CAMBIO DE ROPA

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Capitulo único.

Extrañamente no le parecía raro que terminara así. Otro duelo entre Félix y Kagami que se convirtió en algo más que un simple ejercicio de práctica y nadie se atrevía a intervenir emocionados por el calor del momento. El punto es que no supieron en qué momento sus espadas terminaron por atravesar un par de cajas y varios vasos de cartón que Bridgette tenía en mano, siendo estos los pedidos de la cafetería de sus tíos, para algunos chicos del lugar, y dejándola hecha un completo desastre andante.

Al final, se declaró un empate, aunque Bridgette sintió que fue la única en perder.

-Siento mucho lo que sucedió, Bridgette. Puedo pagarte por todo, quiero responsabilizarme. - se disculpó Kagami.

-Gracias Kagami. Pero el dinero ahora no me preocupa mucho. - dijo mirando su ropa.

Aderezos, merengue, pedazos de algo que parecía pollo y pasta, estaban en su ropa. Eso sin contar el espectáculo de colores que las bebidas variadas hicieron con su ropa y la rebanada de tomate que cayó de su cabello, y que no quería saber qué otras cosas estaban en su cabello. Más esta vez Bridgette no podía irse a cambiar a su casa, ¿por qué? Porque el entrenamiento de ese día había sido en el Centro Deportivo Emile Anthoine y no en el instituto.

Félix suspiró con pesadez, se sintió culpable y no quería que pasara vergüenza al regresar a casa, era algo que él ya había experimentado de primera mano.

-Puedo llevarte, si gustas.

-Oh, n-no podría. Vine en mi bicicleta y no quisiera ensuciar tu auto. - respondió apenada. Y fue que Kagami sonrió con una idea en mente.

-Puedo prestarte mi ropa.

- ¿En serio? - Bridgette miró a Kagami con grandes ojos de cachorrito, y pensar que antes no se llevaban bien.

-Claro. Ven, conmigo.

Las dos partieron a los casilleros donde se perdieron de la vista de todo mundo.

-Oh, cielos, tenemos a dos chicas guapas cambiándose en los casilleros. - murmuró uno de los compañeros de Félix.

-Esto es como un sueño.

-Lástima que no haya visión desde los casilleros.

-Ya quisiera ver que guardan bajo sus ropas.

La mirada que Félix les dedicó hubiese congelado el mismísimo infierno. Y tras su silencio impuesto, pensó en lo bien que se llevaban esas dos desde hacía un tiempo. Kagami ya no la llamaba rara o torpe y Bridgette ya no le decía la reina del hielo. Era una amistad extraña pero suponía que no era tan diferente a lo que él tenía con ella, una relación cordial y agradable donde cada uno se preocupaba por el otro como haría cualquier amigo, sí, esa era la palabra, amigo. No importaba cuántas veces Plagg le dijera que miraba a Bridgette más que a una amiga, él no daría su brazo a torcer a algo más que una simple amistad que tendría con un compañero de clase.

-Ya estamos aquí. - Félix las miró pero algo en ese cuadro lo dejó estático, en cambio sus compañeros se veían emocionados. Kagami aún conservaba el uniforme de esgrima pero Bridgette, ahora con el cabello limpio y suelto, tenía puesta la ropa de Kagami y... ¡¿cómo era posible que se viera tan malditamente bien?!

-Muchas gracias, Kagami. Con esto podre ir sin problemas a casa.

-Sabes que no es molestia. Como sea...- le dedicó a Félix una sutil sonrisa llena de malicia. - No es como si fuera la primera vez que intercambiamos ropa.

Félix apretó la empuñadura de su espada.

¿Se estaba burlando acaso? ¿Y que si se han cambiado prendas? No es como si le interesase, hasta podría decirse que es normal entre mujeres. Pero al ver a esa cabeza hueca moverse con esa falda que debería quedarle larga, esa chaqueta que no debería tener las mangas recogidas hasta los codos, y sin medias para cubrir esas largas y tentadoras piernas...

-Deberías recoger más la falda. - sugirió Kagami sacándolo de sus pensamientos. - Pienso que te quedaría mejor. - Bridgette pareció dudar.

-Pero creo que si la recojo más podría tener problemas con la bici.

-Tonterías, un poco más te lo hará más cómodo.

Era eso, la falda estaba recogida, por eso se veía más corta de lo habitual, y ahora Kagami recogía más esa endemoniada falda, metiendo su camisa y acomodando su chaqueta. Y todo ante la mirada de cuanto baboso ahora quería romperle la cabeza.

-Listo. Podrás irte sin problemas.

-Muchas gracias, Kagami, eres tan buena amiga. - esta vez Kagami le dedicó a Félix una expresión burlona.

-No es nada, por algo somos MUY buenas amigas. Incluso puedo decir que te queda mejor que a mí, ¿verdad? - preguntó a los presentes que asintieron sin dudar y sin apartar los ojos de la bella joven de largas piernas. Félix en cambio sintió un deseo de sangre y muerte contra aquellos idiotas que no dejaban de verla babeando tras los CASCOS. Siseó a lo bajo.

«¿Qué miran? ¡Ella es mía!»

Espabiló ante sus pensamientos. ¿Suya? ¿Desde cuándo pensaba que Bridgette era suya? ¡Claro que no! Sólo no le gustaba que los demás la mirasen como perros en celo.

-Félix. - llamó la joven tomando un mechón de su cabello suelto con cierta timidez. - ¿Tú qué piensas?

Apretó su mandíbula tan fuerte que pensó que esta se fracturaría.

-No… creo que… ese atuendo sea adecuado para ti.

«¡Esa falda es demasiado corta!»

Kagami lanzó un bufido.

-Y te dices un conocedor de la moda. - luego sonrió a su amiga. - Pienso que te queda perfecto.

-Gracias Kagami. Creo que puedo regresar a hacer el resto de los pedidos.

Fue como si le hubiesen jalado la cola. Félix podía imaginarse la escena. Su cabello alzado por el viento, su figura enmarcada, y esas piernas al pedalear con la falda recogida y a la vista de todos los chicos de Paris...

- ¡Alto ahí! - ordenó paralizando a Bridgette en su sitio. - Dije que te llevaba y eso haré.
- ¿E-Estás seguro? No quisiera molestarte, todavía no terminas tus prácticas y.…- chilló como un ratoncito, asustada cuando él la miró con sus penetrantes ojos que estaba segura había visto de color rojo por unos instantes.

-Vamos.

-S-Si... Voy.

Félix se marchó con su uniforme puesto, ni siquiera su profesor de esgrima se atrevió a decirle algo por irse a mitad de la clase, pero antes de salir, Félix le dedicó a cada uno de sus compañeros una amenaza silenciosa sobre lo que les pasaría en la próxima clase. Estaban muertos.
Kagami sonrió de lado feliz por su buena acción del día. Debía hacer algo para que ese tonto abriera rápido los ojos o alguien más podría robarse el corazón de Bridgette. ¿Y qué mejor que resaltar un poco los atributos de su amiga?

Esperaba que ambos le agradecieran por esto un día de estos. Y que por ahora, disfrutarán el momento... Aunque esperaba que su uniforme regresase intacto y sin algo raro encima.

….

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⏰ Last updated: Sep 26, 2023 ⏰

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Felixxbridgette ONE SHOTWhere stories live. Discover now