Capitulo.8 "Disfrutar el momento."

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STILES POVS.

Empezamos a caminar juntos...

¿Por qué esa pequeña frase me hace sentir tan...? Tan contento. Solo estamos caminando. Él me guía, yo lo sigo, y... Ah, ni siquiera me entiendo a mi mismo.

Lo estaba mirando de reojo; su mirada al frente, derecho, serio, en silencio... Él me intriga. Pero este silencio tan incómodo me impide hablarle, es como si con una sola palabra lo echaría todo a perder.

-Derek,-me atrevo a hablarle, él voltea de soslayo conmigo.-háblame de ti.-al parecer lo tomo por sorpresa con mi comentario ya que en cuanto termino de decir aquello pone su mano en su nuca y me sonríe nervioso. No se porqué me es extraño y a la ves normal verlo sonreír.

—Okay, ¿Qué quieres saber?—ahora yo soy el desprevenido. Siento mi rostro arder.

—¿Ah? Oh, pues... Yo, no lo se... Tal vez...—me muerdo el labio nervioso. Entonces se me ocurre algo.—¿Qué tal si jugamos a las veinte preguntas?

—Te gusta mucho eso...—murmura sonriente. Lo veo confundido pero a la vez sorprendido. En realidad sí me gusta un poco dicho juego.— está bien, ¿Quién empieza?

—Yo.—él asiente y pienso en qué preguntarle.—¿Cual es... Uhm... tu color favorito?

—El negro.—lo veo de pies a cabeza; traía su chaqueta negra, sus botas militares negras y su jeans casi en negro. Era obvio.—¿Qué?

—Se nota que te gusta el negro.—le digo riendo, el se mira a sí mismo.

—Sí, supongo.—respondió.— Ahora es mi turno.—asiento y espero su pregunta. Después de unos segundos resopla y se encoge de hombros.—En realidad no se qué preguntarte, sé todo de ti.

—¿Eh? ¿En serio? ¿Cómo?—él suspira y baja la mirada. Voltea hacia mi por un momento y luego continúa caminando devolviendo su vista al camino. ¿Qué le pasa?

—Por nada... Pero tu sigue preguntando.—yo asiento aún algo confundido.

—Uh... Está bien.—lo pienso.—Veamos... ¿Qué es lo qué mas te gusta hacer?

—Ah, esa es fácil. Cuando ya es luna llena y soy un lob...—frunzo el ceño y él se detiene en seco.—Eh, quiero decir, me gusta... Mm... ¡Salir! ¡Si! Caminar por ahí, tranquilo, sin prisas y todo eso.

Lo miro incrédulo e intrigado. Acaso iba a decir... ¿Lobo?
Trato de olvidar ese tema, pero no puedo. Ya luego investigaré eso. Por ahora sólo quiero disfrutar estar con Derek.

—Uhm... Okay—respondo. Al parecer está algo nervioso así que le sonrío, él también lo hace y seguimos caminando.—Y... ¿Tienes novia o... novio?

Él guarda silencio por un momento y suspira.

—Tenía... Ahora no me recuerda.—lo veo con pena.

—Oh, Derek como lo siento. ¿Se fue o algo así?

Hizo una leve mueca.—Técnicamente sí.

—Que infeliz, ¿Cómo puede dejar a alguien así nada mas?—él ríe levemente, no se porqué pero aún así le sigo.

—Pues, no lo sé... Tal vez simplemente me olvidó y punto.

—No se puede simplemente olvidar a alguien, no si es que en realidad lo quieres. El amor se queda contigo todo el tiempo, pase lo que pase siempre ocurrirá algo que te recuerde a esa persona especial. Tal vez algún movimiento o, no lo sé, también puede....—paro en seco y me doy cuenta de algo.—también puede ser un recuerdo...

Lo veo directamente a los ojos; su par de lagunas verdes me miran igual. Casi me siento indefenso ante su mirada, pero no la aparto, disfruto del momento.

—Bueno, pues eso no le paso a él.—sigue caminando y yo lo sigo.—en realidad... Le mintieron, sobre mi. Por eso ya no me mira de la misma forma...—inhala hondo y suspira con pesadez.— Es duro en realidad, que la persona que amas no te recuerde y te diga directamente "¿Quién eres?" Es... Horrible.

Asimilo lo que me dice Derek...
No se pero empiezo a odiar a ese chico, es decir, ¿Cómo puede olvidar a alguien como él? No lo digo en un mal sentido sino que el hecho de tener a alguien como él a tu lado seguro es… Sería una enorme oportunidad que no se abandonaría.

—¿En qué tanto piensas, pequeño?—me ruborizo al instante por el sobrenombre y sonrío. Nunca me había pasado esto... No que yo recuerde, literal.

—Yo... Nada. Sólo en lo que me has dicho. Si yo estuviera en el lugar del chico tal vez me esforzaría en recordar o, no lo se, tal vez yo...

—Hemos llegado.—me interrumpe. Miro sorprendido la casa, ¿Ya llegamos? ¿A qué hora que ni me di cuenta? Ni siquiera noté cuando llegamos al pueblo.

—Oh.—camino unos pasos pero un desnivel me hace tropezar y me tambaleo. Estoy seguro que voy a estrellarme contra el piso, o eso hasta que siento una mano tomar mi brazo y jalarme con él. Me estabilizo de nuevo pero ahora estoy pegado, literal, al cuerpo de Derek. Como soy mas bajo alzo la mirada y me encuentro con la suya.

—Siempre siendo algo torpe, ¿No, pequeño?

Me ruborizo hasta las orejas, uno: por el sobrenombre, de nuevo. Y dos: ¡Que vergüenza! ¡Casi me caigo frente a él!

Bajo la mirada avergonzado y tímido, él me toma mi barbilla delicadamente y me hace mirarlo de nuevo. Esta ves siento una conexión especial... Único, junto a él.

Nos vamos acercando poco a poco... Puedo sentir su aliento, lento y calido...

Pero no debo. Esto está mal.

—Yo...—carraspeo y me alejó un par de centímetros.—Debes irte.—murmuro.

—¿Quieres que me vaya?—murmuró de vuelta. Muerdo mi labio y suspiro.

—Si soy sincero—hago una pausa.—No.—puedo notar una pequeña sonrisa formarse en su rostro.—Pero creo que el sheriff vendrá dentro de poco y no quiere que esté contigo. No sé la razón pero... Se que puede terminar mal.—Derek acaricia mi mejilla y yo me sonrojo.

Todo esto es tan rápido... Pero siento como si ya hubiera pasado años desde que empezó esto.

—Lo haré. Pero prométeme algo.—le veo curioso.

—¿Qué cosa?

—Deja tu ventana abierta.

Remember the Time ««Sterek»»Where stories live. Discover now