Decode (Tom Kaulitz)

Capitulo 3.

Ya había perdido la cuenta de cuantas cervezas me había tomado, tenia la vista borrosa. Estaba tan mareada que me tropecé, caí sentada y no me moví mas, ahora observo desde el suelo como Tom esta manoseando a una perra de la cual mañana ni siquiera se acordara el nombre.

¿Porque tiene que ser así? ¿Como no se da cuenta?

Tome el ultimo sorbo de cerveza que me quedaba en la botella que tenia en mano, de un impulso la estampe contra el suelo haciendo que se quebrara.

Me levante del suelo rápidamente para ir a buscar otra cerveza pero termine en el suelo nuevamente solo que esta vez no pude ni siquiera sentarme y poco a poco comencé a ver puntitos negros.

Narrador externo:

Bill estaba ya apunto de arrancarse los pelos porque no encontraba a Mack por ningún lado, hasta que vio una silueta en el suelo, para ser mas exactos la silueta de una trigueña con rulos, la falda mas arriba de lo que se debía y el delineador corrido por el llanto.

Era ella.

– Ay mierda, mierda, mierda –repetía Bill sin parar mientras se agachaba hasta la altura de su amiga.

Comenzó a golpearla levemente en la cara al ver que sus ojos se cerraban.

– No, no, ¡no! Abre los ojos estúpida, no te desmayes.

Georg y Gustav miraban con preocupación la escena.

– La descuido cinco minutos y ya quedo muerta –Bill alegaba al aire mientras trataba de despertarla.

– Ya esta desmayada, no va a reaccionar –dijo Gustav mientras se levantaba del suelo.

Georg tomo a Mackenzie en brazos al estilo princesa, todos se acercaron a el sillón donde estaban al principio, ahí acostaron a Mack. Luego de compartir una mirada complice Bill le lanzo un vaso de agua en la cara.

Poco a poco volvió a abrir los ojos y las primeras palabras que salieron por su boca fueron:

–Tom...donde...con esa perra...ay.

Y vomito.

–Bótalo todo –Bill dijo tratando de reconfortarla– todo estará bien.

Georg, Gustav y Bill ya no sabían que decir, pero esta no era la primera vez que pasaba, todos sabían que algo pasaba entre Tom y Mackenzie, pero nadie sabia que exactamente, no se trataban como se tratan una pareja de amigos normales, pero siempre que se hablaba del tema negaban todo.

–Bill, me siento muy mal –logro decir finalmente la castaña cuando dejo de vomitar.

–Ahora nos vamos y te quedas en mi casa –Bill tomo a Mack del brazo para ayudarla a pararse.

Luego de un tambaleo logro finalmente ponerse de pie.

Mackenzie miraba a un punto fijo sin moverse, preocupado por si se volvía a desmayar Bill siguió su mirada, ahí lo entendió todo. Tom estaba besándose con la tercera chica de la noche.

–No los mires –Dijo mientras le limpia las lagrimas a Mack– de verdad, no vale la pena.

Tom desde lejos vio la escena, sintió que debía hacer algo pero al final como siempre ignoro sus sentimientos por completo.

Una vez ya en casa, apenas entraron Mackenzie se acosto en el sillón de la sala de estar y cayo muerta dormida, Bill no quiso moverla así que solo subió a su habitación a dormir también. Georg y Gustav se fueron luego de dejarlos en casa.