Un sueño con Lazos Oscuros

Capítulo 11.5 [R+18]

El pecho de Katsuki iba a explotar, se había besado por primera vez en su vida con Deku y había sido increíble. Acabó mareado, todavía demasiado incrédulo a que aquello fuese real, Izuku había correspondido a sus sentimientos.

Caminaban tomados de la mano, no sabía qué decir, pero Izuku parecía feliz con aquel silencio y eso eran suficiente para él, pero aún tenía algo que añadir.

— Gracias, el otro día cuando te pedí que me dieras tiempo, para poder decidir el momento en que contarte lo que me pasaba, era esto. Quería encontrar el momento para decírtelo.

— Cualquier momento me habría hecho igual de feliz Kacchan, me alegro de haberte sabido dar tiempo, a veces soy muy pesado.

— Pesado es Kirishima, lleva toda la semana amenazándome para que lo hiciese...

— Eso explica las conversaciones silenciosas con las cejas que manteníais los dos, tenía ganas de preguntar cada vez que pasaban.

Katsuki apretó con mayor fuerza la mano de Deku cuando entraron en los dormitorios, pasando entre sus compañeros camino al ascensor, algo le dijo el peliverde a la cara redonda que ni se molestó en escuchar. Pero cuando las puertas del ascensor se cerraron, Izuku estaba presionándolo contra la pared, tomando en posesión sus labios. Era prácticamente primerizo en las sesiones de besos, pero estaba cogiendo soltura, sobre todo teniendo de ejemplo a Deku que resultaba ser un gran besador. Si le hacía eso a menudo, iba a lograr que no pudiese andar durante minutos.

Las puertas se abrieron en su piso, ambos salieron dejándose tirar por Deku hacia su cuarto, se había dado cuenta que desde su primer beso aun no se había atrevido a tocar al peliverde y siempre había sido este quien había realizado todos los acercamientos. Así que en cuanto entraron, tomó el cuerpo de Deku entre sus brazos, empujándolo contra la puerta que se cerró al tiempo que sus bocas chocaban.

Izuku se dejó besar, gustoso, disfrutando de cómo sus manos se hundían en sus nalgas. Aprovechó para saltar, subiéndose a sus brazos, envolviendo su cintura con ambas piernas, eliminando toda separación entre ellos. Estaba en un sueño demasiado perfecto, incluso se permitió el abandonar los rojizos labios para reclamar su cuello, mordiéndolo con suavidad y sacando leves gemidos en recompensa.

— Kacchan, cama.

Y eso lo congeló, dejando su labor para mirar a Izuku que sintió su cambio de humor, dejándolo descender de sus brazos, poniéndose en pie aun con la respiración entrecortada.

— ¿Qué pasa Kacchan?

— Yo no he hecho nada de esto antes. — Izuku lo miró sin entender a qué se refería y eso alteró aún más a Katsuki. No había pensado nunca en la diferencia de experiencia entre ambos, porque nunca pensó que nada pudiese ocurrir entre ellos, era un imbécil, debería de haber leído algo. — Izuku, no he estado nunca con nadie, no estoy seguro de saber qué hacer...

— Me habías asustado Kacchan. — Realmente sonaba aliviado, aunque Katsuki pensó que se iba a sentir cortado tras decirle aquello, o que le iba a preguntar algo como «¿Con nadie, nunca, nunca?». — Pensaba que me había pasado o que te estaba incomodando. — Izuku lo tomó de la mano, para llevarlos a ambos hasta la cama a sentarse. — No pasa nada, podemos ir más lento pero tranquilo no te iba a decir que me follases así de primeras, quería seguir besándote en la cama.

— Ah. — Deku rió. Katsuki se sintió un estupido por haber roto el momento, pero entonces los labios de Deku volvieron sobre los suyos, siguiendo aquella labor intensa a la que se estaba volviendo adicto. Una de sus manos apoyada sobre la pierna del peliverde se apretó, subió por la misma consiguiendo que este resoplara. — ¿Podemos quitarnos algo de ropa?

Izuku no respondió, simplemente comenzó a desvestirlo mientras él hacía lo mismo, tuvieron que frenar los besos para incorporarse y quitarse los pantalones antes de volver a la labor de nuevo en la cama. Únicamente vestidos con sus calzoncillos, dejando que sus cuerpos se rozaran. Sus piernas se entrelazaron con las de Deku, sentía sus manos recorrer su espalda con hambre hasta llegar a su culo, apresándolo sin ninguna vergüenza. Él también quería más del cuerpo de Izuku, descendió de sus labios por su cuello, el cual ya sabía que era sensible, continuando el descenso hasta uno de los pezones, que mordió tal vez con muy poco cuidado.

