METANOIA // Minsung

veinticuatro - Sentencia

Luego de varios días se llegó la hora del juicio, los amigos de ambos chicos estarían presentes apoyándolos en ese momento, dicho juicio sería realizado en dos partes, gracias a el informe que les había llegado por medio de su abogado pudieron estar al tanto que primero sería Minho y luego Han.
Al llegar a la corte todo estaba bastante tenso, ya habían personas de la prensa tomando nota porque el señor Dongki era conocido en éste medio.

Los amigos de ellos se sentaron en la parte izquierda, así como los tíos de Jisung, hace días su abogado se había contactado con ellos para avisarles todo lo que estaba pasando, nunca se enteraron de la muerte de su media hermana por lo que no quisieron ir a Incheon apresurados, necesitaba asimilar lo que estaba sucediendo, Jisung no tuvo el tiempo de conocerlos, de hecho no los reconoció cuando cruzaron miradas, pero al parecer ellos sí.

—¿Estás bien?

—Sólo algo estresado hanji, no es nada.

—Yo diría que un poco más que eso —el menor de todos susurró— Mírate estás a punto de crear un mar por el sudor que sacas.

—Mierda chico —bin lo golpeó en la cabeza— No digas tus porquerías en un lugar como éste.

El juez había llegado junto con los fiscales y los que se encargarían de escribir todo lo que estaba por pasar en ese lugar; Minho se dirigió a su lugar con el abogado y miró cómo de una puerta salían varias personas sentándose a un lado del tribunal, al parecer era el jurado.
Por otro lado salió esposado Lee Yongbok con el alguacil a lado, fue directo a su lugar con su abogado también.

—Buen día tengan todos los presentes, damos inicio a la sesión de hoy —dió tres golpes— Abogado del caso numero 1727 por favor hágase presente comenzando.

—Gracias su señoría —se levantó— Para empezar, me gustaría aclararle la situación, el acusado fue señalado por mi cliente como el autor de haberlo hecho ingerir éxtasis sin su consentimiento mezclado con alcohol —sacó los papeles médicos y se los entregó— Aquí puede ver el expediente que le hicieron en el hospital y lo que se encontró con cantidades —regresó a su lugar.

—Aquí dice que estuvo apunto de morir por un infarto —el hombre acomodó sus lentes— También se encontró bebida energética en él, ¿eso fue sin consentimiento igual?

—No su señoría, el día después de aquella situación debía ir a trabajar, por lo que lo que usualmente hago es beber café o algún energetizante —habló por el pequeño micrófono delante de él— Pero no tenía idea de lo que había en mi cuerpo en ese momento.

—Muy bien —apuntó algunas cosas— ¿No hubo delito sexual cierto? —vió como el abogado negó— Bien, entonces defensa ¿cómo responde?

—No tengo nada que defender su señoría.

—¿Su abogado no va a hablar? —se quitó los lentes.

—No, le pedí que no lo hiciera —dijo sin más— Sé lo que hice y estoy listo para recibir lo que merezco.

La audiencia se quedó boquiabierta por lo que había salido de su boca, incluso para el jurado y el juez era extraño que un acusado no estuviera defendiéndose apesar de haber sido culpable.

—¿Algo que quieras agregar?

—Acepto todo, soy culpable de todo lo que se me acusa en contra de Lee Minho.

Sintió un escalofrío al escucharlo decir su nombre apesar de haber convivido prácticamente toda su vida, ahora era un motivo diferente, uno del que no podría perdonarlo jamás.