Lea
- ¿Jugamos al juego de las preguntas? - pregunté.
- Claro.
- Empiezo, una película con la que lloraras.
- Uno más de la familia - respondió - ¿cómo se llaman tu madre, hermana y padre?
- Mi madre Jade, mi hermana Ivy y mi padre Diego. ¿Helado favorito?
- El de vainilla. ¿Canción que si te dedica un chico, te enamoras?
- All this love, de JP Cooper. ¿Leer de noche o de día?
- De noche - al escuchar eso sonreí ya que pensaba lo mismo. - ¿Cómo sería tu pedida de mano ideal?
- Pasar un día en un parque de atracciones y cuando esté atardeciendo en la playa, que me lo pida. ¿Playa o piscina?
- Playa. ¿Te gusta mi hermano?
En aquel momento no supe qué responder. Debía tener la cara hecha un cuadro porque su carcajada no tardó en llegar.
- ¿Creías que no me había dado cuenta? - me preguntó.
- Yo... bueno... el caso... - empecé a decir pero me interrumpió.
- Lea, es normal que te guste, sé que mi hermano es muy guapo, es modelo por algo, no me parece mal - me dirigió una sonrisa tranquilizadora y yo me froté la cara con las manos.
- Lo que pasa Beca es que tu hermano hasta ayer me gustaba porque es supermono, me lo encontré dando un paseo por el bosque y fue un encanto, pero Marc me dijo que él es de echar un polvo y ya, y yo no quiero eso, así que ya no me gusta.
- Es normal que no quieras eso, solo te pido que tengas cuidado, no me gustaría verte mal por su culpa o que nuestra relación se acabara.
- Pase lo que pase con tu hermano, tú y yo vamos a seguir igual, aunque te puedo asegurar que no pasará nada entre él y yo.
Seguimos hablando durante un rato y al final nos fuimos a la cama. Dormí con Beca en su habitación ya que su cama era enorme.
Me desperté y miré la hora en mi móvil, eran las cinco y media. Estaba muriéndome de sed, así que me levanté sin hacer ruido, abrí la puerta y bajé a la cocina.
Me serví un vaso de agua fría que me sentó muy bien.
La ventana de la cocina estaba abierta y me daba una brisa nocturna muy agradable, cerré los ojos hasta que una voz ronca me sobresaltó.
- ¿Qué haces aquí linda? - era Jake y por su aspecto parecía que acababa de llegar.
- Estaba tomando un vaso de agua - le dije sin mirarlo.
- Déjame reformular la pregunta, ¿qué haces en esta casa? - parecía sorprendido.
- Beca y yo hemos hecho noche de chicas.
- Interesante - me giré hacia él. Aun con la poca luz de la luna que entraba por la ventana pude ver el verde de esos intensos ojos - la próxima vez me podrías avisar y tal vez podríamos acabar la noche en mi habitación - dijo mientras se acercaba a mí.
- Creo que no me interesa nada esa proposición - le contesté sin desviar la mirada de la suya.
- ¿Estás segura? - preguntó muy cerca de mí.
No sé cómo habíamos acabado en esa posición. Yo acorralada entre la encimera y él.
- Sí, segura - le dije y vi que no tenía escapatoria ya que sus brazos estaban apoyados en la encimera a cada lado de mi cintura.
Él se acercó a mi oído y susurró:
- Es una lástima, lo podríamos pasar muy bien - al escuchar eso me recorrió un escalofrío. Me dio un beso en la mejilla y desapareció tan rápido como llegó.
Subí de nuevo a la habitación de Beca, pero no conseguí dormirme.
Al final me dejé llevar por el sueño solo que con un pensamiento en mente, antes le había dicho a Beca que ya no me gustaba su hermano, pero después de lo que acababa de ocurrir en la cocina ya no estaba tan segura de ello.
A la mañana siguiente nos levantamos y desayunamos, sin rastro de Jake. Me fui a mi casa y no dejaba de pensar en lo ocurrido hasta que me llegó una llamada que no me esperaba.
- ¿Qué tal está la mejor psiquiatra del mundo? - preguntó con esa voz que desde el primer momento me gustó.
- Muy bien, ¿y tú?
- También estoy bien.
- Me alegro Enzo - le respondí con total sinceridad.
- Te noto rara, ¿seguro que estás bien?
- Estoy bien, pero, ¿se nota mucho que estoy preocupada?
- La verdad es que sí - dijo y yo reí - ¿por qué no te pasas por aquí y me lo cuentas?, se me da bien escuchar - me dijo.
- Está bien, me cambio y voy para ahí.
Colgamos la llamada y me preparé para ir al CAVC.
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Mi destino
RomanceLea es una chica como cualquier otra que vive en un pueblecito en California. Ella desde la adolescencia se enamoró de la psiquiatría, al principio todos la apoyaron pero cuando llegó el momento se dio cuenta que estaba sola. Lea eligió cumplir su...