Reuniones Familiares

4.-Invadiendo

Nunca había estado más ansioso por que llegara el sábado.
Sin embargo haría que la espera valiera la pena.

Había sugerido indirectamente hacer una pijamada a su madre cuando supo que ella sería la encargada de la actividad de la próxima reunión.
Y ya que nunca antes había mostrado interés en participar, Kushina había aceptado con emoción.

Aunque mientras su madre hablaba sobre los bocadillos que darían por la noche, Naruto pensaba en que tanto podría gemir Sasuke sin despertar a los demás.

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Fue gracioso saludar a Sasuke con un apretón de manos formal cuando días antes lo había hecho correrse en una iglesia.

Ambos parecían más que conscientes y ansiosos por lo que podrían hacer una vez que estuvieran a solas.

La noche empezó con películas y juegos de mesa típicos, que mantuvieron a todos lo suficientemente entretenidos como para notar la manera en que Naruto introdujo su mano en la camisa de Sasuke, acariciando su cintura y espalda durante toda una ronda de dominó.
Y Karin tampoco se percató de que mientras sujetaba presumidamente la mano de su novio, el Uchiha utilizaba su otra mano para fortar la polla de Naruto por sobre su pantalón.

Los dos chicos estaban cada vez más cansados de los juegos, y se encontraban ansiosos por "irse a dormir".

Sin embargo Kakashi comenzó a repartir paletas heladas, y esto les brindó un buen entretenimiento.

Con una sutil sonrisa cómplice Sasuke llevó la paleta a sus labios, chupando la punta con lentitud, cerrando los ojos con deleite antes de abrirlos para mirar directamente a Naruto, quien sonrió de lado, recorriendo su paleta con su lengua de abajo a arriba.

El moreno se removió a su lado, metiendo la mitad de la paleta en su boca, succionando con movimientos rítmicos. Para cuando sacó la paleta de su cavidad, el líquido cremoso escurría por sus labios, y lo retiró relamiéndose de una manera que Naruto encontró deliciosamente obscena.

Oh, esto le daba tantas ideas.

Sin poder contenerse, se inclinó hacia el oído de Sasuke.

—Asegúrate de practicar correctamente, bonito, porque planeo ahogarte con mi polla en cuanto estemos a solas.

No obtuvo respuesta, pero el sonrojo en sus orejas y la manera en que introdujo más de la mitad de la paleta en su boca, fueron suficiente para Naruto.

Se alejó con una sonrisa satisfecha, esperando ansiosamente el momento en que pudiera demostrar con hechos todo lo que quería hacerle a Sasuke.

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—Karin, por última vez, no puedes compartir habitación con Sasuke, ni siquiera Temari podrá dormir con su novio, así que ve a la habitación con tus primas y deja de quejarte —habló Kakashi con clara exasperación.

La pelirroja se fue a regañadientes, mientras a un lado de ella, su primo trataba de reprimir una sonrisa burlona.

Todo le estaba saliendo incluso más fácil de lo que esperaba, cuando Kakashi avisó que compartiría habitación con Sasuke y Shikamaru.
Y fue definitivamente más fácil de lo esperado convencer a Shikamaru de que fuera a dormir a otra de las muchas habitaciones de la casa.

Ahora Naruto se relajaba en su cama mientras escuchaba el sonido de la ducha que estaba tomando Sasuke en el baño que tenía la habitación.

Estaba tratando de darle privacidad antes de que decidiera entrar y follarle sin descanso, pero esa exquisita voz se escuchó desde el baño.