-El imperio de la Luna- [Shadowpeach] Lmk

•sin descanso•

Wukong y Nezha se encontraban perdidos por el palacio y todo gracias a Wukong que aseguraba recordar a la perfección el camino hacia la salida del castillo lo cual no era cierto-donde estan las malditas escaleras!?- susurró fuerte a Wukong ya estresado de dar varias vueltas por el mismo lugar esperando a que el mono recordara la dirección, estaba muy seguro que si antes estaban en el 6 piso, ahora debían de estar muy lejos del 1-Ya deja de mentir! No sabes donde estan las escaleras, llevamos horas buscando!- el contrario no dijo nada, sabia que Nezha estaba exagerando.... O eso esperaba

-eso crees?- señaló victorioso las escaleras a unos cuantos metros de ellos, estaba a punto de ir hacia ellas cuando Nezha lo detuvo, al lado de ellas habia una habitación con la luz prendida y se escuchaban personas hablando, no podian pasar por ahi arriesgandose que puedan ser vistos por alguno de ellos o estarian acabados, y más si llegaba a ser alguien de la corte

-Y ahora que hacemos? Ni modo buscar otras escaleras y perdernos otra vez- miraron por todas partes buscando alguna manera de pasar, incluso pensando ya en una rita de escape si decidian arriesgarce, hasta Wukong mirar el techo que tenia la distancia perfecta entre el y la puerta. Señaló hacia arriba y Nezha lo miró incredulo que funcione -estas idiota? La razón por la que no salimos por la ventana es porque aun no puedo volar- le pegó en la cabeza, Wukong se quejó en silencio mientras se sobaba

-oh Nezha, no seas tan incredulo, quien dice que yo no pueda?- intentó convertirse en animal cerrando los ojos e intentando concentrar la poca energía que tenía. Nezha simplemente veia con el ceño fruncido

-No te esfuerces Wukong, tu tampoco estas en condiciones para usar tus poderes, no siempre tienes que ser el heroe- con mucho esfuerzo logró convertirse en Alcón, aunque su cuerpo brillara repetidas veces en dorado por toda la energía que estaba gastando ocultando su cansancio bajo un poco de glamour, aunque aun no convencia a Nezha que sabia que Wukong solo fingia estar bien, el ave lo miró victorioso por haberlo logrado, su cola batiendose detrás suyo, Nezha suspiró cansado y cuando volteó a mirar a Wukong este estaba al lado suyo a punto de coger su ropa

-No- se cruzó de brazos negandose a la idea que se mostraba en Wukong y como movia sus garras, se alejó un poco del ave y esta se acercó mucho más llegando a agarrar un pedazo de ropa con una garra -No!-

-Si- lo agarró de la camisa e intentó volar, lograndolo al poco tiempo. Pasaron con mucho cuidado por donde Wukong pensó, Nezha recogió sus piernas para notarse menos y finalmente pasaron, bajaron las escaleras haciendo el menor ruido posible, muy facil al estar forradas con una alfombra, todo muy fácil hasta llegar al último piso. Ahi Wukong descansó por un momento por toda la fuerza y energía que gastó preocupando a su compañero. Se escondieron dentro de una habitación para no ser visto por las sombras que aun trabajaban ahi

-Todo bien?- cerró la puerta con seguro y dejó que su compañero se sentara en una silla, su respiración estaba muy agitada y su cuerpo aun brillaba intensamente, el principe apartó la vista del mono para no lastimar sus ojos, hasta que finalmente se calmó pudo hablar

-Todo esta bien, no fue nada, he estado en situaciones peores Nezha- intentó levantarse mientras se reia falsamente, se cayó por el intento siendo ayudado por Nezha al rendirse después de intentarlo varias veces por du cuenta. Salieron por una ventana que había en el cuarto hacia el jardin trasero para evitar la gran cantidad de guardias en la entrada principal y todo el tiempo estuvieron pegados a la pared para no estar expuestos. Fue lento pues Wukong medio caminaba y el recorrido era largo, habia guardias, sombras y algunas criaturas parecidas a Mary pero más pequeñas aunque igual de aterradoras. Todo hasta que llegaron a una parte muy diferente después de cruzar un muro. Era un jardín con diferentes zonas divididas, un dojo, una pequeña choza con mesas blancas donde habian muchas sombras haciendo el trabajo de limpiarlas y llevarse los platos sucios, un bosque de wisterias y algunos lugares de combate al aire libre. Al fondo de todo habia un muro de hojas muy alto como si fuera un clásico laberinto. No le prestaron mucha atención