| Capitulo IV · Petition |

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El viaje de regreso a California había transcurrido de forma normal y calmada. Los ánimos en el equipo estaban a tope gracias a esas seis victorias al hilo del equipo. Todo pintaba de maravilla en el camino a postemporada aunque aun quedaban cinco juegos y la semana de descanso.

El aeropuerto se encontraba relativamente vació al igual que las energías de varias de las chicas. Los vuelos siempre serian cansados. Sol había dormido en el camino, pero eso no quitaba el hecho de que tuviera muchas ganas de llegar a su casa para acostarse a descansar otro rato.

Tomo sus maletas y se encamino hacia la salida. En el camino diviso como Jane y el Coach hablaban en la banda de equipaje. Seguro era algo referente a los partidos, pensó la chica. Cuando salió del inmenso lugar diviso a varias de las jugadoras encontrarse con sus familiares, en cambio ella solo esperaba ver un taxi para irse de una maldita vez. Y aunque para muchos aquello resultara de alguna forma triste, para Sol era liberador. Palabras crueles pero ciertas.

Un taxi había llegado para alivio de la peligris. Subió sus maletas y dio las indicaciones necesarias para llegar a su departamento. Una vez ahí pago y bajo sus cosas encaminándose a la entrada. Su auto estaba aparcado en el garaje y sus plantas estaban regadas. Cuando abrió la casa, esta se hallaba en completo silencio y totalmente en orden. Era obvio que Elena había ido a limpiar la casa como todos los días, no importaba si ella estaba de viaje siempre mantenía en orden la casa y regaba sus plantas.

Dejo las maletas en la sala, ya las subiría mas tarde, ahora solo quería tirarse en el sillón y pasar la tarde viendo televisión. Justo eso hizo después de quitarse los zapatos y pasar a la cocina por algo de comer. Se dejo caer en el sillón y prendió la pantalla abriendo la aplicación de Disney+.

Mientras recorría el inicio buscando que reproducir, el titulo de una película la hizo divagar en sus recuerdos; "Juego de gemelas". Sonrió recordando como de niña siempre decía que ella y Andrew eran gemelos, cosa que no era cierta, su hermano le llevaba tres años y tenían una que otra cosa de diferencia; empezando por la estatura. Pero su mente de niña pequeña aseguraba que eran gemelos por el simple hecho de tener los mismos ojos azules profundos y el mismo color de cabello. Lógica para alguien de cinco años.

Aunque había algo que si tenían en común con los hermanos gemelos y era esa gran complicidad. Ella y Andrew habían crecido y pasando casi todo el tiempo juntos. Sol no sabría que hubiera pasado si no hubiera tenido el apoyo y compañía de Andrew.

Recordó lo que había hablado con Jane. Ella y su hermano se habían distanciado y no podía negar que lo extrañaba. La distancia se dio sola, aunque de cierta forma sabia que no fue tanto por ella y él. Sol era orgullosa y eso no cambiaria de la noche a la mañana, y aun no estaba dispuesta a hacerlo, pero hablar con su hermano era algo que si quería intentar. Aunque aun no tenia idea de como.


[···]


El jueves como cualquier entrenamiento normal había comenzado con calentamiento, ejercicios y repaso de rutas, pero esta vez McConnell tenia nuevas idea que implementar. Había decidido plantear un juego agresivo que involucraba engaños, pases largos y jugadas terrestres de gran impacto.

—¿Cuántas vueltas mas?

—Seguro hasta que nos desmayemos —respondió Sol a Michelle.

—¿Quieren callarse ustedes dos? —Jane iba a la par mientras trotaban.

La ofensiva tenia mas trabajo en el entrenamiento. Ahora estaban en rutinas de velocidad que consistían en aumentar su resistencia, por aquella razón debían correr varias vueltas al campo.

Wide Receiver | #2 Serie PlayersWhere stories live. Discover now