca el cabello; al finalizar se dirige a la cocina y llegando a la conclusión de que no tiene muchas ganas de nada, decide comer algo ligero, un sándwich, un durazno en trocitos y un té. Cena, lava y limpia lo que ensució, toma a su gato en brazos y se van ambos al cuarto del humano.

Felix lo deja en la cama y checa rápidamente sus cuadernos y agenda, dándose cuenta que efectivamente termino sus pendientes en la biblioteca esta mañana y que podía dormir plácidamente.

Abrió un poco sus cortinas y ventana, le gustaba sentir aquel aire fresco abrazar su cuerpo, se metió bajo las sábanas sintiendo como su gato se metía igual.

Cerro los ojos, sintiendo unas cuantas gotas abandonar sus apagados y bonitos ojitos. Quedándose dormido al poco tiempo

Finalizando así, otro día. Completamente igual a todos los otros.

another dayWhere stories live. Discover now