'Epílogo 💜

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Un lindo omega rubio caminaba por la orilla de la playa mojando sus piecitos con el agua del mar mientras acariciaba su pancita de 8 meses.

La familia Jeon había decidido pasar sus vacaciones en aquella casa de playa que era su lugar seguro, su refugio, aquella casa que había sido testigo del amor tan puro y verdadero que existía entre alfa y omega.

Jimin no podía creer como su vida había cambiado tanto en un año, luego de reencontrarse con su familia y amigos, unas semanas después, Jungkook y él habían decidido mudarse a Tokio junto a Sohyun.

Era lo mejor que podían hacer pues el alfa no podía salir a la calle como si nada ya que en Seúl, todo el mundo lo conocía, todos sabían que él era un mafioso y que además se suponía estaba muerto. Así que irse a vivir a otro país para tener una vida normal era su mejor opción.

Fue difícil para todos aceptar aquella decisión pues recién se habían reencontrado y ahora se alejaban nuevamente, claro que Jungkook y Jimin les dijeron que regresarían siempre en las vacaciones y en ocasiones especiales y estarían en contacto todo el tiempo.

Jimin ahora era el dueño de una excelente escuela particular que su alfa había construido para él con ayuda de BamBam y Jackson, los cuáles ahora eran pareja, una pareja realmente peligrosa y enamorada.

El pelinegro ahora era el dueño de una cadena de hoteles bastante lujosos, claro que todos estaban a nombre de Jimin por cuestiones legales y eran dirigidos por Soobin y Yeonjun, Jungkook sólo era quien manejaba todo por debajo del agua, se mantenía con un perfil bajo, pero eso no le impedía salir y pasear por toda la ciudad con su familia.

Porque sí, seguía encargándose de la organización, no era algo que pudiera dejar de la noche a la mañana y además era cómo un hobbie para él, el tráfico de armas, el tráfico de drogas y el lavado de dinero seguían siendo su mayor ingreso. Ahora los casinos ya no tenían omegas, al menos no omegas que fuesen secuestrados, los omegas que trabajan en estos llegaban ahí por voluntad propia.

Vivían bien, mejor que bien.... Eran ricos..

Seol seguía creciendo cada día, se había adaptado rápidamente a su nueva vida, ahora se veía mucho más contento, iba a clases de idiomas en las tardes y después a clases de fútbol pues se había vuelto su deporte favorito.

Jungkook amaba pasar todo el tiempo que podía con su hijo, jugaban fútbol todas las tardes, le ayudaba a hacer ka tarea o veían películas en la sala de cine que había en su mansión.

Todo estaba bien, cómo Jimin y él siempre lo habían soñado, una vidabtranquila... Hasta que la noticia de la nueva cachorrita llegó.

Jimin había comenzado a sentirse bastante mal, tenía ascos, mareos y mucho vómito. Al principio pensó que todo se debía a su nueva alimentación pues en Japón toda la comida era diferente, así que no le tomó demasiada importancia, siguió con su rutina normal, iba a trabajar en las mañanas y en las tardes se dedicaba a su alfa y a su cachorro.

Una tarde estaban jugando los tres fútbol en el jardín cuándo la cabeza comenzó a darle vueltas y de pronto vió todo negro. Despertó un par de horas después en la habitación de un hospital, Jungkook sostenía una de sus manos y en cuánto sus ojos conectaron pudo ver lo preocupado que su alfa se encontraba.

- Cachorro...

- Hola...

- ¿Cómo te sientes cariño?

- Bien, ¿Qué pasó?

- Te desmayaste amor...

- ¿Qué?

'Stuck With U💜Where stories live. Discover now