Stacy estaba enojada. La ira la tenía consumida y solo podía pensar en hacer tanto daño como pudiera.
Incluso con todo lo que hubiera podido hacer para atraer la atención de Liam hacía ella, parecía qué él solo tenía ojos para la italiana que había llegado de intercambio al conservatorio. En redes sociales había haters, muchos no la querían como novia del grandioso Liam Lancaster, pero otras eran fanáticas de Lía y le daban un apoyo que jamás le habían dado a ella. Esp la enfermaba. Incluso su canción con la banda se había vuelto viral y la mayoría escribía que no creían ya en el amor debido a su ruptura.
Pero ella, quien había dado todo por Liam nunca había sido novia oficial de él. —a pesar de que lo había hecho todo por él... —No podía olvidar como recién llegado en el Royal, sus amigos y él, les dedicó toda su atención y logró que tocaran en un festival. Lo convenció de tocar en el bar y de hablar con Roger con quien tenía tiempo que no hablaba. Había escuchado sus quejas y niñerías y se sentía como un tapete por todo ya que nunca se sintió valorada por él.
Solo había sido un juguete.
Todo lo que ella había querido de él era su amor y nunca lo tuvo, y sin embargo, tuvo que ver como una recién llegada tenía toda su atención aún cuando esa otra mujer lo trataba como basura y lo pisoteaba.
Le había roto el corazón y ahora solo podía pensar en vengarse.
Tendría que vengarse de Lía. Era su última semana y solo quería hacerle tanto daño como pudiera a aquella orgullosa cellista. —Estúpida. Eres una estúpida.
Estaba recogiendo sus últimas pertenencias cuando la vio subir por las escaleras de la universidad junto a Katrina. –No te vayas, Liam no lo dirá, pero te quiere cerca. Vamos Lía, él te ama. Además, yo no quiero que te vayas.
"Él te ama". —No, por favor Kat...Lo mejor es que yo me vaya.
Escucharla fue como si un espíritu diabólico hiciera posesión de ella porque no se reconocía. La ira, la decepción y la tristeza se colaron en su cuerpo y se acercó tras dejar una caja en el suelo y se plantó hecha una furia frente a las dos chicas que estaban cerca de las escaleras. –Tengo una mejor idea. ¡Regresa de donde viniste! –Dominada por la ira, Stacy terminó por empujar a Lía, perdiendo el equilibrio, Lía rodó escaleras abajo mientras Katrina gritaba.
—¡¡¡¿¿¿ESTÁS LOCA, STACY???!!! –Bajó corriendo las escaleras para llegar al lado del cuerpo de su amiga. Tenía un golpe en la cabeza del cual estaba brotando muchísima sangre. Stacy quedó estampada en el lugar donde estaba, no lograba moverse. –Lía, Lía, dime algo... Lía... ¡¡¡¿¿¿QUÉ DEMONIOS TE PASA, STACY???!!!
La pelinegra no contestaba, Katrina terminó por llamar desesperada a una ambulancia y también a la policía. Stacy al ver el problema en el cual se había metido comenzó a sentir pánico. Respiraba de forma muy agitada y toda la rabia se había convertido en miedo. No se movía. —¡ESPERA!
—¡ALÉJATE! —Katrina la amenazó mientras Stacy se había acercado a ayudar. —¡ALÉJATE DE ELLA! ¡ERES UNA BASURA! ¡ALÉJATE!
Stacy se levantó de lado de Katrina con las manos llenas de sangre y palideció. –Mierda. Mierda. ¡Mierda! –Corrió hasta su viejo piso dispuesta a terminar de recoger lo último e irse lo más lejos que pudiera, no iban a atraparla. No podían hacerlo. Sabía que pasaría el resto de su vida en la cárcel y nunca había pensado en ese rumbo hasta que vio la sangre en sus manos. Comenzó a llorar desesperada, no podía zafarse. Su vida se hizo añicos por una mala decisión.
***
Magnolia iba camino a un hospital. Katrina estaba sola en la sala de espera, marcó el número de Paul y el de su hermano que rápidamente fueron a hacerle compañía. Al llegar, Paul abrazó a su novia con fuerza mientras ella lloraba. –Pasó todo tan deprisa. Stacy solo se acercó y la empujó. –Sollozaba. –Dios, ni pensé en el bebé. Llamaré a Liam.

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El Trato
Teen Fiction¿Existe la posibilidad de que una chica cellista y fanática de la música clásica se enamore de un guitarrista y vocalista de una banda de rock? Pertenecen a mundos diferentes y sus mentalidades incluso son diferentes. El destino conspirará para que...