Ellos son los streamers más famosos y el torneo del videojuego del momento
Los lleva a tener que jugar juntos.
Ellos se odian por una pelea del pasado
Nadie conoce sus rostros.
Pero lo que no saben es que talvez no esten tan lejos de lo que pensaban...
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En un susurro apenas audible, Noah cuestionó: —¿Estás seguro? —Leo no pudo descifrar sus palabras en ese tono tan bajo, por lo que no obtuvo respuesta.
Decidió entonces encender la moto siguiendo las instrucciones de Isaack. Su cuerpo estaba tenso, los músculos de sus brazos, piernas, abdomen e incluso su rostro se hallaban en un estado de alerta. El miedo se encontraba presente, pero no podía permitirse que lo abrumara.
Temia que sufrieran un accidente. Era la primera vez que montaba moto con alguien más, además de él. Giró la llave y la vibración del motor surgió debajo de él. Las manos de Leo reposaban sobre su abdomen, la moto empezó a andar. En un lapso de seis minutos, llegarían al instituto.
El viento frío del otoño comenzó a acariciar sus mejillas, congelándolas. Sorprendentemente, esta sensación era agradable. El cabello de Noah ondeaba en el aire, sintiéndose libre y lleno de vida, como un ave que surca el cielo por primera vez. Su mente se vació, sin preocupaciones: ni su padre maltratando a su madre, ni su hermano llorando, ni el peso del estrés. Solo existían él, el sonido de la moto y Leo.
Leo parecía acercarse aún más a él presionando su abdomen cada vez mas hasta un punto donde le costaba respirar.
—Leo, no puedo respirar —dijo en un sonido ahogado, tocando rápidamente la mano de Leo antes de regresar al acelerador.
Leo retiró sus manos, con un toque de timidez. Noah podía imaginar el sonrojo en sus mejillas el cual se notaba mucho.
—Puedes abrazarme, pero no tan fuerte,—sugirió Noah, girando ligeramente la cabeza para que Leo pudiera escucharlo.
—Puedes caerte si no te sostienes— Intentó mantener un tono indiferente, sin estar seguro si era el efecto de la adrenalina o algo más, pero su corazón latía con intensidad.
A medida que ganaba confianza y alegría, Noah comenzó a acelerar.
Hubiera sido perfecto si tuviera música para acompañar ese momento, el sonido a todo volumen de la musica en sus oídos y... la compañía de Leo, se sentía bien tener a alguien más en la moto, le daba una especie de confianza extraña.
De repente, un coche amarillo giró bruscamente cerca de ellos apunto de chocar. La cercanía del vehículo causó un latido acelerado en el corazón de Noah, y un temblor pasó por su cuerpo.
Un suspiro de alivio escapó de él mientras miraba hacia atrás para verificar la presencia de Isaack, quien aún los seguía.
Al hacerlo, notó cómo Leo había inclinado la cabeza, escondiéndola en su hombro mientras observaba hacia abajo. ¿Tendría miedo?, se preguntó Noah. La duda persistía, quizás estaba yendo demasiado rápido. Su mente comenzó a divagar mientras seguía manejando, observando los cálidos colores de los árboles pasar como manchas.
—Leo tranquilo no paso nado— Quiso tocar al chico en algún lado para darle confianza y hubiera podido, pero no lo hizo. talvez sería demasiado, para ambos.
Admiro los edificios y la gente que iniciaba su jornada escolar o laboral caminando en la calle.
Pronto llegarían al colegio y esto se acabaría, aun así Noah tenía la extraña sensación que ese momento se quedaría dentro de él, como uno de los pocos en los que se ah sentido libre.
Noah rompió el silencio: —Leo, hemos llegado —anunció con unos toquecitos timidos en la pierna de Leo.
Frente a ellos se encontraba la entrada principal al instituto. Noah sentía los murmullos y las miradas curiosas observándolos, las motos del padre de Isaack hacían bastante ruido y era imposible no notar, casi nadie llegaba en moto al instituto.
Era la primera vez que verían a Noah llegando en moto. De hecho, había sido una de las pocas ocasiones en que se había aventurado en una moto, gracias a las lecciones intensivas de Isaack durante las últimas dos semanas.
A petición de su padre para que así Noah se convierta más en un "Hombre" El chico odia esas palabras, lo hacen sentir mal. Suficiente tiene con los comentarios de sus amigos.
—Ahora, ¿cómo me bajo? —Leo bromeo timidamente. Se alzó para bajar de la moto, llenando el ambiente con su risa incómoda.
antes de que pudiera responderle Leo este ya se había quitado el casco.
Noah observó cómo el cabello morado de Leo caía sobre su rostro. Un sacudón y su cabello quedó perfectamente en su lugar.
—Noah, gracias— Leo habló en una voz suave pero grave, mientras Noah volvía a la realidad luego de observarle.
—¿Por qué? —inquirió Noah con curiosidad. —Por traerme. , quién diría que sabías cómo manejar moto — Leo sonrió incomodamente, Noah se percato de cómo sus ojos parecían cerrarse al sonreír, dejando ver muy poco de este.
—De hecho, es la primera vez —Noah agachó la cabeza, riendo tímidamente. Una pausa y luego continuó al ver la cara de confusión del chico.
—La primera vez que manejo con alguien, apenas Isaack me está enseñando — Señaló a Isaack, quien había estacionado al lado de ellos.
Un silbido de un grupo de chicos de baloncesto pasó junto a ellos, interrumpiendo la conversación.
—¡Hey Leo! gritaron y silbaron mientras hacían un gesto señalandolos.
Noah los reconoció, no eran amigos suyos ni de Sam, solo compañeros del equipo. Noah les lanzó una mirada fulminante, observando cómo Leo se sonrojaba.
—Pudimos haber muerto —Dijo en tono de frustra Leo y luego agregó con molestia —O al menos podrías haberme avisado en lugar de usarme como conejillo de indias—
La confusión invadió a Noah por el cambio abrupto en la actitud de Leo. Si bien entendía su frustración, también se sentía mal por haberlo traído apenas aprendiendo a manejar.
Noah no pudo evitar sentirse atrapado entre las expectativas de Isaack y la presión de este. Tampoco quería decepcionar o verse mal delante de Leo.
—Leo, perdón — Se disculpó mientras descendía de la moto.
—Está bien. Solo olvídate de todo esto y... —Leo se fue sin terminar, antes de que Noah pudiera responder o decir algo.
Isaack, al percatarse de la tensión, entrelazó su brazo en el cuello de Noah mientras caminaban luego de apagar sus y dejarlas junto con los cascos.
—¿Qué pasó? —Preguntó Isaack buscando entender la situación.
Noah desvió la mirada hacia un lado, encontrándose incapaz de mirar a los ojos de su amigo —Le dije que nunca había manejado con alguien más —respondió con un tono de resignación.
—Lo siento, hermano. Solo quería ayudar —
Noah se esforzó por sonreír a pesar de todo. —Está bien. Supongo que ya no tendré otra oportunidad de hablarle —sus palabras llevaban un dejo de tristeza mientras prendía su celular para revisarlo dejando ver su fondo de pantalla morado con el fantasma en el centro.
"Yeah, I know you're a stranger But I'm liking the danger Of the "I don't know" Don't give a fuck about labels Throw the dice on the table" —"Overdrive" Conan Gray
