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Capítulo 3: La advertencia (parte 1)

El niño de cabello azulado siguió a la otra niña que iba caminando a lo que era su casa, lejos de las personas. Se miraron en el camino y ella le regalaba una simpática sonrisa, quería ayudarlo y lo llevaría con su padre pronto.
La puerta fue golpeada levemente y un hombre de cabello blanco salió viendo a su hija y al otro niño.

-Cristal... ¿Quien es este niño? -veia su cabello que le llamó su atención y sus ojos azules como el mar- Respóndeme hija

-Es un amigo que encontré en el camino, dijo que estaba solo y no tiene familia... ¿Podemos ayudarlo verdad papi?

-... Si hija, podemos ..¿Cómo te llamas,pequeño?

-s-soy.... Atlan... Yo soy... huérfano

-¿Atlan? Mmm bueno, si es así...puedes quedarte aquí, yo te cuidaré

-gracias señor...mm

-Boreas, mí nombre es Boreas..

-gracias señor Boreas -le sonrió el niño con ternura-

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-¡GAEL! -llama la mujer en voz alta buscando al niño que estaba jugando o más bien distrayendose en el patio de su casa- ¿Donde está ese niño...? -lo siguió buscando y en eso su pareja salió medio dormido de su habitación -

-¿Porque rayos gritas? Me despertaste ...

-G-Gael no está... No lo encuentro

-mejor, así estamos más tranquilos sin ese mocoso

-no digas eso, sigue siendo mí hijo

-bueno entonces búscalo bien, seguro está haciendo algo afuera, que se yo... Pero no me molestes -dijo y regresó a su siesta -

Mientras el niño se levantó de dónde estaba y fue al comedor preguntándose si lo habían llamado y la mujer lo miró.

-¿Donde estabas?

-en...el patio...

-¿No escuchaste que te estuve llamando?

-yo...

-¡Cállate! Te sientas frente a la pared y te quedas ahí hasta que yo te lo diga, ¿Entendiste?

-asintio temeroso y rápidamente fue a hacer lo ordenado-

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El joven Asher por su parte, estudiaba filosofía junto a su madre quien le había heredado el amor por aquellas artes, no solo eso, le gustaba de vez en cuando salir solo y espiar las cartas que mandaban a sus vecinos. Era entretenido para el, por suerte nadie lo había atrapado aún. Un pequeño travieso y un trabajo difícil para su madre.
Por otra parte, Terrence trabaja desde temprano hasta la tarde, aún siendo un niño tuvo que volver responsable muy temprano.  Lupe vivía con su madre y de ves en cuando eran visitadas por Apolo, quien cortejaba aún a la mujer y le llevaba algún presente a la niña cuando la veía. Algunas sentían celos, como normalmente era.
Darkside ya se había acostumbrado a su estadía con sus hermanas y a la ausencia de su padre. Algunas veces cuando veía a Persefone, debía salir corriendo antes que ella lo alcanzará, lo único que lo protegian eran las Erinias. Por su parte, Hades trataba de calmar aquella ira de su esposa aunque era tan difícil como decirle a Hera que dejara en paz a los hijos de Zeus y a las mujeres.
Flamenta vivía muy cómodamente en el Olimpo a diferencia de los demás, lo que si... No le agradaba Afrodita al ser la favorita de su padre, sintiendo celos por aquello.

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Han pasado 10 años y la vida de los ocho  jóvenes no había cambiado mucho.

Gael trabajaba ahora para su familia, su madre estaba enferma gravemente y necesitaba medicamentos, y ellos al ser pobres, el necesitaba trabajar para conseguirlos mientras el padre se emborrachaba y aveces se iba y no volvía después de dos días.

Darkside ya había logrado el acceso al palacio de su padre, cruzaba miradas con Persefone quien ya se había logrado controlar y Hades lo empezaba a considerarlo más su hijo ahora que convivían un poco más.

Asher se estaba graduando de la universidad finalmente, se sentía algo completo debido a que ya tenía todo pero sentía que algo le faltaba aún pero sin la idea de Qué.

Cristal y Atlan convivían el mayor tiempo juntos sin problemas, se llevaban bien y eran cuidados por Boreas quien les había revelado la verdad a Atlan de su origen, razón por la que era muy buen nadador y había sido reconocido en su escuela por aquello, participó en juegos Olímpicos de natación en los cuales ganó en la mayoría de veces. Mientras Cristal se volvió popular, a las chicas le gustaba su color de cabello y su estilo, también habían chicos atrás de ella pero era muy sobreprotegida por Atlan, a quien no le gustaba verla con otros.

Terrence seguía con sus mismas rutinas en una vida muy monótona de trabajo y cosecha, su madre que pocas veces le prestaba la atención que necesitaba... Todo seguía igual para el, solo anhelaba un pequeño cambio, algo que lo hiciera salir de esa rutina de siempre de la cual ya estaba cansado.

Flamenta ahora que tenía edad suficiente para pelear, su padre solo le permitía entrenar con el, aunque ella nunca ganaba, aprendía algo nuevo en cada entrenamiento. Era la favorita de las nietas de Hera,que Ares le habría dado.

Lupe había sido educada para ser una de las sacerdotisas de Apolo, su padre. Aunque ella quería más que eso, sentía que la vida la prepararía para algo mucho más importante que eso, si bien servir a Apolo era algo grande, lo que vendría lo sería aún más. Pero Lupe no podía ver el futuro, solo portaba el elemento de Luz el cual ni ella era consciente de serlo.

Nadie lo era, ni sus padres lo sabían. Hasta que Hecate, diosa de la magia, se haría aparecer frente a ellos para advertirles que el peligro estaría cerca y ellos debían combatirlo....

Todos: ¿¡Que!?

Esta primera parte de "La Advertencia" es más bien como un resumen de la segunda parte la cual estará mejor y más desarrollada, la cual empezará con ellos ya grandes terminando el capítulo como termina éste pero aún mejor.
Espero que les guste y hasta pronto 🤗