KOO1;

2K 158 17
                                    

📍 Madrid, España.

ESTABA TODAVÍA EN EM CAMERINO IMPROVISADO que me facilitó el equipo de trabajo de Ibai terminando de hacer las trenzas a Stormi.

¿Quieres comer algo, amor?

No, Kiki.—me sonrió y quise apretujarle sus cachetes por lo tierna que se veía.—¿Mami está molesta porque vine contigo?

—No, mami está por llegar para quedarse contigo y cuando yo termine iremos a un concierto.

—¿De papá?

—No, chiquita. Es de un artista que me gusta mu..

¡Myke Towers!.—asentí.

Kylie siempre discutía conmigo porque le andaba switcheando el idioma a Stormi pero quería que supiera español también, solo los ingleses hablan una sola lengua y si bien es cierto que ella lo es pero su tía es mexicana y su próximo tío será boricua así que si, debe saber comunicarse.

Y leyeron bien, "próximo tío" porque lo importante es la intención y hay que manifestar, ustedes saben.

—Mmm...—se quedó pensando.—¿Puedo agarrar tu lipstick?

—Tu mamá me va a matar, ponte el brillo mejor.—soltó una carcajada, la puerta se abrió dejando ver a una Kylie algo preocupada.—Chiquita, ve a buscarme mi cadena en el maletín, porfavor.

—Voy.—se bajó de mis piernas corriendo y fue a donde la mandé.

—¿Que chingados te pasó a ti?

Peleé con Travis.

—¿Por qué?

—Dice que quería quedarse con Storm y que la traje a España sin consultarle.

Que le baje de huevos, que mucho jode ese tipo no, que pereza.—mi hermana de quedó analizando lo que dije.—Fue culpa mía, yo la traje.

—Ella quiso venir contigo, acabas de volver de un tour de dos meses y sabes bien que te quiere más que a sus propios padres, yo no iba a negarle que venga.

—Pero se te armó un problema con Travis.

—Deja eso, ya lo solucionaré después.—se acercó a mi, se fijó en mi maquillaje.—Es sutil.—asentí.—Pensaba que ibas a ponerte algo más llamativo para decirle al mundo que eres una Kardashian-Jenner.—la pequeña volvió con la cadena, en ella colgaba una "S".

—Gracias, amor.

Se rió.—Creo que pueden ir a cenar en lo que me entrevistan, nos vemos en el lugar del concierto más tarde.

—¿Quieres que te llevemos algo para comer?—asenti.—Despídete de la tía.

Chao, Kiki.

¿Chao, desde cuando?.

—Te dije que mi sobrina no hablará únicamente eslavista.—ambas reímos.—Te amo, princesa.

—¡Te amo!.—respondió antes de tomar la mano de su mamá.

Agarré mi teléfono para fijarme en la hora y comencé a ponerme alfo nerviosa al ver que ya faltaba poco para la entrevista, decidí ir hacia la sala.

—¡Hola!.—corrí para abrazarlo.

—Nadie se había alegrado tanto de verme nunca.—soltó su característica risa.

—Tus fanáticos.

—Es verdad.—se rascó la nuca.—¿Estás preparada?.—asenti.

—¿Nos tomamos una foto?

MADRID ; myke towers Where stories live. Discover now