♥️ Capítulo 13: La tristeza de María ♥️

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Era mayo de 1895, la primavera ya estaba entre nosotros, pero en mi corazón seguía siendo invierno. Desde que Leopoldo se fue a Cuba, solo convivía con la fría y cruda soledad.Ni siquiera podía gozar de la presencia de Ícaro que en 1893 y con once años dejó este mundo.
Ya habían pasado dos meses, sin noticias de él,dos meses sin escuchar su voz , dos meses tratando de comprender el porque de su decisión, no me conformo con eso de "siento que la patria me necesita, quiero pelear por ella" .
Él tuvo la fortuna de no salir sorteado,no tenía obligación de arriesgarse así, hubo muchos que gracias a su buena posición económica pudieron pagar las 1500 o 2000 pesetas de acuerdo al caso de cada uno para no ir a la guerra. Me dolió su elección, incomprensible para mí, me dolió que me haya dejado sola con una tristeza que aumentaba a medida que pasaban los días.
Desde que él no estaba los días parecían más largos, no tenía con quien hablar,ni con quien compartir la comida.
La amistad de Hermesinda, su esposo y sus hermanos , era lo único que me quedaba, ellos eran como el fuego que derrite la nieve de mi dolido corazón, eran  ese sol que uno espera encontrar después de una tormenta,ellos eran  el salvavidas que me mantuvo a flote para que no me hunda en el extenso y ancho mar de la tristeza.
Pero cuando cada uno se iba a su casa, yo me quedaba sola, con mis recuerdos y con mis pensamientos. Y cuando eso pasaba mi mente se convertía en un escenario donde se representaban las más oscuras fantasías que aumentaban mis temores y acrecentaban mi dolor . Sentía que no podía controlar mi mente, que no podía evitar pensar todo lo que pensaba,era como si tuviera vida propia, una autonomía que escapaba a mi dominio, algo con lo que no podía luchar, sentía que mi mente se había convertido en mi peor enemiga. Una enemiga demasiado fuerte, que me torturaba con sus ideas y que no me dejaba en paz.
No era locura, solo eran temores que me llevaban a pensar lo peor, a pensar aquello que no quería que pase nunca y no sabía como dejar de pensar,era difícil no hacerlo.Muchas veces afectaban mi vida diaria ya que me quedaba sentada durante horas en el sofá, inactiva, acompañada tan solo por buena música y una taza de café imaginando las posibles situaciones que podía estar viviendo mi hermano, una sucesión de imágenes aparecian en mi mente, imágenes asociadas con la guerra, con el dolor y con la muerte. Mi hermano corriendo con el fusil en la mano siendo alcanzado por granadas arrojadas por el enemigo ,lo imaginaba también dentro de su refugio,con sus compañeros, y encontrando la muerte ante un ataque aéreo, cayendo en una trampa hecha por los enemigos para derrotar a los soldados españoles, lo veía tirado en una improvisada camilla de un hospital de campaña.Desde que él se fue ,no podía pensar en otra cosa.
Se suele decir que la vida no es de color rosa, que tampoco es en blanco y negro, que tiene diferentes matices, pero yo en esos momentos estaba incapacitada para verlos, todo era negro para mí.Mi corazón estaba de luto aunque yo no estuviera de velorio.
Esos pensamientos no me abandonaban ni cuando iba a dormir. Durante la noche tenía una pesadilla ,en la cual yo tenía que salir y al abrir la puerta principal que da a la calle,encontraba el cuerpo de mi hermano tirado en la vereda, amputado, y bañado en sangre .Me despertaba en la mitad de la noche y me sentaba en la cama , sentía que había un aumento de las palpitaciones, me asustaba, creía que era el final de mi vida, pero no lo fue y comenzaba a llorar, me levantaba , me servía un vaso de agua y tomaba un sedante que me había dado Manolo. Después podía dormir bien,si tenía alguna otra pesadilla no lo recordaba.
Me levantaba tarde, y a pesar de haber dormido bastante, estaba cansada, me sentia débil, agotada, sin ganas de hacer nada.Sin ganas de vivir, era como si la vida se estuviera yendo y yo dejara que se vaya , sin luchar para que no me deje.
