"Había una vez......, pero ya no"
Ella amaba las historias de ficción y tramas intrigantes, ¡oh! cuanto adoraba leer o ver una buena película de amor y fantasía. Pero una de sus historias preferidas era "ZIBÁ", una historia sobre un guerrero príncip...
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5 horas antes:
Mientras el joven dragón aterrizaba a las puertas de su pueblo en un reencuentro pospuesto por años. La otra mitad de dicho dragón caminaba por las calles con una capucha cubriendo su largo cabello, para Minjae era necesaria esa escapada, sabía que Luar estaría en buenas manos en su ausencia por la manera tan dulce y devota que Jungkook tenía con ella, por eso aprovechando el descuido de las niñeras de la bebé se escabullo silenciosa de allí al pasillo y viendo que nadie la encontrará salió por la puerta trasera al patio que se encontraba en la inmensa cocina del palacio. Ella necesitaba salir, despejar su mente y solo estar en conexión con sus emociones y además conocer la ciudad que tanto había anhelado en su imaginación al leer. Sin importar la lluvia Minjae disfruto de la libertad que brindaba estar sola por un tiempo bajo las gotas de lluvia por esa ciudad, no parecía un pueblo, era maravilloso todo ante sus ojos, una mezcla de lo tradicional en asia con la actualidad que ella vivía, había autos modernos, televisión, electrodomésticos en tiendas, todo era tan hermoso, un paraíso para ella, ¡hasta habían celulares! Pero según vio no cualquiera los tenía, únicamente gente al parecer clase alta o ricos tenían acceso a ese "lujo".
Caminando la pelinegra curioseaba los puestos de ventas del mercado, quienes con sus toldos coloridos protegían sus productos del sol del día, y justo ahora de la suave llovizna que caía. Vistiendo una larga capa que cubría sus ropas completamente en un color negro bastante puro y una capucha protegiendo su cabello, Minjae paseaba cómoda mirando las sonrisas de los vendedores del mercado platicando con los ciudadanos. Era muy hermoso el pueblo a su parecer, personas amables y alegres que caminaban en su día a día con una sonrisa en el rostro y una tranquilidad envidiable, ya quisiera ella estar tan despreocupada, pero no, al contrario de eso estaba escapada paseando porque se sentia más estresada que nunca. A lo lejos una carcajada rasposa, típica de un hombre mayor, se escucha entre el bullicio captando su atención y en el proceso dándole un leve susto que no sería notado por nadie realmente, un señor de cabellos canosos y frondosa barba blanca platicaba con un ser que dejó con la boca abierta a la pelinegra.
—Un centauro.......—Murmuro impresionada, observando atenta como el antes mencionado ser reía con el señor de avanzada edad mientras esté le atendía brindándole en una canasta varias manzanas verdes y rojas que luego fueron cubiertas por un pañuelo a cuadros en verde. El centauro vestía un chaleco de cuero café que dejaba ver sus brazos y en sus muñecas poseía unos brazaletes hasta mitad de su antebrazo en un color dorado con el diseño de una herradura en ambos y con un modelo que al parecer era imposible de quitar de ese lugar, además de que un grueso cinturón dorado y enorme apretaba las curvas a los costados de su abdomen. Era simplemente impresionante y realmente imponente. Su mitad animal en un color café oscuro lucía brillante y cuidado con una cola que se movía de ves en ves en un negro acendrado¹ que era imposible de no ver con una argolla dorada atando la cola como un coleta muy sofisticada—Para ser un centauro lleva bastante joyería encima.......—Hablo consigo misma concentrada en el espécimen nuevo a descubrimiento suyo. Era emocionante además porque cientos de posibilidades de otros seres y criaturas de abrían paso en su mente a conocer, además de las que ya sabía que existían allí. Con una pequeña sonrisita curbando la línea de su boca pensó en reanudar el paso más el estruendo a sus espaldas la asustó dando vuelta sobre sus talones para ver qué ocurría. Guardias reales corrían detrás de tres sujetos de rostros cubiertos por una tela que dejaba a la vista únicamente sus ojos. Cómo los bandidos del antiguo Egipto que aparecen en tantas películas y series.
