Hotaru Haganezuka x tn ||ꕥ °Polos Opuestos° ꕥ|| Kimetsu no yaiba

XXI

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-Estas segura?-

-Completamente Taru-

Hotaru al tener la confirmación por parte de la chica, no dudo en besarla, se podía apreciar la desesperación y torpeza de su parte, pero aun así ella no le molesta y correspondía sus acciones sin quejas, mientras que una ola calor comenzaba a recorrer su cuerpo, por ello se aferro aun más en su cuello para atraerlo aun más a ella.

El hambre insaciable la dominaban por completo y sus labios buscaban devorar por completo los de Hotaru, por más que lo intentaba no quedaba saciada y por ello buscaban más tacto y acciones por parte de él, el herrero se detuvo por un momento, teniendo su respiración completamente agitada y caliente, queriendo seguir besándolo hasta cansarse. Él se levanto un poco quedando sentado en el piso donde tomo el brazo de ella para halarla donde el, quedando prácticamente sentada en sus piernas, sintiendo sus manos posar en sus cadera y cintura, sintiendo así su cuerpo arder aun más por desear mas toque como esos en el resto de su cuerpo.

-Espero que no te arrepientas... no me gusta que jueguen conmigo- susurro en su oído. -aunque si fuera así... sabes que no quedare quieto-

Se lamio un poco sus labios, recorriendo con su mirada el cuerpo de aquella hermosa pilar, ella por alguna razón sintió nervios y temor, pero no le desagradaba para nada sus acciones, de cierta forma se sentía deseada por él.

Al estar en aquella posición, le dio la oportunidad al hombre de llevar una mano a su muslo el cual estaba un tanto descubierto en aquel momento, recorriendo esta hasta por debajo de su kimono, gesto que sin duda lograr cortar su respiración, jamás pensó ver a su pareja de aquella forma y no lo iba a negar, solo hacia que su deseo por el aumentara aun más, soltó un ligero suspiro al sentir sus labios en su cuello, echando su cabeza levemente aun lado para darle más acceso en aquella zona, pero luego jadeo un tanto caliente al sentir su lengua pasar por este, logrando erizar por completo su piel, rodeo nuevamente su cuello, enredando sus dedos en su sedoso y larga cabellera negra.

-sabes perfectamente que... yo no juego con mis presas Taru~- dijo de forma deseosa en su oído, escuchando una risa por parte de el, era evidente que ambos lo deseaban y no iban a desaprovechar aquel momento.

-Me alegra escuchar eso- Recorrió su mano que estaba en el muslo de ella para luego llevarla a su entrepierna, acariciando suavemente el tejido húmedo del fundoshi, escuchando un un suave gemido el cual ella no evito soltar.

-(Sus sonidos son muy adictivos... deseo escucharla aun más) Te gusta?-

Ella estaba demasiado excitada como para responder, sus deseos más profundo deseaba aquel hombre mas que nunca, por lo que solo asintió con lentitud como respuesta. El herrero fácilmente había quitado su fundoshi, por lo que sus dedos no tardaron mucho en llegar a su zona más sensible donde sin dudarlo comenzó acariciarlo, deslizando con gran delicadeza y facilidad sus falanges gracias a su humedad, ella arqueo su espalda y alargo un suspiro de placer por sus acciones, aferrándose a la espalda de este para poder contener aquella ola de placer que recorría su cuerpo, su cuerpo vibraba y se estremecía, era una sensación única y muy encantadora para ella.

Sabia perfectamente que aquella acción era demasiado para ella, pero disfrutaba ver sus expresiones y escuchar aquellos deseosos gemidos, los cuales eran músicas para el, quito su mano de aquel lugar, escuchando ciertamente una queja de su parte, pero no le importaba, miro directamente el pecho de ella, el cual estaba levemente al descubierto debido a sus movimientos, llevo una mano al obi, el cual deshizo fácilmente dejando al descubierto el cuerpo de aquella pilar, pero lo que más deseaba era ver y saborear sus pechos, los cuales estaban cubiertos por unas vendas.