¿Y si era un autoreproche qué se somatizó?¿Y si mi culpa inconsciente había tomado mi cuerpo para castigarme? Sentía que algo de esto había, sentía que mi cuerpo me estaba enviando un mensaje que podía leerse de la siguiente manera :"tu hermano era tu vida,y tú dejaste que se vaya, sin luchar por él ".
¿Pero qué más podía hacer? Ya le había dicho todo lo que pensaba de mil maneras,en forma diplomática, gritando, llorando, y si no fuera porque Manolo me frenó en una oportunidad, hasta lo hubiese atacado físicamente. Encadenarlo y encerrarlo en un sótano hasta que la guerra terminara no podía.
También temía por mí, la idea de que me podía pasar algo estando sola , me tenía intranquila. Podía llamar a Hermesinda ante algún problema, eso ni me quedaba dudas ,ella siempre está para los amigos, es fiel a todos los que ama , nosotras somos grandes amigas , pero nos relacionamos como hermanas. Pero ,¿y si al llamar  no estaba?¿O estaba pero no llegaba a tiempo para atender?
La soledad muchas veces se vuelve pesada y difícil de soportar. No entiendo como hay gente que gusta de ella, ¿es qué no temen a nada?¿No son conscientes de todo lo qué les puede pasar?¿ O tienen demasiada confianza en Dios y están demasiado entregadas a Él? Por ratos me gustaría ser como esas personas, por lo menos viviría más tranquila.
Hasta me pesaba hacer todas aquellas cosas que son tan habituales , como el aseo , el arreglo personal y preparar mi comida.
Siempre estaba desarreglada y prácticamente no comía cuando estaba sola lo hacía en pocas oportunidades, y siempre cuando estaba en compañía de amigos.
Había adelgazado unos cuantos kilos, hecho que ya me habían señalado ,Luís y Manolo, este último no solo como amigo, sino también como médico.Es una suerte tener un amigo médico,ante cualquier duda le puedes consultar,y no solo eso también se aprende mucho.
Unos dos días atrás había estado cenando en su casa, cuando nos quedamos solos me comentó que tanto él como Hermesinda estaban preocupados por mi pérdida de peso, según ellos se me veía muy demacrada y ojerosa, y poco saludable. Manolo, me recomendó que me alimente bien y que me haga unos análisis de rutina. Pero no tenía ganas, si me pasaba algo, mala suerte,de algo hay que morir.
No le temo a la muerte,más le temo a la vida,nunca sabes que te espera el resto del camino.
En cambio con la muerte todo se termina, ya sabes que después de eso, nada más puede pasarte. Solo el eterno descanso.
Descansar, eso era lo que necesitaba mi cuerpo, y mi agitada mente,sobre todo esta última, que no dejaba de trabajar.
Siempre fui una mujer fuerte, pero en ese momento sentía que mi fortaleza interna estaba declinando, yo no me reconocía cuando me miraba al espejo, antes, siempre estaba impecablemente vestida, bien peinada, maquillada, hasta me ponía unas gotas de un perfume que me había regalado Leo ,después me vestía a la ligera,con lo primero que encontraba ,no importaba si no me quedaba bien o si no combinaba con nada,ni le prestaba atención a las manchas que podía tener la ropa, el maquillaje hacía tiempo que no lo sacaba del cajón de la cómoda, el perfume lo había dejado dentro del cajón de la mesa de luz y nunca más lo volví a tocar, y peinarme...solo si venía alguien o tenía que salir.
Tampoco compraba el diario,¿para qué? si solo trae malas noticias. Aparte me recordaba cuando lo compraba por Leo y eso me generaba angustia. Y para que leer cosas malas y tristes , si ya tenía mi propio teatro mental donde se representaban las
más sangrientas escenas inspiradas por cuestiones bélicas y la participación de mi hermano en ellas . Hermesinda siempre me tenía al tanto de todas las noticias.
