𝘿𝙞𝙖 3... 𝙗𝙚𝙨𝙤𝙨

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"Solo no lo pienses tanto"

"Es que no sé cómo... no pensar en algo"

Caín soltó un gemido con molestia mientras se alejaba del pelirrojo, usualmente él era el nervioso en su relación pero Caín sabia más sobre una relación que Van Gogh y el más pequeño se ponía tímido al respecto. No era su primer beso, claro que no, ya había besado los labios de Ana Bolena, suaves y rosados... pero en verdad quería probar los del castaño, no eran ni la mitad de lindos que los de Ana, eran secos, con heridas casi recientes y un bálsamo de cereza que ocupaba cuando lo recordaba... pero aun así, se esforzaba en querer besarlos e igual no se quejaría, sabía que sus propios labios tampoco eran precisamente estupendos, su ansiedad los hacia morderlos y la necesidad de comer los restos de pintura en su pincel dejaban diversos colores pintados vagamente en la piel.

Cuando salió de sus pensamientos su novio ya estaba recostado en su cama cubriendo sus ojos con su brazo, sus labios levemente abiertos revelando el espacio pequeño en sus dientes centrales, Vincent tomo aliento y cuando cerro sus ojos fuertemente para besarlo el fuerte impacto de sus labios llego más antes de lo previsto, no abrió sus ojos al estar temeroso e intento imitar los movimientos que el mismo ensayo con su mano antes de venir a casa del más alto, gimió algo adolorido cuando los dientes de Caín lo mordieron, se separó abruptamente de el con sorpresa.


"Dios santo, tu solo me mordiste... que carajos"


"No uses el nombre de nuestro señor en vano y admítelo... te gusto

Van Gogh desvió su mirada avergonzado, una sonrisa traviesa salió de los labios de Caín, por supuesto que lo había gustado... desde ahí, su relación proveía besos intensos que le provocaban dolor a ambos... sus padres de los que fueron clonados se lastimaban constantemente, ¿No es justo que sus clones adolescentes lo hagan de manera mas sana?

𝐒𝐞𝐥𝐟- 𝐒𝐡𝐢𝐩 𝐒𝐞𝐩𝐭𝐞𝐦𝐛𝐞𝐫... 𝐕𝐚𝐧 𝐆𝐨𝐠𝐡Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt