Sentencia de Muerte

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(...) Alrededores de la Puerta 18 / Bosque de la Muerte / Hora inicial de la prueba. 

Ingresaron al mismo tiempo que los demás o incluso un poco antes, Naruto fue quien tomó la delantera, ya que su ímpetu no le permitía aguantar más la mezcla entre nervios y emoción que tenía. Pero como cualquier cosa que existe en la imaginación, pronto fue devastada por la cruda realidad, la foresta que le rodeaba era macabra, sumamente oscura y asfixiante, cuando llevaban aproximadamente media hora de marcha escucharon gritos y quejidos por todas partes.

—Que pronto ha empezado —Mencionó el joven Uchiha con un suspiro largo, notando que debido a la espesura de las copas de los arboles la luz que entraba era escasa.

—Diablos... Denme un momento, tengo que ir a mear —Comentó el joven de cabellos amarillos, quien desde que ingreso al examen no había podido ir al baño.

—Por todos los cielos ¿Es necesario que seas tan basto? Solo lárgate a ese arbusto y ya ¡No te la saques delante de mí! —Habló Haruno con molestia, mientras Sasuke se reía con cierta ligereza.

—No te tardes demasiado estúpido, no podemos perder tiempo —Ordenó el azabache con tirria, viendo a todas partes con preocupación.

Una actitud totalmente entendible, especialmente al notarse que todos los otros individuos que ingresaron en esa arena habían pasado a ser sus enemigos y sin duda irían por ellos, tras los arboles cualquier cosa podría salir y si no eran otros ninjas sería un animal salvaje o quizás una trampa, bajar la guardia era igual a morir. Aunque todo se veía inexplicablemente tranquilo, especialmente tras ver que Naruto salió de entre los matorrales.

—¡Vaya! ¡He meado muchísimo! —Carcajeó el rubio con alegría, caminando lentamente hacia sus compañeros.

—Qué bueno que volviste, no vuelvas a comportarte como cerdo delante de mí —Ofendió Sakura, notando que carecía de marca en su mejilla, cosa rara especialmente después del kunai arrojado por Anko.

—Descuida no lo... —Antes de que pudiera terminar de decir la frase, el Uchiha le metió un fuerte puñetazo en la cara, rompiéndole la nariz y provocando un sangrado. Causando que tras dar varias vueltas cayera a los pies de uno de los megalíticos arboles —¿¡Que mierda te pasa!? —Consultó el sujeto con frustración.

—¿Dónde está Naruto? —Dudó Haruno con enojo, sacando una shuriken y apuntándola a su cara.

—No sé de qué hablan —Juró este con un auténtico nerviosismo

—¿Desde cuándo guardas tus kunais en la pierna izquierda? Debe ser incómodo para alguien diestro —Afirmó el azabache sin darle tiempo de reaccionar, dando un brinco en el aire —¡Estilo de fuego! ¡Llamas del Fenix! —Mencionó al mismo tiempo que tomo aire y arrojo una andana de llamas a su oponente.

La mentira tuvo que acabarse, al dispersar la transformación se vio como un joven con el cabello punteado hacia arriba, quien portaba un enterizo blanco, la bandana de la aldea de la lluvia y un respirador en su boca, el cual distorsionaba su voz. Rápidamente realizo una finta y escapo del ataque, siendo seguido de inmediato por los dos chicos.

—¡Allí esta! —Apuntó Sakura a Naruto, quien yacía amordazado y amarrado.

—¡Ocúpate de él! —Exclamó Sasuke siguiendo la pista del enemigo, pero volteándose brevemente.

—Fantástico, una abertura —Celebró el rival, dándose la vuelta y arrojando una serie de shurikens y kunais contra el azabache.

Este tuvo que esquivarlas usando uno de los troncos sobre los que se apoyaba como escudo, apenas y tuvo momento para notar que un papel colgaba de uno de ellos, el cual comenzó a arder rápidamente, se aferró fuertemente a la madera y con un impulso de chakra se arrojó lejos, parte de la explosión lo alcanzo, por lo que cayó en una pésima posición al suelo, dándole la espalda al oponente.

Naruto El Camino del ShinobiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora