𝑻𝒉𝒆𝒍𝒎𝒂

０４

En cuando el teléfono sonó Johaan de mala gana se levanto y lo contesto.

–Buenas noches, ¿es usted Enrique Camarena?

–No, soy Johaan Santana, ¿que se la ofrece?

–¿Se encuentra allí algún familiar de la señora Josefina?

–Sí.. déjame pasarle a mi esposa.

Thelma se levantó y tomo el teléfono.

–Hola, habla Thelma Camarena.

–Señorita Camarena, su madre se encuentra hospitalizada y necesitamos que venga a verla.

Thelma al oír esas palabras rápidamente se cambió y tomo su bolso, miró a Johaan que se quedo sin hacer nada.

–¿Que haces? Muévete, llévame al hospital.

Le lanzó las llaves del auto y el rápidamente se vistió, Thelma casi cae de las escaleras de lo tan apresurada que estaba. Subió al auto impaciente.

Johaan la siguió y arranco el auto llegando al hospital.

Thelma bajo y entró al hospital buscando a alguien que sepa de su mamá.

–¿Señorita Camarena?

–Sí, soy yo, ¿que le paso a mi madre?

–Los vecinos llamaron en cuando escucharon golpes dentro de la casa de la mujer, la encontraron golpeada y desmayada en el suelo.

–Pero, ¿quien haría una cosa así? 

–Creíamos que usted sabría, vendrá la policía a hacer preguntas.

–Johaan, llama a Kiki—lo miro y el médico le indico que podía usar el teléfono de recepción.

Johaan marco a la casa de Kiki y el contestó, en cuando le explicó la situación el vino lo más rápido posible.

Al llegar Thelma había salido de la habitación de su madre, ella seguía dormida, pero los golpes eran notables.

Kiki al verla limpiar sus leves lágrimas se acerco a ella y la abrazo.

–¿Que paso?

–El doctor dijo que cuando los vecinos de mamá escucharon golpes llamaron a la ambulancia ya que mamá se había desmayado, pero yo no se nada. Dijo que vendría la policía.

–Yo me encargo, tú no llores—limpio sus lágrimas y beso su frente—. Todo va a estar bien, ¿mamá como esta?

–Golpeada.

–Me encargaré de encontrar al sujeto que le hizo eso a mamá, esto no se va a quedar así.

En cuando vinieron los oficiales Kiki intento que no interrogaran a Thelma, pero fue inevitable e interrogaron a los dos.

–Ya le dije que no se nada.

–¿No sabe nada? ¿Esta segura?

–Estoy segura, no he hablado con mi madre en estas semanas.

El oficial levanto la ceja y Thelma lo miro.

–¿Esta insinuando que yo le hice algo a mi mamá?

–Cualquiera podría ser sospechoso.

–Dios, esto es increíble, soy hija de esa mujer. Nunca podría lastimarla, ¿ya vio como esta? Esta grave, nunca le haría eso a mi mamá.

–¿Y su padre?

–Yo.. yo no tengo padre, falleció hace años.

–¿Tiene algún otro familiar? ¿Su hermano?

–Mi hermano sería incapaz de golpear a una mujer, no lo haría nunca. Mucho menos a mi mamá.