— ¡Kacchan! — Izuku había gemido con fuerza al tiempo que su pierna, que frotaba la entrepierna de su amante, se sintió húmeda. Katsuki tuvo que mirarla para saber qué había ocurrido. — Lubrico mucho, ven aquí. — Izuku lo tomó de los cabellos, obligándole a juntar sus bocas, antes de invertir posturas y quedarse encima.

Estar debajo le estaba otorgando una visión privilegiada de Izuku, tan sexy. Estudiando así todo su cuerpo como si fuese una obra de arte.

— ¿Te gusta lo que ves, nerd?

Izuku sonrió a aquella pregunta, esa sonrisa tan especial que tenía cuando sus ideas dejaban de ser inocentes, tal vez había logrado provocarlo.

— Me gusta mucho, pero aun no he visto todo... — Los dedos de Deku estaban levantando el borde de su calzoncillo, apenas introduciendo la primera falange en ellos a sabiendas de que si se introducía tocaría directamente su miembro. — ¿Puedo verlo todo, Kacchan?

— Si joder, al final si que eres un puto pervertido.

— Solo por Kacchan.

Izuku terminó de meter los dedos acariciando la cabeza de su miembro, mientras su otra mano se dedicaba a bajar la prenda de ropa para liberarla al completo. Gimió cuando su cálida humedad fue liberada, pero el frío aire del cuarto fue sustituido por una mojada cavidad. Al mirar entre sus piernas presenció a Deku con los ojos cerrados engullendo.

— Joder Izuku.

No podía apartar la mirada de la escena, verlo disfrutar cada vez que se hundía en su garganta lo estaba llevando al límite y acababa de empezar. Iba a apartar la mirada, pero entonces los ojos de Deku se abrieron haciendo que ambos se encontraran, estaba hipnotizado por esos verdes orbes mientras cada vez se hallaba más cercano al final.

Vio como Izuku llevaba una mano hasta su propia entrepierna y pronto el sonido de su mano masturbandose acompañó sus gemidos. Deku gemía en torno su polla, haciendo que esta vibrara, que junto la succión lo hiciese no aguantar menos.

— Izuku, yo... ¡Joder!

No sabía si había logrado avisarle de lo cerca que se encontraba del orgasmo, porque en ese momento la cabeza de Deku comenzó a subir y bajar con mayor fuerza. La succión lo estaba matando. Katsuki no pudo más que agarrarse a las sabanas, encorvando la espalda cuando todo llegó. No tenía relación con ningún orgasmo que hubiese tenido antes, estaba haciéndolo olvidarse incluso de respirar. Cuando aún se estaba corriendo, Deku gimió con fuerza con su polla enterrada en su garganta, dándole otro orgasmo mientras este se venía en su propia mano

Sus piernas y dientes vibraban sensibles por lo que acababa de pasar su cuerpo, su corazón estaba desbocado, mientras un nuevo gemido escapó de sus labios cuando Deku lo dejó ir de su boca. Había sentido como aún estaba luchando por tragar todo lo que había recibido.

— Lo siento, quise avisarte pero... — Deku estaba aún tragando mientras se incorporaba y le mostraba su mano completamente manchada. — Oh, ya voy. — Se estiró para lograr tomar uno de los pañuelos y que pudiese limpiarse la mano.

— Si que me has avisado Kacchan, por eso he ido más rápido. — Le sorprendió lo grave que sonaba la voz de Izuku, pero tenía sentido después del esfuerzo que había hecho su garganta

Observó a Deku terminar de limpiarse y como se levantó para quitarse el calzoncillo, que ya había empapado en un principio. Entonces Katsuki fue consciente de algo, era la primera vez que veía a Deku completamente desnudo.

— ¿Cuando te pusiste así de caliente nerd?

— ¡¿Qué?! — Deku gritó avergonzado, eso le complació, que aún pudiera avergonzarlo, después de haber visto lo que había hecho entre sus piernas como si no fuese nada de otro mundo.

— Ven aquí. — Salió lo justo de la cama para tomarlo de la muñeca y meterlo de vuelta con él. Volvió a besarlo, disfrutando de poder tener sus pieles en contacto una vez más.

No sabía si iba a ser capaz de dormir, solo que no quería despertar.