Axiomático ☆ Kookv

02

El mismo día en la tarde Jungkook, Jimin y yo estábamos metidos en la piscina mientras Namjoon tomaba sol en una de las sillas con el bafle a un volumen suficientemente alto.

Honestamente no entendía el hecho de ponerse bajo el sol voluntariamente pero Namjoon era fanático de hacerlo.

Su piel se lo cobraría unos años mas tarde.

Jimin y Jungkook se pasaban la pelota mientras yo estaba sobre el flotador de cisne moviéndome de un lado a otro lanzandoles agua con una pistola de juguete.

Deje de dispararle a Jungkook y Jimin cuando me fije en Namjoon que estaba muy tranquilo y pacífico en su silla.

Me acerque con el flotador a la orilla y empecé a dispararle varias veces hasta que se vio confundido buscando de donde le llegaban los finos chorros de agua. Cuando dirigió la mirada a la piscina y me vio empezó a reír contagiandome.

Lo siguiente que sentí fue como el flotador se daba vuelta tirándome a el agua escuchando como las risas se intensificaban.

Cuando salí del agua vi a Jungkook junto a él flotador mirándome con una sonrisa divertida.

—¡Karma! —grito Namjoon entrando a la piscina— Simplemente el karma — tomo la pistola y empezó a lanzarme chorros de agua.

Me sumergí y nade hasta la espalda de Namjoon y me colgué de su cuello dándole un pequeño coscorrón—Simplemente karma, Joon.

Namjoon se sumergió con Taehyung en su espalda riendo, haciendo que ambos se perdieran el ceño fruncido de Jungkook.

A las cuatro de la tarde almorzaron hamburguesas que le encargaron a un vecino y siguieron en la piscina hasta la noche tomando cerveza, y salieron cuando empezo a hacer frio y ya tenían la piel arrugada como pasa.

Hicieron una comida sencilla antes de subir a las habitaciones ubicándose en la más grande. Jungkook y Namjoon llevaron un colchón de la cama de otra de las habitaciones poniéndolo al otro extremo de la habitación contra la pared.

—¿El televisor tiene Nexflix? —preguntó Jungkook acostándose y Jimin asintió mientras lo ponía y buscaba alguna película del interés de todos para ver.

Estaban esperando a Taehyung para darle play a la comedia que escogieron, el menor fue el último en meterse en el baño para bañarse y así mismo fue el último en entrar.

Se acostó junto a Jungkook y se cubrió con las dos cobijas que tenia el contrario, se dio vuelta dándole la espalda para estar más cómodo y Jungkook se pego completamente abrazándolo por la cintura, le dejo un beso en la nuca y ambos volvieron a poner toda su atención en la película con una sonrisa en sus rostros.

[...]

Al despertar sonreí al ver que  Taehyung estaba abrazado a mi torso y su cabeza descansaba sobre mi pecho.

Eran pasadas las nueve de la mañana y Namjoon y Jimin no estaban en el cuarto pero habían dejado un mensaje en el chat diciendo que bajaramos a desayunar cuando despertaremos.

Con cuidado me quite a Taehyung de encima y le deje besos en la cara para despertarlo.

Taehyung era una persona maravillosa y llevando más de cinco años de ser su amigo me puedo dar el lujo de decir que lo conozco extremadamente bien. Un hombre cariñoso, tímido pero completamente seguro de sí mismo, impaciente, chistoso y con una cantidad inmensa de valores, con una balance físico perfecto de hermosura y sensualidad. Taehyung era un ángel del que llevaba enamorado seis meses.

Seis meses en los que me robaba suspiros y provocaba demasiadas emociones sin ser consciente.

Se removió bajo el toque de mis labios en su mejilla y abrió los ojos lentamente.

—Mhhh —se quejo cubriéndose con la cobija— Déjame dormir...

—Tenemos que ir a desayunar —dije sonriendo bobamente. Tome la manta bajándola hasta su pecho dejando ver sus labios arrugados en un puchero— Jimin y Nam nos están esperando.

—Esta bien —dijo con la voz aun adormilada rodando los ojos— Solo dame un momento —asentí viendo como volvía a cerrar los ojos y el sueño volvía a consumirlo.

—Arriba Tae —me levanté y le quité la cobija de encima— Estas quedándote dormido otra vez, a desayunar —tome sus brazos y lo jale hacia arriba haciendo que se levantara quedando de pie frente a mi, deje un beso en su mejilla y me coloque el abrigo mientras Taehyung buscaba el suyo.

—Oye no encuentro mi saco —rasco su nuca inspeccionando toda la habitación.

—Ponte uno mío —lo extendi y se lo puso son una sonrisa.

Bajamos a la cocina donde estaban Jimin y Namjoon sentados en la isla mientras hablaban.

Nos unimos a su conversacion mientras desayunabamos y terminamos sentados en la sala haciéndonos compañía mientras cada uno veía su telefono, y me veo orgulloso de recalcar el hecho de tener a Taehyung recostado sobre mis piernas.

[...]

Los cuatro habian salido de la finca a dar una vuelta por el conjunto, podían ver las demás propiedades desde afuera y algunos animales que se paseaban libres por ahí.

Luego de dar vueltas y encontrarse a un par de personas llegaron a un pequeño estanque rodeado de algunas bancas y mesas.

Tomaron asiento y vieron como una mamá pato nadaba sin rumbo alguno siendo seguida por sus hijos.

Jimin y Taehyung se separaron porque vieron un arbusto de fruta y decidieron ir a coger unas cuantas.

—Tae —le llamo poniendo moras en la improvisación de bolsa que hacía el menor con su abrigo— Tu y Jungkook ¿están en algo?.

—¿Jungkook y yo? —repitió riendo— Claro que no Jim, sabes que lo mío no pasa de aquello y él solo me ve como un amigo.

—Pero han estado muy juntos Tae, y tu sabes que no son como un par de amigos cualquiera.

—Claro que si...

—Hoy estabas durmiendo en su pecho y él te tenía por la cintura, así mira —se acerco para imitarlos provocando que Taehyung riera— ¿Enserió no te gusta? —el menor negó— ¿Ni un poco? —negó  dudoso y Jimin junto sus dedos dejando un pequeño espacio— ¿Ni así poquito?.

—¿No?

—Me estás diciendo o preguntando.

—Solo es deseo sexual y él me ve como un amigo.

—Creo que te limitas mucho con lo último y estoy seguro de que no te ve solo como un amigo —no dejó que el menor hablará— A Namjoon no lo trata como a ti y a mi tampoco —dijo poniendo una última mora en el montón— Creo que tu mismo te estas limitando poniéndote una venda en los ojos.

—¿Tu crees? —pregunto mordiéndose el labio, gracias a Jimin ahora estaba dudando muchas cosas.

—Por supuesto —empezó a caminar de vuelta a la mesa— Solo tienes que abrir los ojos.

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  C.A