Disfraz

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Capítulo único.

Félix se estaba aburriendo mortalmente en esa fiesta de disfraces. Allan lo convenció de ir y él no se negó, ya que allí podría ver a Bridgette que también había sido invitada.

Pero no había visto rastro de ella. Cosa de por demás extraña.

-¡Felichoo!- Claudia se abrazó a él, vestida como Cleopatra mientras que él iba como el fantasma de la opera.- ¿Vas a bailar conmigo? Estoy taaaaaaan aburrida.

-Lo siento, Claudia. Pero estoy esperando a alguien.

-¿Y quién puede ser más importante que yo?- preguntó indignada.

-Mi novia.

-¿Esa camarera? ¡Ja! Pues pierdes tu tiempo porque ella no vendrá.

-¿Qué quieres decir?

-Lo que pasa es que su disfraz era de tan mal gusto que decidí desinvitarla. Hubiese sido una ofensa para todos los presentes.

-¿Cómo?- dejó el vaso de ponche en la mesa.- ¿Quieres decir que he perdido mi tiempo estando aquí? Me largo.

-¡No puedes irte! ¡Todavía no bailas conmigo!

-Baila sola.

Félix caminó entre la multitud intentando perder a Claudia y al dar vuelta a una columna alguien lo jaló hacia un costado. Al llegar Claudia al mismo punto observa a alguien con un ridículo disfraz de banana.

-¿Dónde está Félix?- la banana indicó una dirección y Claudia fue por allí. Luego, la banana se acercó a la mesa cercana y levantó el mantel mostrando a Félix.

-Muchas gracias por la ayuda, ah…

-De nada, chaton.- él abrió los ojos grandes.

-¿Bridgette?- con una risita ella le insta a seguirle lejos de la gente, saliendo del hotel sin levantar sospechas.- Estoy intrigado sobre tu disfraz. Pensé que dirías que te vestirías como un hada o algo así.

-Una dríada. El disfraz tenía complementos verdes, flores y era perfecto, pero Claudia me canceló al estar aquí y tú ya estabas dentro. Tuve que improvisar, y este disfraz fue perfecto para despistar a los guardias de Claudia.

-Ya veo.- sonrió y abrazó a la banana.- ¿Y hay forma de pelar esta banana?

-La hay, pero tienes que descubrirlo.- este pegó su frente a la de ella, o lo que creía su frente.

-Pues vamos a ver cómo pelarte…

Quince minutos después…

-¡Maldición!- gritó Félix al intentar bajar en vano el cierre.- ¡Esta cosa no baja!

-Te dije que tenías que descubrirlo… ¡Yo no puedo quitármelo!- lloriqueó Bridgette jalando el disfraz.

-¡Plagg!

-¡No, Félix! ¡No lleguemos a esos extremos!

-¡Transformación!

Al otro día se hablaría de la fiesta de disfraces de los Bourgeois y el caos generalizado por gran parte de los invitados. Partes de disfraces serían encontrados en distintas zonas de Paris, guantes, colas, cabezas, y también se encontraría frente a la mansión Agreste un disfraz de banana rasgado por un animal salvaje, sin saber que la chica que lo portaba estaba dentro de la mansión dormida entre los brazos de su chico que peló con gusto esa banana.

….

Felixxbridgette ONE SHOTWhere stories live. Discover now