Era consciente de que tenía que pedir ayuda, quizás el padre Francisco, párroco de la Catedral de Sevilla y muy buen amigo de mi mamá, hubiese sido el más indicado para recurrir en ese caso. Cada vez que mi mamá iba a misa se demoraba bastante porque se quedaba conversando con él. Eran tan amigos que en todas las actividades organizadas por el Padre , siempre se encontraba ella ,y no faltaba nunca al festejo de su cumpleaños.
Quizás...no estaba segura de ir a verlo y al final,el quizás se convirtió en un no.
No fui, no tenía ganas de contarle todos mis problemas.
Que lindo tiempo cuando estaban mis padres, y mi hermano y la guerra no me quitaban el sueño.
Si pudiera regresar el tiempo atrás y modificar los hechos para que no suceda todo lo que pasó lo haría.
Económicamente no me faltaba nada, Leopoldo se encargó de dejarme suficiente dinero para cubrir todas mis necesidades.
No quería contarles a mis amigos lo que me estaba pasando,no sé si me entenderían. Todo sucedía cuando me quedaba sola, porque cuando estaba con ellos, esos pensamientos no me invadían , estaba más relajada y me sentía mucho mejor.
Un día en que me encontraba muy mal sonó el teléfono y me distrajo de mis pensamientos.Cuando atendí escuché la suave y dulce voz de Hermesinda.
- ¡María! ¿Cómo estás mi amor?
- Hola, estoy bien, gracias¿Y tú cómo te encuentras?
-Yo muy bien gracias a Dios.¿De verdad estás bien? Es que con Manolo no te notamos tan bien como tú dices .¿Extrañas a Leopoldo?
-Sí.
- Y bueno María ,¿qué vas a hacer? Ya sabes como es Leopoldo, se le mete algo en la cabeza y no se lo saca nadie,es muy testarudo, no le hace caso a nadie, nosotros hicimos todo lo posible, pero él no nos escuchó. No pudimos hacer nada . Que Dios lo proteja.
- Lo sé.
-Entonces no te pongas mal, piensa en ti.No te vemos bien, sabes que puedes  confiar en nosotros, te vamos a ayudar siempre.
-Sí lo sé.
-¿Qué almorzaste hoy?
-Tortilla de papas.
- ¿Seguro?
- Sí ( le mentí).
-María ya sabes que Manolo heredó la casa de su abuela en Cádiz,¿ te acuerdas cuando lo conocimos qué nos invitó a la casa?
-Sí, como olvidarlo si lo pasamos muy bien,y esa mujer era una dulzura ,con una mano excelente para la cocina.
- Sí ,debe ser por eso que Manolo cocina tan bien.Bueno, pero lo que quiero decirte, es si quieres venir con nosotros a pasar unos días allí,a Manolo le deben unas vacaciones y pidió una semana para descansar y se la dieron .Ven con nosotros.¿Sí?
-¿ Y cuándo salen?
- Mañana.¿Vienes? Te va a venir bien un viaje.
- Sí voy.
- Perfecto, te pasamos a buscar a las 9hs a.m .
- Dale quedamos así.
-Hace unos meses atrás estuvieron los padres de Manolo, hicieron algunas reformas. Todavía no las vio.
- Ya falta poco .
- Sí. María nos vemos mañana entonces, cualquier cosa llámame.Besitos.
- Besitos, hasta mañana.
Enhorabuena, alejarme una semana de esa casa me iba a venir bien. No iba a pensar tanto en mi hermano, y quizás hasta podía dormir sin necesidad de tomar sedantes.
Lo primero que hice fue darme un baño, así al día siguiente no invertía tiempo en eso.
Comencé a calentar agua y fui llenando la bañera hasta la mitad, luego abrí la canilla de agua fría para entibiar , me desnudé e ingresé a la bañera, tomé un jabón de coco y limpié con él todo mi cuerpo. Me quedé en la bañera hasta que el agua se enfrió salí y sequé mi cuerpo con un toallón azul marino con detalles de aves de color amarillo y naranja y después me vestí con ropa de cama . Después volví a calentar agua para lavarme el cabello y con un shampoo de manzana procedí a su limpieza. Luego me sequé el cabello con una toalla del mismo color y diseño que el toallón.
