Por Amarte [KTH+JJK]

Chapter XVIII ~ Quédate

"Muy feliz"

~🧨

Una semana y dos días habían pasado, Sehun curiosamente “ignoró” el hecho de que Jungkook haya roto el compromiso y salga con Taehyung, todo era tranquilo y la pareja cada vez se aferraba más a ese sentimiento que enaltece a sus corazones. 

Si, tal vez era necesario no hacerlo…

El auto de Taehyung se parquea despacio frente a la vivienda de Jungkook, ambos riéndose por alguna tontería dicha en el momento.

–Entonces –empieza Taehyung –hoy a las ocho en punto, ¿verdad? Pasaré por ti, no se te olvide decirle a Hobi hyung.

–Estaré listo, nos vemos en unas horas entonces –Jungkook cargó su mochila en un solo hombro y se estiró hasta compartir un suave beso con su lindo castaño que se quejaba porque no quería dejarlo ir.

El pelinegro con un buen ánimo corrió escaleras arriba saludando desde la lejanía a sus hyungs que estaban sentados en la sala. Tan tranquilo, tan ilusionado, tan… confiado.

Su ser fue completamente ignorante frente a los ojos que lo observaron llegar en ese auto negro, bajar del mismo, sonreirle a la nada y finalmente entrar a su casa. 

–Sehun, él ya llegó… hoy irá con Kim a una fiesta a las ocho, me lo confirmó Soomi y Ryujin, es nuestra oportunidad. 

Daniel envió aquel mensaje de voz que en medio minuto fue respondido, haciéndolo sonreír de lado y chasqueó sus dedos, encendiendo su auto y finalmente marchándose de aquel lugar.

(...)

Ambos terminan su café, Jihoon siendo el primero en reír complacido por el gran inicio de su plan, estrechando su diestra hacia el de hebras oscuras que lo observaba con una ceja arqueada.

–Mi Taehyung es muy ingenuo, seguro que no se negará.

–Más bien es un tonto –replicó Sehun, no dándole importancia al puchero que Jihoon había hecho –se encaprichó tanto con Jeon que su cerebro se intoxicó de él.

–¿No es ese tu caso también?

–¿Mío? –dijo el más alto en una risa irónica –Ni mierda, solo me gusta ver al niñato bonito ese portarse como un jodido marica llorón a mi lado. Después de esto, lo dejaré de pisotear.

–Oh, entonces procura cogértelo muy bien.

–No voy a hacer esa mierda, solo quiero que Kim lo vea como una puta escoria y que se cague en él. 

–Oh Sehun, eres un maldito genio.

En ese mismo momento, el cielo despejado que relucía en ese azul claro junto a pequeños rayos anaranjados por el atardecer, se fue cubriendo de niebla espesa y el cálido ambiente fue enfriado gracias al soplar de aquellas brisas.

(...)

19h30 p.m

Jungkook terminó de cubrir sus belfos con ese bálsamo de uvas. Su cabello negro muy bien arreglado, dos pendientes largos colgando de sus orejas y sus párpados tenuemente tintados de un carmín suave. Su cuerpo portaba un saco de cuero con bordes brillosos y una camisa negra simple. Sus pantalones oscuros que comúnmente vestía y unos pulcros zapatos formales.

–Hoy le diré a Tae que quiero que conozca a papá y mamá, seguro que ellos lo adorarán –habló para sí mismo, risueño ante su creativa imaginación.