"¿Debería Quedarme?
¿Sería un Pecado sino puedo evitar enamorarme de tí?
Cómo un río fluye,
Con certeza hacía el mar,
Cariño, así vamos tú y yo,
Algunas cosas estaban destinadas a ocurrir.
Toma mi mano,
toma también mi vida entera,
porque no puedo e...
- ¿Que quieres ver, Joaco? - preguntó mientras sacaba las películas de la mochila. - he traído varias opciones de distintos géneros, elige una. - pidió.
- Bien, a ver qué haz traído, Osorio. - espetó para luego comenzar a ver las opciones dichas, eran variadas, habían de terror, comedia, acción, suspenso y las que no podían faltarle nunca a Emilio, las de animaciones infantiles. El castaño enarcó una ceja en su dirección mostrando la tapa del film. - ¿Buscando a Nemo? ¿Enserio? - cuestionó con una sonrisa.
- Oye, es una de las mejores que he traído. - se defendió.
- ¿Madagascar, Toy story, Shrek? - dijo en voz alta. - para tener casi 29 años no haz madurado mucho, amigo. - dijo riendo.
- ¡Hey! No hay edad para ver éstas películas, son las mejores del siglo.
- ¡Oh, Harry Potter, veamos éstas! - chilló emocionado. -
- Tenía el presentimiento de que pedirías éstas. - dijo sonriendo para después levantarse y colocar la película dicha.
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Las luces estaban apagadas y sólo la luz de la pantalla los iluminaba. El rizado no podía dejar de ver el perfecto perfil de Joaquín reflejado por la tenue luz del televisor, el chico era tan hermoso y se maldecía en sus adentros por no haber apreciado aquello de esa forma antes.
A mitad de la piedra filosofal, Emilio se encargó de ser lo más disimulado posible cuándo comenzó a acercarse al cuerpo del castaño, si éste preguntaba la razón, simplemente le diría que quería estar más cómodo en el momento de tomar las palomitas. Joaquín por supuesto que sintió la cercanía y sus nervios comenzaron a aparecer por lo que intentó cubrirlos, cuándo quiso tomar en un puñado los dulces su mano chocó con la del rizado, sus mejillas se enrojecieron al instante en que sus miradas se cruzaron.
- Lo siento. - dijo el castaño.
El oji-café le volvió a sonreír. - descuida, no pasa nada. - respondió. - uhm... ¿Cómo has estado éstos últimos días?
Joaquín ya se había esperado esa pregunta y es que era más que obvio que ya todos se habían enterado de su ruptura. - uh... Supongo que bien. - encogió sus hombros. - ¿Y tú?
- He estado bien, gracias. - respondió. - debe ser difícil.. uh.. romper con alguien con el que estuviste por tanto tiempo y... Bueno, supongo que... En realidad no sé. Sólo quería decirte que si te sientes sólo, estaré aquí.
El castaño sonrió y sintió sus ojos picar. - es difícil y doloroso. - contó. - no he vuelto a ver a Jerry desde que se fué, su hermana vino a llevarse sus cosas. - sorbió su nariz y Emilio por primera vez se sintió mal por haber estado tan feliz al recibir la noticia. Debió pensar en que Joaquín lo quería. - no lo culpo, pero eso no significa que no me duela. - volvió a encoger sus hombros. - pero ya no quiero hablar de eso. - pasó sus dedos por sus ojos rápidamente. - mejor cuéntame tú cómo vas con uhm.. tu novia.
