Dulce Lectora- Kyogai x Lectora

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-"Kyogai..." susurraste para llamar su atención mientras estaba escribiendo

-"Qué pasa-?" Preguntó volteando a verte y se paralizó al ver una expresión de nervios en tu rostro

-"Fuera... puedo salir afuera?..." murmuraste

Su corazón se detuvo un instante al oír esas palabras, creyendo que querías abandonarlo.

-"Oí... Oí el llanto de un niño..." agregaste jugando con tus manos nerviosa "Y pareciera que una tormenta viene... Por favor... déjame ir a ver..."

-"No, no, estás mintiendo... quieres irte..." estaba cegado ante aquella idea

-"Dejame mostrarte! Puedo demostrartelo! Realmente oí algo!"

Cuando quisiste salir por la puerta, el tambor sonó y viste otro cuarto del otro lado.

-"Kyogai... por favor..." le pediste

Negaba con su cabeza, y se alteró al verte correr rápidamente a las otras puertas, empezando a golpear los demás tambores cambiando constantemente los cuartos y evitando que puedas llegar a las puertas en algunos casos.

Pero no te cansabas, estabas decidida a salir.

Y en un pequeño desliz del demonio, abriste la puerta saliendo al patio, era de día pero había una gran tormenta encaminandose.

Y cuando estaba por tocar otro de sus tambores, en ese instante oyó el llanto del cual hablaste.

Caiste al suelo por lo rápido que había salido y gateaste hasta una canasta en donde viste a un niño llorando en ella.

-"A penas... debe tener unos días..." susurraste viendo al infante y oyendo un trueno asustando a ambos, haciendo que el bebé llore más fuerte

-"Alejate!" Una mujer salió de un escondite "Deja que se muera! Es una maldición!" Gritó en desesperación "No puedo volver con ese niño! Si digo que lo mató un demonio y vuelvo con su sangre no me van a juzgar!"

Te aterraste al ver a la mujer con un cuchillo en mano amenazandote para alejarte del bebé, pero no dudaste en tomarlo en la manta y apegarlo tu pecho.

Está helado...

Te diste cuenta al sentir su mejilla en tu cuello.

La mujer de abalanzó contra ti queriendo apuñalarte, pero con el sonido de un tambor esta cayó con una enorme herida en su abdomen.

-"(T/n), vuelve" Kyogai te dijo desde la oscuridad de su hogar "Pronto va a llover"

Volteaste a verlo nerviosa, y asentiste para ponerte de pie y entrar de nuevo sin ningún problema, sujetando al niño en brazos.

-"Pobre alma... Míralo nada más... a penas ha llegado al mundo y este ya le dio la espalda al entregarlo con una mujer que no lo ama..." murmuraste arrullandolo en tus brazos intentando que se calme "Debe tener hambre..."

-"Eh-! Qué haces-? Tú no puedes-!" Kyogai dijo rojo mirando a otro lado sonrojado al verte liberar tu pecho de tu kimono

-"He oído de mujeres que pueden lactar sin tener hijos! Por la estimulación en su pecho!" Dijiste acercando al bebé y este empezó enseguida a succionar tu pezón al encontrarlo "Tal vez no sea instantáneo! Pero quizá funcione!"

-"Eres realmente optimista... Ese bebé debería estar muerto en este momento... Piensa en que lo has salvado"

-"Lo quiero" mencionaste en una sonrisa mirándolo "Pensaba en la oportunidad de tener un niño contigo, aunque fuera imposible por ser un demonio... Pero si esto es lo que puedo tener, lo acepto con todo mi corazón"

Eventualmente lograste tu cometido, tu pecho poco a poco había comenzado a lactar ante la estimulación del bebé, quien a los pocos días ya se veía mucho mejor.

-"Kyogai~ deberíamos darle un nombre!" Mencionaste bañando con cuidado al pequeño quien disfrutaba tu tacto

-"Un nombre..." susurró mirando al bebé "...Kiseki" indicó

-"Yo tenía el mismo nombre en mente... Nuestro pequeño Kiseki"