6)Dominated [Gallagher]

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Aidan estaba jodidamente caliente. No pudo evitarlo. Estaba estudiando en su dormitorio y antes de darse cuenta, se puso a pensar en su novia, sus labios, su cabello, su coño y las mueca que hacía cuando se corria.

Cerró su libro de un golpe, la tinta fresca probablemente sangraba en la página anterior. Agarró su mochila y corrió hacia los dormitorios de las chicas, ocultando su dolorosa erección.

Claro, Aidan podía hacer sus necesidades, pero por alguna razón, sabía que T/N estaría más que feliz de seguirle la corriente.

Él sonrió, pensando en todas las cosas que estaba a punto de hacer antes de entrar en su dormitorio, sin siquiera llamar.
T/n ya podía oler su colonia, así que no se molestó en mirar hacia arriba, ya que sabía quién era. Se sentó en su sofá, leyendo un libro sobre alquimia.

Aidan se quedó allí, impaciente mientras ella pasaba la página, desinteresado. Su postura era incómoda, siendo difícil ignorar la sensación en su ingle.

"¿Puedo ayudarte, cariño?" Ella zumbó, mitad pregunta, tubo una respuesta automática. Sin otro segundo, corrió hacia ella, atacando su cuello con lujuriosos mordiscos y besos.

"Estoy tan jodidamente caliente", gruñó en su oído. Ella se rió entre dientes, dejando su libro.

"¿Cómo crees que debería ayudar?" Empezó a trazar el contorno de sus pantalones.

Él gimió, "A la mierda cualquier cosa t/n. Por favor, solo tócame", gimió.

"Bien, pero quiero probar algo". Ella decretó. Hizo una pausa, mirando hacia arriba, sonriendo y emocionado con su mirada misteriosa.

Sus ojos brillaban con picardía, chispeando
algo en Aidan, ansioso por hacer lo que ella deseaba. "Súbete a la cama". Ordenó, ligera desviación en su tono. Aidan captó su 'idea' y saltó hacia la cama, parándose a los pies de ella, sonriendo maliciosamente. Ella caminó lenta y agonizantemente, cada paso creando tensión mientras miraba fijamente su mirada oscura. "Dije que te subieras. Veo que no estás siguiendo mis órdenes".

"Pensé que querrías desnudarme antes que yo". Ella suspiró, quitándose la bata y desabrochándose lentamente la camisa. Ella besó su mandíbula suavemente, moviéndose hacia su pecho una vez que se reveló. Le quitó la blusa, se arrodilló hasta su abdomen, le quitó los pantalones y lo dejó en calzoncillos. Ella trazó su línea en V, provocando que él exhalara con fuerza, echando la cabeza hacia atrás. Ella lo empujó sobre la cama y él se apresuró a colocarse correctamente en ella. Caminó hacia el cajón de la mesita de noche, sacando algo de él; Una soga.

"Joder", gimió Aidan.

"¿Emocionado niño bonito?" Ella bromeó, acercándose, tomando sus muñecas y comenzando a atárselas.
"Mucho", exhaló, mientras T/N lo ataba al marco de la cama. Ella retrocedió, mirándolo mientras se retorcía debajo de mí en la cama. La forma en que sus músculos se tensaron, la forma en que se lamió los labios. Dios, este hombre era perfecto. Era fuerte, pero no voluminoso.

Aidan observó con sus ojos dilatados mientras ella se bajaba la falda, deslizándola lenta y factiblemente, mirándolo directamente a los ojos y mordiéndose el labio mientras lo hacía. "Dios, tus ojos. Esos malditos ojos". Él gimió, echando la cabeza hacia atrás con exasperación.

"Ah, ah, mírame cariño". Se estiró, agarrando un puño lleno de cabello y tirando de su rostro en su dirección. Él gimió, y ella alcanzó su parte superior. Sus ojos se demoraron mientras ella desabrochaba lentamente la tela, separando cada botón. La anticipación alcanzó un clímax cuando llegó al último, revelando su pecho desnudo.
"¿Sin sostén?" Él ladeó la cabeza.

"¿Sin sostén?" Ella se burló de él. Sonrió, aceptando su derrota. Sus ojos viajaron de regreso a su pecho, bajando lentamente por su torso hasta su ingle. Todo lo que quería era estirar los brazos y tocarla, complacerla, hacerla sentir como nadie más en el mundo podría hacerlo. Sólo él. Solo él podía hacerla sentir como él lo hacía.

