We Go Together

16 3 0
                                    


Harry cerró la puerta de su habitación detrás de él, sus padres estaban ausentes y dudaba demasiado que llegaran pronto. Colocó su teléfono conectado al cargador para después deshacerse de su suéter, aquel largo sueter cubría las partes sonrojadas de su cuello por las marcas hechas por Louis más temprano, a pesar de que no habían realizado algún acto en aquel arroyo, más temprano lo habían logrado hacer en el baño del colegio, Styles tuvo que dejar de lado su primera clase al igual que el mayor, aunque a éste último no le importa demasiado hacerlo. El rizado revisó su bandeja de correo, se encontró con aquella confirmación de entrevista para la universidad de Oxford que tanto anhelaba hace meses atrás. Con los dedos entumidos y los ojos cansados comenzó a escribir un correo de respuesta, lo miró varias veces antes de tomar la decisión de enviarlo o no.

A quien corresponda

"Por medio de la presente quiero agradecer en nombre mío y de mi institución que hayan autorizado mi pre-aceptacion hace un par de semanas atras y que ahora me hayan tomado en cuenta para presentarme ante un personal capacitado para una entrevista de aprobación para ser parte de la Universidad de Oxford. Desgraciadamente, ante circunstancias personales y de fuerza mayor me es imposible presentarme a aquella entrevista que estaba programada para el día 18 de éste mismo mes. Gracias por la oportunidad presentada, seguiré en busca de mis metas y sueños futuros.

Los saluda cordialmente; Harry Edward Styles."

¿Harry estaba dispuesto a dejar Oxford por Louis?
El menor miró hacia la nada por más de veite minutos, el nudo en su garganta disminuyó y su mente estaba de algún modo más clara. Cerró con ayuda de la pequeña equis roja en el superior derecho la pagina sin enviar aquel correo y cerró su computadora para ir a su cama con la esperanza de caer en los brazos de morfeo importandole poco el guión que debía modificar para el día siguiente. Pequeñas gotas saladas en forma de lagrimas salieron inconscientemente de sus orbes esmeralda, ¿ésta era la vida que le esperaba? ¿Llegar a dormir drogado dejando sus obligaciones de lado? O peor, ¿esperar la llegada de sus padres esperando que no discutieran?
La puerta de un auto cerrandose se escuchó, seguro se trataba de sus padres, o al menos de sólo uno de ellos. El rizado secó sus lagrimas para levantarse de la cama y acercarse a la puerta, sólo quería escuchar quien había llegado a casa. Las ruedas de una maleta se hicieron presentes, estaba seguro que se trataba de su padre.

—¿Harry? — Lo llamó una voz masculina, en efecto, se trataba de su padre. El menor sólo sacó su cabeza por la puerta, se suponía que a esa hora debía estar con pijama a punto de dormir.

—¿Sí?

—¿Dónde está tu madre?

—No sé, supongo que en su habitación.

—No, no está. ¿Te fuiste a dormir sin saber eso? — Lo reprimió.

—Tenía mucho sueño, estudié hasta tarde anoche para el examen de hoy. — Se excusó; mintió.

—Llama a tu madre, dile que me iré por dos semanas.

—¿No estarás en mi graduación? — Algo en el estómago de Harry se sintió cálido, cómo un golpe repentino, era decepción.

—Llegaré a tiempo para llevarte a la entrevista para Oxford. — Le dió una respuesta sin hacerlo directamente, era un claro “no”

—“No iré a Oxford, quiero quedarme.” — Pasó por su cabeza decir, pero no fue lo suficiente valiente para hacerlo en voz alta.

—Llámala y dícelo, no quiero hablar con ella. — El ojiverde asintió sin entender la situación pero fingiendo que lo hacía.

—Suerte en tu viaje. — Se despidió de su padre, éste se acercó a él para besar sus rizos chocolate.

𝐆𝐫𝐞𝐚𝐬𝐞 | 𝐋. 𝐒Donde viven las historias. Descúbrelo ahora