ADIRA- La Reina de la Oscuridad *amor lesbico* mujer y mujer*

Capitulo 12

BEA

No tenía muchos ánimos de ver a mi madre después de lo ocurrido en mi última visita con Liam, pero la culpa no me permitió faltar.

Su humor había estado cambiando tan drásticamente que yo solo esperaba que al menos ella estuviese intentando mejorar.

Adira pasó por el escáner de seguridad justo detrás de mí, era inevitable que todos los hombres del lugar voltearan a verla, su belleza radiante era difícil de ignorar.

"Si Adira quisiera, podría masacrar a todos aquí en un abrir y cerrar de ojos." Pensé.

Uno de los oficiales escaneo a Adira para asegurarse de que no llevara ninguna arma, lo que el oficial no sabia era que ella no necesitaba armas porque ella era el arma.

La reina del mundo inmortal, caminó detrás de mí como un perrito obediente sin su correa. Miraba a sus alrededores como si todo lo estuviese viendo por primera vez.

"Como puede alguien tan peligrosa verse tan tierna al mismo tiempo!?"

-"Por qué me seguiste?" Pregunté -"Acaso creíste que intentaría huir o algo así."

-"Para nada" contestó Adira. -"Solo quería conocer más de ti"

El tono de sinceridad en su respuesta me tomó por sorpresa. Había creído que nuestro acuerdo solo se basaba en que yo le permitiera alimentarse de mi sangre.

El fuerte sonido de las rejas me sacó de mis pensamientos.

Al entrar vi que mi madre ya esperaba con varios juegos de mesa frente a ella.

Mientras me sentaba recordaba la incómoda visita que habíamos tenido recientemente.

-«Hola mamá» Salude sin mirarla a los ojos.

-«Hola hija» Contestó feliz de verme y pensé que quizás sería un buen día.

-«Y quién es ella?» Preguntó mientras se dirigía a Adira.

-«Ella es...» Contesté titubeando -«una amiga, Adira»

-«Es un placer conocerla» Dijo Adira con una sonrisa mientras recorría la silla para sentarse.

-«Estamos en confianza! Dime Sonia por favor» Dijo mi madre -«Y que te trae por aquí?»

-«Vine a ver de donde saca Bea todo su carisma» Contestó Adira.

-«Por suerte ella no sacó mi personalidad» Dijo mi madre

-«De su padre entonces?» Preguntó Adira y la expresión de mi madre se congeló, a ella nunca le había gustado hablar de mi padre.

-«No, tampoco de él» Contestó con la mirada agachada.

Adira se percató que había tocado un tema sensible y trato de retractarse inmediatamente.

-«Eso es excelente, su hija ha desarrollado su propio carisma, eso la hace única»

-«Así es, imagina si hubiera sacado mi personalidad, seguro seríamos compañeras de celda» Dijo mi madre.

-«Ni lo menciones mamá, no podría pasar el día entero ganándote en el juego de serpientes y escaleras» Reímos y seguimos intercambiando palabras.

Hacía mucho tiempo que mi corazón no se sentía tan tranquilo.

Quizá era porque Adira estaba ahí. La tensión que usualmente había entre mi madre y yo se había ido.

Jugamos un par de juegos de mesa y nuestras risas hacían eco en el cuarto de visitas, nunca había visto ese lado de Adira.

Estaba acostumbrada a ver a la asesina mortal, la formidable reina hibrida, pero hoy, se mostraba empática y sensible.