Aún eres mío

Capitulo 9

Nathan

Jared me llevo hasta el baño, me sentó suavemente en la tina y comenzó a llenarla con agua caliente, una vez llena también él se metió a la tina quedando atrás de mi.

Comenzó a enjabonar mi espalda. Ninguno había dicho nada, pero se sentía un ambiente tranquilo.

Unos minutos más tarde por fin Jared hablo.

-- ¿Estás bien?-- pregunto mientras dejaba mi espalda y ahora empezaba a lavar mi cabello.

-- Si...-- Respondí, no me había salido otra respuesta.

-- ¿Seguro? -- Dijo dudando cuando respondí

--Si, estoy bien -- Le sonreí para calmarlo. Si estaba "bien", no me molestaba nada, solamente había estado pensando mucho en las cosas

Había tomado una decisión por el bien de ambos.

Decidí que tengo que acostumbrarme a esto, no quiero que Jared siga sintiendo culpa y supongo que yo no gano nada negandome. Me queda claro, por qué incluso ahora aún tengo las esposas, Jared prefiere bañarme que quitarme esto.

Así que, creo que lo mejor es dejar que las cosas pasen, de algo estoy seguro, Jared nunca me lastimaria, él me ama y solo quiere que pruebe cosas diferentes.

Además debo ser honesto, todo lo que me hace me encanta y le he tomado cierto gusto a todo esto.

-- Listo, te enjuagaré -- Estaba tan concentrado en mis pensamientos que no me di cuenta que Jared había terminado de bañarme, incluso el ya estaba listo.

Nos levantamos y Jared tomo la regadera para quitarnos el jabón. Una vez listos Jared tomo una toalla y me envolvió, él hizo lo mismo y salimos del baño.

-- Las quitaré un momento -- Jared quito las esposas solo para ponerme la playera de la pijama

-- Jared...¿Podría dormir sin ellas?  -- Pregunté con la esperanza de poder descansar mis manos

-- No -- Me quedé en shock con la respuesta de Jared -- Nathan, no me arriesgaré a qué te vayas en la noche

-- No iré a ningún lado -- No podía creer lo que había dicho Jared, acaso ¿Desconfiaba de mi?

-- Solo duerme Nathan -- Dijo Jared mientras se metía en las cobijas y me tapaba también

Tarde mucho en dormir, de alguna forma no me gustaba lo que había dicho Jared, pero no tenía opción, resignado cerré los ojos y me dormí