XXIII

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Narrador omnisciente..

— ¿no tienes una casa o que?.— el omega miro al mayor con reproche.

El haitani lo tenia apresado entre sus brazos mientras estaban acostados en la cama del omega. El kawata tenia el ceño fruncido, realmente no entendia el comportamiento del alfa.

Pellizcando las costillas del alfa fue que este lo solto del sofocante abrazo que el mayor mantenia sobre el, se puso de pie estirandose. Despues de que ran se metiera como si nada en sus planes de la noche pasada lo dejo quedarse a dormir ya que ers tarde y el mayor habia ido caminando hasta el hogar del kawata.

Lo que realmente no comprendia es como el Haitani entro a su habitacion sin que el se hubiera dado cuenta, aunque es ran, que se puede esperar de el realmente.

— ah pelusita, aun es temprano para que te estes enojando.— quejandose el haitani se sento, sobandose donde en menor le habia pellizcado.

El kawata solto un bufido y se cruzo de brazos.

— ¡Papá!.— la puerta se abrio de golpe, mostrando a una peli melon feliz, pero al ver que el alfa estaba ahi se detuvo.— ¿No que padre se quedo a dormir en la habitacion de invitados?

Ambos adultos miraban a la joven, la cual por los minutos de un incomodo silencio decidio en salir de la habitacion sin decir palabra alguna.

El kawata quedo mirando unos segundos la puerta cerrada para acercarse a esta y salir de la habitacion sin mirar al Haitani.

Ran salio unos segundos despues por esta, siguiendo al de cabellos melones. Llegaron a la cocina encontrandose con el peli turquesa.

— oh Naho, Ran, crei que seguirian durmiendo un poco mas.. y mas por que es raro ver cuando nahoya se levanta temprano.— tras decir lo ultimo, el peli melon solto un gruñido.

— Este idiota se metio a mi habitacion no se desde cuando.— el omega mayor apunto al haitani, el cual lo miro con una sonrisa burlona.

— hey, hey. No te enojes pelusita solamente.. que estabas todo bonito que no me resisti.—

Las mejillas del kawata tomaron un color rojizo y desvio la mirada avergonzado, aunque haigan pasado tantos años el alfa seguia siendo el mismo romantico y idiota de siempre, el mismo que le robo el corazon y que no desearia que cambiase.

Miro a kiyoshi y yuriko entrar a la cocina, siendo ambos seguidos por nikko.

— ¿Donde esta Taru?.— pregunto souya al no ver a su hijo mayor con sus primos y hermano menor.

— ah el, sigue durmiendo.— dijo como si nada kiyoshi tomando asiento.

El peli turquesa asintio para volver a lo que hacia antes. Nahoya salio de la cocina sin que los demas se diesen cuenta, saliendo al jardin de la vivienda. Ran al haber estado hablando con su hija no noto que el omega mayor se habia ido de alli, lo comenzo a buscar por un buen rato hasta llegar a buscar al jardin, encontrandose con varias flores alrededor del jardin de  y al kawata sentado en una banca mirando a la nada.

Se acerco a este a pasos lentos, creyendo que aun no era visto por este, hasta cuando escucho la voz del kawata.

— Sabia que no tardarias para comenzar a buscarme.— dijo volteando a ver al Haitani.

Ran solto una risita y se sento al lado del kawata.

— Quiero..

El haitani lo miro espectante.

— Ran, quiero iniciar de cero... quiero que no vuelvan a ocurrir las tragedias que pasaron el el pasado.— dijo.— no quiero que te separes de mi de nuevo.

Ran sonrio, realmente no esperaba que el kawata dijiera eso.

— quiero que tu seas solo mio.. se que suena posesivo, pero asi lo quiero.— dijo con la cabeza agachada por la verguenza del ver al menor. Ran por su parte miraba al menor con ternura.

— tu eres mio, como yo soy tuyo Naho-chan..

— tu eres mio, como yo soy tuyo Naho-chan

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Capitulo corto y bonito por que si.
Espero les guste <3
Agradezco a las personas que votan y comentan mi historia, aunque se que ya se volvio aburrida, pero aun asi lo hago ♡

Reiko4ll_

 Forever ; RanleyWhere stories live. Discover now