Clavel, el anhelo en el amor - Wenclair

Ella No Esta...

No sabia como sentirse en este momento exactamente, todo su ser estaba en shock todavia despues de todo ya habian pasado no sabia que debia de pasar exactamente ahora, estaba sentada en la orilla de un lago y tenia los nudillos vedados debido ala rabia que tenia dentro de ella en esos momentos.

-La mataron... y yo no estuve alli- murmuro sin ninguna expresion, habia llorado demasiado en estos dias y mas al escuchar al juez decir que no habia suficientes pruebas para refutar que ese malnacido era el responsable, ese maldito habia entrado a su casa y intento abusar de su esposa, cuando vio que ella no quiso seder la apuñalo tantas veces que perforo todos sus organos y cuando llego a casa... y alli estaba el cuerpo de su esposa con quien habia pasado los ultimos 16 años se habian casado en el primer año de universidad y habian estado junto a ella desde los 13, ahora todo eso se habia ido ala mierda de pronto todo eso habia sido arruinado por un maldito asesino.

-Si ella no esta... yo no puedo seguir aqui...- murmuro antes de dejarse caer en el lago, decidio no hacer ningun esfuerzo por respirar y pronto sintio como toda el agua se fue a sus pulmones, sintio como todo se volvia blanco y cerro los ojos esperando encontrandose con Enid una vez mas.

No supo en que momento todo el ambiente habia cambiado, solo sintio algo tibio entre sus brazos y un olor familiar en su nariz la vainilla, sus ojos se entre abrieron encontrandose con una cabellera rubia tan familiar... noto el cuerpo tranquilo desnudo de su esposa contra el suyo, no soporto las lagrimas y abrazo con fuerza el cuerpo dormido de Enid asustandola un poco.

-Amor? estas bien?- pregunto la rubia algo desconcertada al escuchar ala morena sollozar contra su cuello, ayer habia regresado de la universidad era maestra de Quimica y Wednesday era cirujana.

-N-no es nada... solo que soñe algo muy feo- murmuro sonriendo para limpiarse las lagrimas y volver a besarla mientras su mano viajo por su muslos... no tenia 35 años, no es por que dijera que Enid estaba vieja pero recordaba cada cambio en el cuerpo de Enid y ahora tenia diez años menos, habia retrocedido 10 años atras de aquel inccidente.

-A-amor- la rubia gimio cuando sintio las manos de su esposa en sus muslos abriendolos para acariciarlos apretando podia sentir como los dedos de la chica quedarian marcados en su piel.

-Un poco antes de ir al trabajo- murmuro contra su pecho dejando besos y noto las mordidas que suponia haber dejado la noche anterior, decidio dejarse llevar y hacerle el amor a Enid todas las veces que pudo que no la dejo salir de la cama que no tuvo mas que hacer que escribirle entre gemidos a sus estudiantes cancelando su clase.

Wednesday se sentia bien al parecer todo habia sido una mala pesadilla, eso queria pensar y ser optimista aunque estaria pendiente al dia que ocurrio ese maldito accidente, estaria alli cuando eso sucediera o lo evitaria de cualquier modo, no dejaria que nadie tocara a su esposa.

Asi pasaron los años todo parecia haber estado bien, nada cambio mas que algunos acontecimientos sin importancia, asi que siguio pensando que solo habia sido una mala pesadilla que la habia traumada.

-Hoy el hospital a estado muy tranquilo- el dia de la muerte de Enid se la habian pasado de viaje asi que ese acontecimiento no paso y todo estaba en paz. La enfermera que estaba a su lado solo asintio en respuesta, no habia cirugias de emergencia todavia, de pronto todo parecio irse y se escucho la ambulancia.

-Mujer de 35 años accidente de choche, su estomago fue perforado por el volante del coche, no tiene casi pulso- informo el paramedico y cuando bajaron la camilla y Wednesday sintio que su corazon se paraba unos segundos.

-E-enid...- murmuro temblorosa acercandose al cuerpo casi muerto de su esposa, una enfermera la quiso separar al darse cuenta de que era su esposa, ella solo nego dando indicaciones de forma temblorosa mientras llevaban a Enid al quirofano.

-No deberias estar aqui Wednesday... es peligroso mas con tus emociones en estos momentos- dijo Teo que era el mejor cirujado del hospital y era mejor amigo de la pelinegra.

-Yo puedo Teo... estare con ella y la salvare... no dejare que muera de nuevo- murmuro lo ultimo y entro al quirofano en estos momentos no sentia quella superioridad que anteriormente sentia cada vez que entraba a un quirofano, ahora temblaba cada vez que veia mas sangre de su amada y los recuerdos de aquel dia con el cuerpo de Enid en sus brazos llenos de sangre de ella, la hacian marearse y escucho el sonido de la maquina sonar, el corazon de Enid estaba dejando de latir- Pongale otra bolsa de sangre y traigan el desfibrilador...

-Wednesday... dejala ir- dijo Teo queriendo tocar el hombro de la morena pero esta lo empujo y agarro el desfibrilador, el solo le hizo seña a los demas medicos de que era hora de retirarse.

-Carga de 100- dijo entre sollozos tratando de reanimarla subiendo la intensidad hasta que la maquina solo hizo un pitido, Enid habia muerto de nuevo abrazo desconsoladamente el cuerpo de su esposa soltando un grito.- Por que otra vez... no no me niego, esto debe ser otra pesadilla...

Salio del quirofano agarrandose la cabeza murmurando varias veces que era una pesadilla y sentia un dolor indescriptible en el pecho al punto de no poder respirar, cayo al suelo tratando de respirar y pudo escuchar a los lejos los gritos de las enfermeras pero de nada servia, sentia como la sostenian y le ponian la mascarrilla de oxigeno pero ella estaba mareada, otra vez esa sensacion como cuando se ahogo en ese rio... todo fue blanco de nuevo.

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No apto para sensibles

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