3. Viernes

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Al contrario de Craig, el rubio llevaba un crush desde incluso antes que las asiáticas hicieran su efecto.

Tweek jamás pensó que podría pasar algo entre Craig y él. Extrañamente sucedió, pero no de la mejor forma.

Tweek siempre estuvo decidió a contarle sobre sus sentimientos a Craig, principalmente porque de todas las personas, el de azul era el más comprensible con él, era el único que calmaba su ansiedad.

El día que por fin decidió confesarse, fue cuando Craig terminó con él.

Es por eso que se alejo por completo. El que craig culminará con esa farsa significa que todo el trato que le dio era falso, que en realidad el no lo calmaba, sólo fingía y eso hacía efecto sobre él ¿cómo no pensó eso antes? El amor ciega.

Pero Tweek no amaba Craig solamente porque era su lugar seguro, Tweek amaba por completo al otro, era capaz de golpear a alumnos de mayor grado que buscaban problemas con él.

Una de las cosas que más extraña Tweek era que Craig le cuente sobre sus fijaciones. Como el espacio, los cuyes, o algo raro sobre incas de Perú.

Tweek amaba los ojos verdes, sus dientes chuecos, la voz nasal que cargaba, el olor que desprendía, la sensación al abrazarlo, las estupideces que soltaba de vez en cuando, todo.

Es por eso que cuando se acabó, se alejo. No quería que duela más de lo que ya estaba herido, no se sentía capaz de hablar con token o clyde de nuevo tampoco.

Así fue que ambos pasaron años sin hablarse, Tweek no era capaz de dirigirle la mirada a Craig, el contrario no se atrevía a verlo directamente tampoco.

Y ahora se encontraban haciendo ese estúpido trabajo. Estaba seguro que la profesora selastraga se dejó manipular por eric, o simplemente fue casualidad. Pero su tema era "La evolución de la lucha sobre los derechos lgtbq+"

El rubio se encontraba en una mesa, su pie se movía repetidamente y estaba mordiéndose las uñas como si no tuvieran fin, su mirada se fijaba en todas partes.

— Tweek  —

— ¡AH! — el nombrado volteo con completo terror, pero quien se encontraba ahí no era quien esperaba.

— Vi-vine a vigi-vigilar que las cosas no se salí-salieran de control — Jimmy se encontraba ahí dándole apoyo a su amigo.

Sabía lo difícil que era para Tweek luchar contra su ansiedad, suposo que tenerlo en la misma sala lo ayudaría a calmarlo un poco.

— Tweek — está vez la voz, esa voz nasal si era a quien estaba esperando.

El ambiente rápidamente se tenso.

— Bueno, te veo después amigo — soltó Jimmy antes de alejarse unas mesas detrás de unos libreros. Este sentía la mirada de Tweek detrás suya, pero tenía que dejar que su amigo arregle este asunto que lo carcumia tantos años con el ojiverde.

Craig no hablo más, jalo la silla que se encontraba al lado del rubio sentándose a su par.

4 años, 4 años en que no sabían nada del otro.

El silencio los carcumia por completo.

El rubio suspiro profundamente, el podía.

— bien — alzó su mano para abrir la libreta y mostrar unos apuntes — en lo que venias saque un poco de información sobre el tema, también a dividí como podríamos realizar el ensayo, podemos trabajar cada uno su parte, después me das la tuya y lo uno con la mía —

— hueles a café — bien, esa no era la respuesta esperada — ah, perdón —

Tweek dirigió la mirada a otro lado, no sabía cómo se sentía pero estaba seguro que sentía algo.

— está bien, casi siempre me lo dicen— el rubio quería terminar el trabajo rápidamente, pero al parecer el otro no tenía las mismas intenciones.

Craig no sabía que tan raro sonaría decirle "tienes el mismo olor de hace 5 años"

Tweek se mordió sus labios, estaba comenzando a desesperarse.

— ¿Sigues trabajando en la cafetería? —

Genial. Lo que le faltaba.

— Cómo siempre, Tucker — craig abrió un poco los ojos, tweek nunca lo habia llamado por su apellido, jamás.

Al no recibir respuesta el rubio le pasó sus apuntes junto un lapicero, pero cuando Craig iba a agarrar el lapicero sus manos chocaron.

Esto generó que ambos se alejaran algo frenéticamente, haciendo el ambiente aún más tenso.

— En efecto, g-gays — jimmy sonrió desde atrás, feliz de que nadie podría escucharlo.

Craig tosio y agarro el lapicero de nuevo.

— Entonces yo redactaria la Introducion y 2 párrafos — tweek ya estaba lo suficientemente ansioso como para siquiera seguir hablándole, así que solo asintió.

Sin darse cuenta estaba subiendo su mano para jalarse el cabello.

— okay y respeto a — Craig entró en valor y alzó su vista para encontrarse con, esos hermosos ojos avellanas con toques celestes.

A inicio se sintió raro, pero más que todo era nostálgico, el podría apreciar los ojos del contrario tranquilamente por toda la eternidad.

El momento no duró mucho porque noto al rubio jalonearse uno de sus mechones.

— Te vas a quedar calvo Tweek, suelta eso — Craig iba a agarrar de nuevo la mano de tweek para quitarla de su cabellera, pero lo detuvo la mirada del rubio.

No podía darse el derecho de tocarle la mano, ni de calmarlo, no eran amigos ya ahora siquiera.

Retrocedió su mano con una sensación amarga.

— egh, el calvo serás tú — de inmediato esa sensación se fue.

El de camisa poco a poco bajo su mano de su cabellera y las junto.

Craig mantenía una pequeña sonrísa.
De por sí era raro ver a Craig sonriendo.

— tampoco tenias que insultarme de esa forma —

—! Agh! Tu empezaste —  se quejo el rubio frunciendo el ceño.

— okay pelado — craig junto los apuntes de Tweek y sacó su celular, tweek rodó los ojos, Craig siendo el mismo tonto — tengo unas cuantas páginas y anotaciones en mis notas del celular. ¿Esta bien si.. — el rubio bajo la lista para ver la opción de agregar contacto en el celular contrario.

— Oh, claro — con algo de tics Tweek agregó su número en los contactos del otro. No sabía que tan bueno era eso, pero sólo sería por ese trabajo, ¿verdad?

Por un momento ambos olvidaron el por que dejaron de comunicarse.

Dos Idiotas - Creek -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora