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"𝙃𝙖𝙥𝙥𝙮 𝘽𝙞𝙧𝙩𝙝𝙙𝙖𝙮 𝙍𝙮𝙪𝙨𝙚𝙞" (07/07)
Has aprendido que hay muy pocas certezas en este mundo. Los trenes no siempre llegan a tiempo, tu cabello no siempre es como quieres que se vea, tu pedido de café no siempre es lo que quieres que sea.
Pero si puedes estar segura de una cosa, es que Shidou Ryusei es una pesadilla con respecto a las relaciones públicas.
Todos tus colegas te advirtieron sobre aceptarlo como cliente. Su reputación lo precede: es ruidoso, generalmente bastante grosero y absolutamente impredecible; había pasado por no menos de cinco agentes de relaciones públicas en solo un mes. Uno de ellos, el cual es un compañero de tu trabajo, volvió llorando un día, resoplando y sollozando diciendo que ya no puede trabajar con él porque "es un maníaco absoluto y un psicópata total".
Pero si los diversos trofeos y medallas de primer lugar que se exhibieron en la casa de su infancia significan algo, es que nunca retrocede ante un desafío. Y, para no ser demasiado autocomplaciente, has estado trabajo durante tres meses, el tiempo más largo de cualquier agente de relaciones públicas que estuvo con Shidou, y estás bastante segura de que no estás cerca de ser despedida o corrida por él...
Te sientas al margen del campo, viendo el partido de práctica entre PXG y Bastard München con los párpados pesados. Dormiste muy poco en los últimos días después de tener que mitigar un "desastre de Shidou Ryusei", así es como el equipo llamaba a cualquier escándalo que Shidou provoca. Tus ojos se cerraron durante unos segundos antes de que el sonido del silbato que indicaba el descanso del medio tiempo te hiciera saltar y lanzarte hacia adelante. Definitivamente habrías comido cesped si el hombre sentado a tu lado, Harada Kaito, no te hubiera agarrado del hombro y tirado de ti hacia atrás.
Tú y Kaito trabajan en la misma agencia con Kaito representando a un verdadero ángel, Yukimiya Kenyu. No se podría decir que son amigos cercanos pero se llevan bien y sus charlas son interesantes cuando PXG jugaba contra Bastard.
──"¿Estás bien?"── pregunta, frunciendo el ceño con preocupación.
──"Si estoy bien. Tuve que resolver algunos problemas en los últimos días, así que ha sido un poco agitado"── suspiras profundamente, frotando tus ojos con las palmas de las manos.
──"Entiendo"── dice con un asentimiento.
──"Sí, claro"── resoplas con una sonrisa ──"Yukimiya es un amor. Estoy segura de que nunca tendrás resolver cosas como las mías"
──"Probablemente"── él se ríe, inclinándose hacia atrás.