Comencé a preparar la maleta donde puse suficiente ropa para una semana, dos libros por si me daban ganas de leer, el jabón, el shampoo, toallas y toallones, calzados, y dejé para último momento el cepillo de dientes y el peine. No me olvidé la caja de sedantes por si acaso lo necesitaba y el traje de baño.
No llevé nada para comer en el viaje porque se llegaba en poco más de una hora, llevé todo mi maquillaje, porque cuando salía con Hermesinda,me gustaba verme bien, es que mi amiga es una mujer muy coqueta, y yo quiero estar a su altura.
Seleccioné la ropa que me iba a poner al día siguiente: una pollera larga negra, una camisa blanca con volantes en el cuello y en las mangas, unas sandalias de taco bajo, y un cárdigan por si estaba fresquito.
En los días que estaba con mis amigos,iba a cuidar mi aspecto porque no me gusta estar impresentable ante los demás. Yo siempre estuve muy pendiente de la mirada ajena, a pesar de que mis padres me aconsejaban que nunca le de importancia a la opinión que otras personas tengan acerca de mí porque eso podía llegar a limitar mi vida . Pero en este caso no eran cualquier persona eran Hermesinda una mujer deslumbrante que todos voltean para mirarla y mi mejor amiga, y Manolo un hombre de lo más guapo que hace suspirar a mujeres de todas las edades.
Me dirigí a la cocina para sacar una tableta de chocolate con maní que tenía guardada en una alacena, me habían dicho que el chocolate y la leche caliente son buenos para combatir el insomnio, esa vez no quería tomar medicación porque de lo contrario me podía llegar a quedar dormida .
Me recogí el cabello, me lavé los dientes,apagué las luces y me acosté. Al día siguiente me esperaba un gran día.
Y cuando llegó el amanecer...
Me levanté decidida a comenzar el día de la mejor forma, el clima nos favorecía por suerte,no hay nada peor que ir a un lugar donde hay playa y que te toque un mal tiempo.
La casa que pertenecía a la abuela de Manolo ,no estaba muy alejada de la playa, y quería aprovechar para ir todos los días.
Mientras calentaba el agua para preparar un café, me cambié, me maquillé y me hice una cola de caballo, para que el pelo no me roce la cara. Tomé el documento, bastante dinero y lo guardé en mi billetera.
Cuando el agua ya estaba caliente, me preparé el café, le agregué leche, tres cucharadas de azúcar y un poco de crema. Mientras lo tomaba y comía unas masitas de coco, reflexioné sobre el cambio anímico que experimenté ante la llamada de mi amiga.
El día anterior a ese había estado todo el día triste , pesimista, apática, sin ganas de comer,de higienizarme, pero llamó Hermesinda , me propuso ir de viaje con ella y su esposo y todo cambió.
¿Será eso lo qué necesitaba ? ¿Será qué tendría qué tener una vida más sociable, y salir de mi encierro? Los hechos parecían demostrarme que de eso se trataba .
Quizás era hora de seguir el consejo de todos y buscar un marido pero ,¿dónde ? Como si fuera tan fácil encontrar un esposo.Si había alguien para mí , Dios se encargaría de ponerlo en mí camino,¿para qué buscar? Si Dios sabe lo que yo necesito.
Faltaba poco para las 9hs, me apuré a terminar mi desayuno,limpié lo que ensucié y me senté a esperar que pasen por mí.
Miré el lugar donde se sentaba Leopoldo y ring, ring, sonó el timbre.
Cuando llegaron, me aseguré de que las ventanas estén todas cerradas lo mismo que las puertas, tomé mis llaves,mi maleta, y me dirigí a la entrada , apenas abrí vi el rostro sonriente de Hermesinda, que al verme me abrazó fuerte y me saludó con dos besos.
Cuanto necesitaba toda esa demostración de cariño, y le respondí de igual forma.
Salí de mi casa , cerré todo, guardé las llaves en una cartera que Hermesinda me regaló en uno de mis cumpleaños y fuimos hacia el coche donde estaba esperando el guapo de Manolo.
Subimos al auto , y saludé afectuosamente al conductor amigo .
Y arrancó el coche rumbo a Cádiz.
