EL CAMINO DE REGRESO

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La nieve ya casi derretida nos recibió en escocia, pero una tormenta se avecinaba. Nuestro castillo ya era visible después del largo y grande prado solitario.

Abrimos la puerta de nuestro castillo que se encontraba justo como lo habíamos dejado, el olor a humedad estaba presente, los licántropos se habían quedado atrás, para transformarse en forma humana y poder cambiarse, en realidad solo tomaron muy pocas cosas de su antiguo hogar.

- ¿Soy yo o el castillo se siente más pequeño?.- dijo Camille.

- Bueno después de tantos licántropos que se quedaran creo que se sentirá asfixiante.- dijo Vanesa.

- Ya basta Vanesa.- le pidió Velkan acercándose a ella.- Gracias a ellos tu estas viva, no lo olvides.- le dijo Velkan a lo que Vanesa solo apretó los labios de rabia.

- Y por favor, sean cordiales, no quiero más peleas con Nicoleta.- dijo Velkan mirando a Razvan a lo que me reí un poco.- Ni con Leonardo.- esta vez mi hermano mayor me miró a mí y de inmediato se borró mi sonrisa.- Lo perdieron todo, gracias a Drácula, a sus amigos, a sus aliados, sus tierras, ¿les suena esta historia familiar?, sean considerados, como les hubiera gustado que los trataran a ustedes hace siglos atrás, nunca habíamos congeniado con un clan de licántropos, y que a mi parecer parecen ser de los buenos, no lo arruinen hermanos.- nos advirtió Velkan.

Entonces me quede pasmada, mi hermano mayor tenía razón, ellos estaban pasando por lo que nosotros pasamos hace muchos años, cuando tuvimos que huir de la noche a la mañana y por el mismo enemigo.

Los licántropos entraron por la puerta principal, analizando el panorama detenidamente, Leonardo posó sus ojos en cada rincón de la casa, repasó cada mural de piedra y cada abertura entre ellas.

Su rostro reflejaba cansancio pero detrás de él una profunda tristeza, quise alegrarme y burlarme pero extrañamente eso no pasó.

Florencia solo miraba a su alrededor aun no aceptando el hecho de que lo habían perdido todo

Nicoleta miraba sobre su hombro, como si el castillo no fuera lo suficientemente digno para ella, y después miraba a Leonardo, que cuando esta lo miraba su mirada al igual que la de su hermano reflejaba tristeza.

No sentía compasión por ellos pero tampoco me alegraba su desgracia, quizá porque la historia me sonaba familiar.

- Nosotros no tenemos servidumbre, los cuartos de arriba de la planta izquierda son los que pueden elegir, esos nunca se han ocupado, tienen camas y ventanas.- dijo Velkan mientras miraba a Leonardo quien parecía no prestarle atención y estar sumido en sus pensamientos que apostaría no eran agradables, Nicoleta solo asintió a Velkan en nombre de su hermano, todos los licántropos tenían hojas en el cabello y machas de suciedad, Leonardo aun tenia sangre en sus vestimentas al igual que mi hermano.

- ¿hay algún rio cerca?- preguntó Nicoleta.

- Si algo así, es un lago que está a menos de dos kilómetros por el lado este , el agua es fría pero limpia.- Dijo Edric..- También es importante que sepan que por aquí casi no hay licántropos están casi extintos.-

- Como en nuestro antiguo hogar.- susurró Leonardo con pesar y furia.

- Demos privacidad a los Greco para que se acostumbren al castillo, mi familia y yo estaremos en el comedor, como comprenderán no comemos comida humana, pero iremos a cazar animales, y ... si tenemos suerte vampiros.- dijo Velkan.- Kenway, tú y Camille podrían ir a cazar ¿un oso quizá?.- dijo Velkan confundido a lo que Camille entrecerró los ojos.

Perseguida Por Drácula, la Historia De Valloleth Winston.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora