Capítulo seis

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El mundo se me había caído encima. Era exagerado decirlo así, pero era como exactamente me sentía al escucharlo decir eso.

—¡¿Le gusta Bautista?!

—No, bueno, me dijo que le gustaba un chico y suponía que se trataba de él.

Dios, podía respirar, pero aun no me sentía bien del todo. No podía creer lo que me contaba. Lola estaba enamorada de un chico. Esto es culpa de Iván. Bueno, en realidad no lo era, pero necesitaba señalar culpables.

—No conoce muchos chicos, además de nosotros, claro e Iván.

Pensé en lo que dijo. ¿Era posible que Lola sintiera algo por Iván? Negué con la cabeza. Él la había asustado.

—No esta enamorada de Iván.

—¿Y cómo sabes? Iván es fachero, ¿No lo viste?

—¿Que? ¿Estás enamorado de él? —lo jodí.

—Solo te estoy diciendo que no es alejado de la realidad que ella pueda sentir algo por él.

Lo peor era que tenía razón, pero no quería aceptarlo.

—No me imagino a mi hermana con nadie, pero Iván es buen chico.

—La asusto —dije, entre dientes.

—Eso ya paso. Tal vez ella se dio cuenta después de lo sentía cuando Iván fue a disculparse.

—¿Fue a qué?

¿Recién me enteraba que Iván había ido a ver a Lola?

—Se disculpo con Lolita.

—¿Cuando?

—¿Por qué te importa tanto? —sonrió. —¿Estás celoso?

—¿Que...? No.

—Se que para vos es como tu hermanita. Entiendo que estés celoso.

Si supiera que nunca pude verla a Lola como una. Tal vez sería más fácil mi vida si hubiera sido así.

—¿Iván te parece un mal chico, Rodrigo?

Lo que más odiaba era que no lo era. Iván era perfecto para Lola. No la expondría a nada que le hiciera daño porque si lo hacía no me importaría nada. Sería capaz de cagarme a piñas por ella.

—No.

—¿Te pasa algo?

—Necesito un energizante.

—Te paso uno.

A veces agradecía que Lucas sea tan distraído. No tenía que explicarle nada cuando estaba decaído o algo parecido, pero otras veces si me molestaba. Era obvio lo que me pasaba, pero no para él. Era difícil de explicar.

Me paso un energizante de sabor frutilla. Justo en ese momento sonó en su celular una canción de los palmeras. No pude evitar reírme.

—¿Bombón asesino?

—No te burles.

—Sabe del bombón y lo mueve, menea el bombón cuando quiere, parece un bombón insaciable, seguro un bombón masticable. Me como el bombón —canté, jodiéndolo.

—Cállate.

Me reí mientras abría la lata para darle de un sorbo. Lucas comenzó a hablar con alguien. No sabía era, pero en cuestión de segundos me di cuenta que hablaba con una mina.

—¿Conociste a otra? —le pregunte cuando cortó la llamada.

—Es una streamer pequeña. Le voy ayudar a crecer su canal.

—¿Y se van a dar besos y esas cosas?

—No, nada que ver.

—Si, claro.

—¿Y vos?

—¿Yo qué?

—Estás re solo.

—No necesito estar en pareja. Estoy bien solo.

—Mi vieja dice que si no nos conseguimos novia vamos a morir solos.

—Igual vas a morir solo, al menos que tengas un accidente con tu futura novia. Ahí si, mueren los dos.

—Gracias por tus palabras de aliento amigo.

—De nada amigo.

Mi celular vibró en el bolsillo de mi pantalón. Desbloquee la pantalla para encontrarme un mensaje de Lola. Era extraño porque solo me los enviaba cuando me iba de viaje con Lucas.

Lola, Lola
<3

¿Un corazón? ¿Que significaba?

Lola, Lola ; Rodrigo Carrera, CarreraaaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora