Trois

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"I Don't Wanna Lose Control"

― "La coherencia de un texto radica en que sus elementos se conservan a lo largo del mensaje..."

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Dos horas de clase y las miradas eran inevitables. Taehyung no tenía ni el mínimo interés en entender y saber por qué sus ojos parecían imanes hacia ese chico.

Era ilógico, pero se sentía literalmente como uno, tan parecido cuando dos imanes, o dos personas, se atraen al mismo tiempo que se rechazan.

Cuando logro concentrarse de mejor manera al dar la clase, dio unos minutos para que los alumnos hicieran la actividad dada por él. En el momento que empezó a recibir los trabajos, sonó el timbre el cual significaba el termino la clase.

― Los nuevos... Necesito que se acerquen a mi para poder ingresarlos a la clase, si no lo hacen no podrán entrar a las próximas clases. ―dijo con voz grave y firme.

Jungkook debía de prestar atención a la clase, a la materia... Lamentablemente lo único que sus ojos y mente enfocaron... Fue ver como el profesor se movía lentamente por el salón y los pasillos de este, también como su pelo se movía gracias al movimiento de sus pasos, como sonreía levemente al hablar de algo que le gustaba, como su mirada se dirigía a todos los demás alumnos para saber si estaban tomando apuntes, y también como su mirada se cruzaba con la de él.

Cada vez que eso ocurría una sensación era abrumadora se apoderaba de sus sentidos, Jungkook está sorprendido, aunque sabía que estaba pasando y lo odiaba porque nunca le había pasado. Su educación sexual fue siempre buena, así es que no duda que lo que ocurre, pero prefiere ignorarlo y evitarlo. No puede caer ante algo tan poco ético.

Es su profesor por favor, no puede ser tan imprudente. Nunca en su vida caerá ante eso... ¿Cierto?

Cuando el profesor dijo que tenía que quedarse para ingresar al sistema quería que la tierra lo tragase. ¿Qué tan mala suerte tiene? Estuvo toda la clase mirándolo con probablemente una cara que reflejaba algo incorrecto, algo que no debería de haber pasado nunca.

Entiéndanlo, miro toda la clase a su autoridad y no paro.

Quedaban solo dos personas más para ingresar y Jungkook decidido quedarse de los últimos, seguía siendo tímido y no le gustaba saber que la gente lo miraba, aunque ahora se cuestionaba realmente que tanto.

Prolongo tanto el tiempo para no pasar de los primeros y termino siendo el último en la sala... Con el profesor.

Jungkook a paso lento se dirigió al puesto del profesor. Cuando llego al frente del puesto, el contrario levanto la mirada.

Los dos se miraban y las pupilas de ambos estaban dilatadas... ¿Por qué?

Era realmente extraño, pero les gustaba. Mantuvieron la mirada hasta que Taehyung se dio cuenta de lo que ocurría y la aparto hacia el computador.

―Su nombre? ―pregunto frio.

―Jeon Jungkook.―contesto con las mejillas sonrojadas. Esperen ¿porque estaba rojo?

Taehyung solo se dedicó a escribir el nombre del alumno, ni quería mirar hacia arriba. Estaba seguro que si lo hacia esta misma no solo se quedaría en los ojos, iría más allá y la sensación era demasiado...

―Ya lo ingresé señor Jeon, ¿Se sabe su horario o no? ―dice levantando la mirada.

―No, digo si, lo tengo que retirar ahora. Gracias. T-Tenga buen día... ―dijo por ultimo y se retiró.

Taehyung viendo como el contrario salía, dio un suspiro que no sabía que estaba reteniendo

―Mierda Taehyung.

Jungkook ya no tenía más clases así es que decidió ir a caminar un rato.

Mientras caminaba iba sacando fotos, agradece demasiado el haberla traído con él así se distraía un poco. Las fotografías le hacían sentir acompañado, sacando fotos a la naturaleza, a las personas, a la ciudad hacían un stop en su vida y podía disfrutar de mejor forma las cosas.

Las fotografías son un stop a la película de la vida, un recuerdo que uno quiere recordar toda la misma. Gracias a una cámara puede capturar los mejores recuerdos que tiene, o los mismos días que más emociones ha tenido.

Cuando decidió ponerse en marcha para ir a su departamento, recibió una llamada de su jefe.

―Jungkook!, Te necesito en la cafetería, por favor dime que estas libre.

―Ehh sí, pero ¿por qué? ―pregunto ya levantándose del banco.

―No hay nadie que se pueda quedar y yo justo debo ir a ver a mi hermana chiquita, que tiene una presentación ―dice medio lloriqueando― Por favor Jungkookie.

―Ya, Jinnie voy para allá, no te preocupes. Estoy a unos 15 minutos ya voy, nos vemos. ―dice cortando la llamada, guardando la cámara y empezando a correr. 

The Sighs Of Literature || KTH + JJKWhere stories live. Discover now