𝐒𝐀𝐆𝐀 𝐒𝐏𝐄𝐄𝐃𝐈𝐍𝐆 𝐇𝐄𝐀𝐑𝐓𝐒 𝐋𝐈𝐁𝐑𝐎 𝐈 ; Esteban Ocon
La vida de Evie era tranquila, hasta que conoció a Esteban; tal vez el hecho de que él fuera un piloto de carreras tenía mucho que ver.
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Capítulo 4 | Cita.
🗓️12 de Junio 🌍Londres, Inglaterra.
Había tenido que buscar una florería en Londres, desde que estaba ahí no había tenido la necesidad de comprar flores para nadie así que no tenía idea de dónde hacerlo pues a pesar de haber visto varias florerías no se había convencido completamente. Afortunadamente encontró una con excelentes reseñas en internet, bastante bonita a la vista y con arreglos que Esteban encontró perfectos para regalar.
Así que ahora se encontraba frente a Rosseta, la fachada era rosa y estaba llena de flores, cosa que le recordó a la cafetería de Evie y le hizo sonreír, leyó las letras en color dorado que colgaban sobre la marquesina y asintió sabiendo que estaba en el lugar correcto. Se sentía increíblemente nervioso por comprar algunas flores, sin pensarlo mucho más entró al local y sonrió de inmediato cuando el sutil aroma le inundó los pulmones.
El lugar era incluso más bonito por dentro, todo estaba colocado correctamente y había estantes con flores, macetas y una que otra decoración para jardín.
Detrás del mostrador se encontraba una chica castaña, muy bonita, sonreía ampliamente mientras acomodaba los últimos detalles de un ramo de rosas amarillas.
—Hola— murmuró Esteban, provocando que la chica se asustara un poco —Lo siento.
La castaña soltó una risita y negó, había estado tan concentrada en su trabajo que no había notado al chico entrar.
—Hola— dijo entre risas mientras amarraba el moño y dejaba el ramo a un lado —No te escuché entrar ¿En qué puedo ayudarte? ¿Buscabas algo en especial?
—Bueno... Quería un ramo, pero en realidad no estoy seguro de que debería de llevar— dijo haciendo una mueca
—Te puedo ayudar con eso, cuéntame sobre la ocasión— pidió la chica, recargándose en el mostrador para escucharlo atentamente —Por cierto, me llamo Scarlett y hoy seré tu florista de confianza.
Aquello le provocó una risita a Esteban y sinceramente estaba ayudándolo a sentirse menos nervioso, cosa que agradecía profundamente.
—Soy Esteban— se presentó y ella asintió, el piloto suspiró pesadamente y lo pensó un poco— Bueno... Podríamos decir que es una cita, aunque no estoy seguro. La conozco hace poco y... Me cae muy bien, creo que es muy linda así que me gustaría ser su amigo ya que no tengo amigos aquí en Londres... La invité a salir, pero mi compañero de trabajo dijo que sería buena idea llevar flores... No lo sé.
Lucía bastante nervioso y aquello enterneció a Scarlett, le gustaba interactuar de esa manera con sus clientes pues era como si le contaran el inicio de una historia de amor y honestamente le encantaba ser parte de ellas.
—Tu compañero es muy listo— asintió Scar sonriendo —¿Y qué me puedes decir sobre ella?
Una sonrisa diferente a todas las demás apareció en el rostro de Esteban, junto con un brillo en los ojos y un rubor que apenas era visible pero que hizo que Scarlett quisiera chillar de emoción.
