-El imperio de la Luna- [Shadowpeach] Lmk

•los invitamos a la ceremonia•

-Cheng, no puedes hacer eso! Es demasiado exagerado!- dijo Wen después de haber leido la carta que estaba a punto de ser dirigida al imperio de la luna -No tenias que llegar a estos extremos!

Cheng miraba a Wukong jugar con una criada desde la ventana del salón principal con una sonrisa, al escuchar la voz de Wen su sonrisa se desvaneció -esto lo hago por Wukong, por su futuro. Huang es una amenaza para el imperio-

Wen se sentó en una silla, sentia que estaba a punto de desmayarse, su pecho le comenzó a doler y su vista se nubló por unos segundos, mareada. No le cabia en la cabeza que Cheng le habia declarado la guerra a quien en un pasado habia sido su compañero, su mejor amigo, juntos habian viajado a muchas partes del mundo en busca de aventuras, en descubrir tesoros, profecías. Debia ser una pesadilla -no lo entiendo-

-Se que esto es algo muy espontáneo para ti, Wen. Pero se que es lo que hago. Huang siempre fue alguien vengativo, si yo no daba inicio a esto antes que el, me tomaría por sorpresa a todo su ejército a punto de entrar al palacio. Tomalo como una medida preventiva- continuó mirando a su cachorro jugar

-Pero por que? Dime por que crees que Huang tomaria venganza? Que hiciste?-

-Las relaciones no duran para siempre. Comenzó con una discusión por una joya, luego una pelea mientras entrenabamos, y eso se volvió normal. Y ahora no esta conforme con lo que hago- se quedó callado, llamado la atención de Wen, lo vió quitarse el saco que tenia puesto, quitó la venda que tenia puesta y ahi fue cuando vio una gran herida en el brazo izquierdo. Tenia un tiempo desde que fue ocasionada, un rasguño profundo que de seguro dejará marca

-Quien te hizo eso? Huang?-

-no, una de sus criaturas, estaba saliendo de su imperio junto Wukong y unos guardias. Apenas di un paso dentro del carruaje y esa bestia me agarró del brazo con su gran mandibula- se volvió a poner la venda con cuidado -por suerte Wukong estaba en el carruaje mirando una mariposa por la ventana, no vio nada de lo que pasó. Maté a la criatura pero me dejó este rasguño-

-Debio ser un accidente, tal vez la criatura se escapó-

Cheng gruñó -No fue un accidente! Entiende que lo hizo el! Sus criaturas estan entrenadas, siempre estan siendo custodiadas a cada hora del día para evitar accidentes. Esta más que claro que mando a la criatura hacerme daño!- Wen tembló por aquel grito

-Y- y que me dices de su cachorro? Que será de Liu'er? El no tiene la culpa de todo esto- Cheng se quedó en silencio

Tomó la carta y se la entregó al mensajero que esperaba en la entrada al salón. Este se fue casi que corriendo de alli -cheng, aun no me respondes -

-Esto no es de tu incumbencia, Wen- la miró por encima del hombro -Prepara el ejercito, ya sabes lo que se avecina- Wen solo asintió, sabia cual era su posición en el reino, se fue de alli esperando que Cheng cambiara de opinión

Pero nunca lo hizo

Pero ahora entiende perfectamente a que se refería Cheng cuando dijo que Huang era peligroso