Conocerte - 𝘙𝘢𝘧𝘦 𝘊𝘢𝘮𝘦𝘳𝘰𝘯

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Al terminar la semana el departamento ya estaba vacío, vendí casi todas las cosas con el pasar de los meses menos las que eran de ella, todo eso se iría conmigo y otras se las dejaría a Lili.

La noche anterior me había quedado a dormir en su casa para comer comida chatarra y llorar mientras miramos películas por última vez, no sé cuando la volvería a ver pero le prometí que nos mantendriamos en contacto.

A pesar de la diferencia de edad ella no me trató diferente al enterarse cómo era mi situación con mi madre, ella buscaba protegerme en mis peores momentos ya que aprendió que enfrentarla no iba a servir de nada.

Nuestra relación es muy complicada, fue muy complicada pero aun así yo lo único que quería era que se sienta orgullosa de mi, escuchar su voz por última vez fue tan doloroso que no sabía que hacer con mi vida.

Pero Lillian estuvo para levantarme una y otra vez, estuvo para ayudarme a no entrar en un horfanato y buscar algún familiar del que no sabía su existencia, cuando decidimos entrar a la que fue la habitación de mi madre empezamos a revisar la inmensa cantidad de papeles que poseía y entre ellas estaba mi apta de nacimiento con el nombre de mi padre, el cual no quería ver pero Lillian decidió que lo correcto era contactarlo.

Y eso nos lleva a la situación actual donde yo estoy parada en el living luego de haber llorado por horas mientras recordaba todo lo que sucedió en mi hogar antes de dejar ir toda mi vida, tratar de cerrar una etapa muy dura y empezar otra que rogaba que sea mejor.
Aún que no me guste para nada la idea de tener que ir a vivir a otro país, tener que crear un nuevo yo para no ensuciar la imagen de mi "padre" como lo hice con la de mi madre, tener que controlarme con la comida por mi propia cuenta ya que no estaría ella para hacerlo, tener que aparentar ser la chica perfecta con una vida casi perfecta, caerle bien a todo el mundo pero no confiar en nadie. Tener que superar mis traumas para vivir otras experiencias que tal vez no me hagan acordar todo lo malo.

- ¿Estas listas? - escucho una voz masculina que me hace salir de mi trance y tratar de controlar mi acelerado corazón

- Si - apenas sale mi voz casi como en un susurro

- Bien, abajo nos está esperando un taxi para ir al aeropuerto - toma una de mis tantas maletas junto con Lili que nos ayuda

Baja él primero y luego nosotras dos, sin decir nada se que nos dio un espacio para despedirnos

- Ya no tengo nada más que decirte luego de la charla de anoche, solamente gracias por todo lo que hiciste por mi -

- Es lo mínimo que podría haber hecho por ti, eres un ser de luz que por muchos motivos se fue apagando pero este es tu momento de volver a brillar, solamente quiero que seas feliz por primera vez y espero que te animes a conocer nuevas cosas y nuevas personas, no todos son malos -

- Tu eres el ejemplo Lillian, prometo hablarte todos los días hasta que te aburras de mi - le sonrió antes de abrazarla por última vez hasta la próxima vez que nos veamos, aunque eso digo hace muchos abrazos anteriores

- Sabes que nunca me voy a aburrir de ti- cuando nos separamos tomamos las maletas para bajar y encontrarnos con Jared

- Muchas gracias por todo lo que hiciste por ella este tiempo Lillian, nos mantendremos en contacto - estrechan sus manos y nos damos un último abrazo.

Luego de entregar las maletas y esperar a que anuncien nuestro vuelo ya me encontraba sentada en el avión rumbo a Carolina del Norte.

─ Espero que les haya gustado el capítulo, no se olviden de votar y comentar.