Sus dedos se engancharon alrededor del hilo de sus bragas, empujándolos lentamente hacia abajo, revelando su coño pulgada a pulgada. Su boca estaba prácticamente babeando cuando vio el desorden entre sus piernas. El lío cálido y pegajoso que dejó su excitación. Ya podía sentirla alrededor de su polla. Deslizándose arriba y abajo, bombeándolo y tomando hasta la última gota de su semilla como la niña buena que es. Ya podía saborearla; siente su lengua entre sus pliegues, sus labios envolviendo su clítoris y succionando.

Sus dedos se sumergieron entre sus muslos, recogiendo el desorden antes de empujarlos hacia su boca, permitiéndole probarlos y limpiarlos. "Buen chico." Ella susurró. Las mariposas estallaron en el estómago de Aidan. Por mucho que le encantaba dominarla, él no podía negar el calor que hacía cuando ella tenía el control.

"Por favor, dame más", gimió mientras los dedos de ella dejaban su boca. Se quedó allí por un segundo, debatiendo qué hacer, antes de gatear sobre la cama y colocarse justo encima de su pecho.

"¿Más?" Ella bromeó, moliéndose lentamente en su pecho. Podía sentir los líquidos humedeciendo su pecho mientras ella lo frotaba lentamente.

"Por favor. Quiero saborearte". Ella sonrió, moviéndose lentamente hacia su rostro y sentándose justo en su barbilla. No lo pensó dos veces antes de estirar el cuello hacia abajo y jugar con su coño. Ella tiró de sus hermoso cabello mientras él lamía, devorando todo lo que podía poner su lengua. El sonido de sus gemidos hizo eco en sus oídos, y aunque estaba disfrutando esto, su erección era dolorosa en este punto.

"Joder... joder- ahí mismo Aidan justo ahí lo estás haciendo tan bien, oh apuesto a que estás disfrutando esto ¿no es así mi putita?" Se las arregló para esforzarse. Ella asintió levemente, amenazando su orgasmo.
"Oh, justo ahí", gimió ella. Se preparó para lamer sus fluidos, pero antes de que pudiera liberarse, ella se levantó de sus labios. Abrió la boca para protestar, pero ella lo interrumpió inclinándose para besarlo. "¿Quieres que cabalgue tu polla, cariño?" Ella susurró contra sus labios.

"Por favor, por favor", dijo con la voz entrecortada. Ella sonrió ante sus gemidos, moviéndose lentamente por su torso y colocándose encima de él. Ella tomó su pene, provocándolo lentamente dejándolo rozar su abertura, luego moviéndolo de un lado a otro a través de sus pliegues. Después de que él se retorciera un poco, ella se bajó lentamente, sintiendo que él la llenaba. Ambos gimieron en sincronía, ella se inclinó para besarlo mientras comenzaba a moverse hacia arriba y hacia abajo.

"Qué buen chico-" ella gruñó mientras él la llenaba. Nuevamente, la misma sensación surgió en su estómago. Las palabras hicieron que su corazón diera un vuelco. Empujó hacia arriba, provocando un jadeo de ella. "¡Mierda!" Ella gritó. Aidan vio como su miembro entraba y salía de ella, estirando sus paredes.

Él lo tomó como una luz verde para continuar y comenzó a follarla. Su cabeza rodó hacia atrás mientras lo montaba, tomada por sorpresa. Sollozos y gemidos ahogados salieron de ella, mientras luchaba por contener su orgasmo. Podía sentir su polla contraerse, estaba cerca. "Espera, cariño, solo un poco más", gimió, sabiendo las terribles consecuencias si no cumplía. Probablemente lo dominaría durante horas. "Muy bien, 3", sabía que estaba a punto de caer por el borde, pero no podía. Tuvo que esperar. "2", gritó a través de los pantalones. "1", los jugos de Aidan y los de ella se mezclaron y pintaron sus paredes, saliendo a borbotones de ella y sobre su polla. Salieron de su euforia antes de que ella se detuviera, tomándose su tiempo para besarlo descuidadamente.

𝐎𝐧𝐞 𝐒𝐡𝐨𝐭𝐬 +18!! 𝐆𝐚𝐥𝐥𝐚𝐠𝐡𝐞𝐫 𝐚𝐧𝐝 𝐇𝐚𝐫𝐠𝐫𝐞𝐞𝐯𝐞𝐬  Where stories live. Discover now