Nerd = Playboy [Yizhan]

05

En esos cuatro estresantes días en los que estuve pensando, estuve muy distraído. Mierda así voy a facturar mi futuro. Pensaba en la propuesta de Yibo, en la que el beneficiado si acepto, soy yo. Si me acuesto con él, finjirá ser mi novio, el idiota me pagará, y aparte Yibo piensa pagarme aparte por acostarme con él.

Debía pensarlo, mi dignidad estaba en juego. Además, hablé con Yibo acerca de la grabación que me hizo en aquella noche, le reclamé del porque hiso eso. Al final llegamos al acuerdo de que yo no diría nada de su doble vida y él no le diría a nadie sobre este video. Por más que le suplique que lo borrará, el muy maldito quiere guardarlo de recuerdo, me avergonzó escucharlo decir eso.

Mis días largos se volvieron cortos por tanto pensar, la hora se iba volando. Al llegar a mi apartamento, vi un papel en el suelo delante de la puerta. Lo recogí para ver de que se trataba. Era un notificación del hospital, para que pague mi deuda. Mierda, había olvidado pagar la mensualidad qué debía, si no era su renta, era la deuda con el hospital. Estar ahogado en deudas no ayudaba. Ya tenía mi respuesta para Yibo, no tengo otra opción más que aceptarla.

Mi dignidad se fue al mismísimo carajo.

Ald Iá siguiente, en la universidad fui directamente a buscar a Yibo, fui a la facultad de administración.

Para mi desgracia me encontré con esa escoria que me hiso era propuesta para conquistar a Yibo. Como si nada me acorralo con su brazo al rededor de mi cuello, me sentí realmente incómodo. — Bien, dime, ¿Cómo te ha ido? —

— Pues... — Mire a un lado, ¿Qué se supone que le diga? ¿Qué me acosté con él sin saberlo? ¿Que él ya lo sabía todo? Mierda.

Justo alguien se acercó a nosotros, estando frente a frente pude verlo, era Yibo, Mierda, mi salvador. Escape del agarre del ese imbéciles y fui al lado de Yibo, susurré para que solo él me oyera. — Aceptó tu trato... —

Me miró disimuladamente y sonrió de lado. — ¿Qué crees que haces con mi novio? — Dio una mirada fulminante a ese bastado, quien sorprendido sonrió victorioso, que idiota. Sin más se retiró pensando que había conseguido lo que quería.

Suspiré aliviado. Yibo se paro en frente de mi mirándome mientras daba una sonrisa juguetona. Rayos, qué me viera así me daba miedo.

— Ya aceptaste, no hay marcha atrás, ¿Sabes? — Cruzó los brazos.

— Si... Lo sé. — Bajé la mirada. No estaba completamente seguro de hacer esto pero no me quedaba de otra.

— Bien, desde ahora, seremos compañeros sexuales, pasaré por ti todos los días. —

¿Eh? ¡¿Cómo que todos los días?! ¡¿Acaso quería dejarme inválido?! — Si... — Asentí levemente.

Yibo paso de largo dejándome completamente solo, maldito. Me dirigí nuevamente a mi facultad, tenía clases así que fui corriendo. Por correr terminé chocando con Ji Yang, me disculpé con él y quise salir corriendo nuevamente pero él me detuvo sosteniendo mi antebrazo. — ¿Sucede algo? — Lo miré confundido.