|| Capítulo 1||

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Generalmente escribo sobre temas de violencia y abuso, tanto psicólogo como físico. Y está historia no es la excepción, tomare un poco más serio el tema.

E inspirandome en el "Violentometro", daré un fic de unos pocos capítulos, pero bastante cargado de demonios personales.

Arte por: rttebnjuice

En "X".

"Capítulo 1: Rosa pastel- Belanova"

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"Capítulo 1: Rosa pastel- Belanova".

De regreso a casa todo era paz, caminar solo por las calles era el mejor momento del día, con los audífonos tan alto que no escuchaba al mundo a su al rededor, el camino no era largo, pero si placentero, llegó al frente de su casa con una enorme sonrisa, la llave encajo en la cerradura y abrió la puerta, se quitó los audífonos de las orejas y subió más el volumen para oir la música.

-¡Hola, hermosa!- gritó, pero no hubo respuesta, se refería a su mascota, una gata blanca y de ojos bicolor que tenía hacia un año.

Alzó los hombros, tratamdo de relajarlos. Apagó la música en sus audífonos, quizá si escuchaba con atención la oiria bajando por las escaleras. Pero no fue así.

Entonces decide subir a su cuarto, seguramente estaba dormida.

Sin embargo su preocupación aumento cuando noto la ventana de su cuarto abierta de par en par, llamo por el nombre de su adorada gatita, pero no hubo respuesta, un maullido lo hubiera calmado, pero ni siquiera eso. Cerro la ventana como si supiera que estaba dentro de la casa, como si no lo hubiera dejado así desde que se fue a la escuela, como si no supiera ya que había huido. Lo extraño es que no recordaba haber abierto la ventana por la mañana, nunca lo hacía y en el caso, cerraba el cuarto para que nada malo le pasará a su pequeña.
Una idea fatal cruzo por su mente cuando su madre al responder el celular le dijo que no tenía idea y que no la había visto en todo el dia, quería llorar.

Había dichoselo a su madre, que cerrará las puertas, que no dejará las ventanas abiertas.
Su Misha no era una gata callejera y no lo sería en sus manos, sabia perfectamente el peligro que corría allá en las calles. La rescató siendo un bebé, tenía muchísimo miedo de lo que podía pasarle. Quizá incluso ya estaba...

No, ni pensarlo. No estaba dispuesto a perderla, Misha era su única compañía durante las tardes y perderla así como así no era parte de sus planes.
Salió corriendo a la calle, buscando por todos lados ese pelaje blanco y sus ojitos bicolor

Corría gritando su nombre, buscando con la mirada y preguntando cómo si de un padre preocupada de tratase. Le mostró la foto a cinco personas como mínimo, dando su número de celular más de una vez para que se contactaran si la veían, realmente estaba entrando en crisis.

Ultraviolence || DeAvy ||Where stories live. Discover now