Durante el viaje fuimos hablando de todo un poco, Hermesinda comentó que leyó en el diario que iba a hacer buen tiempo toda la semana.
- Mejor dije yo vamos a poder ir a caminar por la playa todos los días y comer fuera de la casa , la vamos a pasar de maravilla.
-Estoy ansioso por ver las reformas que hicieron mis padres.
- Yo también mi amor.¿Ya llegamos?
-Ya estamos en Cádiz , pronto llegamos a la casa .
Hermesinda iba mirando la ciudad a través del vidrio del coche, de repente dice:
- Miren, farmacia La Esperanza, tiene montón de sucursales,estos son millonarios.
- Sí, en Sevilla hay una, yo siempre compro ahí.
- Yo también.¿Conoces a los dueños María?
-No , Hermesinda.
- Yo vi una vez de lejos, a uno de los dueños que fue a la sucursal de Sevilla, no sé que fue a hacer porque el atiende en ésta. Se llama Juan.
- No lo conozco ni de nombre ni físicamente.
- Juan Peña Domínguez. Es uno de los solteros más codiciados, están todas detrás de él, no es muy atractivo,por lo menos para mí, pero está lleno de dinero y más de una lo quiere casar, pero él no es tonto, sale con montón de mujeres, pero no se compromete con ninguna, no quiere saber nada con el matrimonio.
¿En serio no lo conoces?¿ Pero en qué mundo vives  María?
- Vivo en el mismo mundo que tú, pero no lo conozco .
-¿Por qué después no vas a comprar algo ? Así lo conoces, dicen que como es de mujeriego,es de simpático y de amable. Manolo te lleva en el coche.
- Hermesinda...¿Qué estás pensando?
- Nada, solo digo eso.
-Hermesinda nos conocemos desde niñas.
No se te habrá ocurrido que conquiste a este hombre .¿Verdad?
-No María,eso es cosa tuya, pero la verdad no es mala idea .
Mira si te casas con él, no te va a faltar nada.
- ¡Hermesinda! ¿Cómo puedes  ser tan interesada?
Manolo que estaba escuchando toda la conversación, comenzó a reír. Y luego agregó:
- ¿Tú no te habrás casado conmigo por el título?¿Verdad?
- Pero no seas tonto, sabes que te amo con locura.
-Es que suenas demasiado interesada y ahora me dejas pensando.
- Manolo olvídate de lo que dije ,no lo apliques a nuestra relación. Es que quiero un buen esposo para mi mejor amiga, se lo merece ,está muy sola, y este tipo es un buen partido, y mira lo bonita que es María, parece una muñequita puede enamorar a cualquier hombre.
- Este no es cualquier hombre , estamos hablando de uno de los dueños de la cadena de farmacias más importante de Andalucía, tiene sucursales en toda la región.
- Con más razón, no seas tonta , trata de conquistarlo.
- No me interesa, si Dios tiene alguien para
mí lo va a poner en mi camino.
-Ay María, como eres , así no te vas a casar nunca.
- Eso no lo  sabes, mi madre siempre decía que el amor y la mortaja del cielo bajan. Y yo le doy la razón.No tengo apuro en casarme.
- Pero ya tienes 25 años y no tienes ningún festejante. No quiero que te quedes para vestir santos.
- Y si me quedo,¿cuál es el problema?
- Eres muy bonita para estar sola.
Manolo comenzó a reír y dijo:
-Chicas no se peleen ya llegamos, ahora a bajar.
Descendimos todos del coche, bajamos las maletas y fuimos hacia la casa.Una vez dentro Manolo indicó que habitación corresponde a cada uno, él y Hermesinda tomaron la que pertenecía a sus abuelos y yo la habitación donde dormía su madre cuando era soltera.
Ya cuando eran cerca de las 12 hs Manolo propone almorzar fuera de la casa. Y se ofreció para llevarnos al lugar donde solía ir con sus padres cada vez que visitaban la ciudad , el restaurante gaditano El Pulpo Andaluz, un lugar donde se sirven los platos más exquisitos y sofisticados de pescados y mariscos.
Aceptamos y nos dirigimos al lugar.

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