Un vínculo oscuro (Borrador)

Capitulo 1

VALCIA

Es el primer cartel que me sale en la carretera, miro en el mapa y no encuentro ese nombre por ningún lado, pero algo en mi me dice que doble en la entrada del pueblo.

Hago diez minutos más y empiezo a ver casas, miro para ambos lados en donde haya algún cartel que diga hotel, pero no encuentro nada, cuando llego a lo que parece una plaza veo dos señoras así que bajo la ventanilla.

—Hola, disculpen soy nueva y quería saber en donde hay un hotel —las dos señoras detienen su caminata, me miran extrañadas como si no perteneciera allí. Como veo que no responden vuelvo hablar — ¿Se encuentran bien? —la señora ojos  verdes iguales al de una hoja me señala un cartel a lo lejos.

Me despido de ellas y sigo la calle.

Miro por el espejo retrovisor, ahora las señoras volvieron por donde venían, no me hago problema algunas personas llegan a esa edad como pueden.

Veo una dirección de un hotel y lo anoto, busco en google maps pero falla un poco la señal, así que trato de guiarme por el nombre de las calles.

Llego luego de media hora, la energía de este pueblo se ve diferente, pero no se ve mal, al contrario, se ve totalmente distinta a las ciudades, todo está limpio además de ser comienzo de otoño y no hay hojas tiradas por las veredas.

Camino hacia las puertas y veo a tres chicas salir de ahi, no me presten atención, van tan en su mundo hablando, que solo paso, mi nari capta un aroma floral al instante y a levantar la vista un señor mucho mayor me recib.

— ¿Qué puedo hacer por usted? —habla el anciano.

—Lo siento, soy nueva acabo de llegar y quería saber si tenían habitaciones libres —como veo que no habla, aclaro — pago en efectivo.

El me mira igual que las dos señoras del principio, ¿acaso no están acostumbrados a visitas?, saco un fajo de billetes, que gané en el los antiguos trabajos y lo poco que me queda luego de que hui de casa.

Se fija en un cuadernillo, mientras observo la recepción, toda la decoración es de esta época, me sorprende un poco esperaba algo más viejo, ya que recuerdo que ni si quiera a aparecía en el mapa.

— Nos queda una habitación libre, ¿por cuánto tiempo desea quedarse — pienso un momento, en el anterior pueblo solo me quede tres meses así que puedo hacer lo mismo aqui.

—Tres meses por favor.

El anciano me entrega una llave y me indica que vaya al elevador, ni se molesta en acompañarme, así que agarro mi valija y preciono el botón correspondiente.

Cuando subo al sexto piso observo que solo hay otro cuarto además del mio, de seguro son el típico pueblo que le gusta la soledad y el silencio.

Al entrar a mi habitación todo huele y se ve de maravilla, todo está perfectamente ordenado, la luz de la tarde alumbra a la habitación, una cama de dos plazas se encuentra en el centro, además de un televisor gigante, el dueño del edificio debe ganar bien.

Cuando acomodo todo en el armario abro google, necesito encontrar un empleo, pero  me pasa como al principio la señal no es muy buena así que no tengo más remedio que salir a buscar a la antigua.

Me cambio de ropa a una más presentable, pantalón negro y camisa blanca, antes de eso me pongo un sujetador crema ya que se transparentaba el negro, agarro un saco y las llaves del auto.

Al llegar otra vez más a la recepción el anciano no está, así que salgo al estacionamiento, son las siete dentro de poco va a oscurecer, así que tengo que darme prisa.