Capítulo 14 El laberinto parte 2

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Para el equipo izquierdo el camino era diferente en todo sentido, bajando cada vez más se hacía húmedo y frio, un aroma extraño invadía el pasillo uno que figuraba a un pozo de agua. En todo momento su lado siempre se mantuvo en una sola línea, sin tener que enfrentarse a otros túneles como el otro equipo, parecía ser la mejor opción ya que no tenían que confrontar las ponzoñosas alimañas.

-Qué raro, no hay ratas. –opino Ashley

-Ni arañas o murciélagos. –completo Colin

-Y ¿creen que eso es malo? –dijo Nick, temeroso por encontrarse algo parecido.

Llegando a la parte final del túnel, solo para encontrase con un enorme acuífero; donde quiera que voltearan la oscuridad fortalecía en ambas direcciones, el eco resonaba con las gotas caían del alto techo, cayendo a la charca que abarcaba todo el suelo.

A la otra orilla que son 200 metros de donde estaban, se alcanzaba a distinguir la siguiente entrada del camino. Atravesando el agua que les llegaba a las rodillas mantenían el paso lento por temor a caer a las profundidades del agua.

El camino se hacía largo ¡infinito!, difícil y cansado de atravesar hasta que... un fuerte chapoteo se escuchó detrás de ellos. Deteniendo el paso, sus corazones palpitando con fuerza y los rostros palidecían al misterioso ruido, alumbrando con desesperación para buscar el causante pero sin éxito aparente.

En ese momento otros chapoteos se hicieron presentes y en distintas direcciones, acto seguido ese ruido se remplazó con el de pasos fuertes en el agua, llegando a agitarla con frialdad.

El miedo se apoderaba de sus mentes y sus espíritus, a casi a punto de salir corriendo, Lil rápidamente analizo la situación, lo que fueran esas cosas, una broma de mal gusto del programa o algo peor, no había duda tienen que romper algunas reglas si querían salir de esta...

-Ashley, quiero que tomes de las manos a Fiore y no la sueltes.

Igual, no quiero que te resbales, agárrate de ella con todas tus fuerzas.

Nick. No sueltes por más que quieras esa lámpara... Todos deberemos de correr sin detenernos, quiero que corran con todo lo que tienen.

Sin opinar o decir nada corrieron como una manada de ciervos huyendo de depredadores que los estaban rodeando, el agua los hacia estremecer, casi caían por los hoyos del suelo, sin voltear atrás pues bien escuchaban como también aceleraban el paso para alcanzarlos.

Atravesando el túnel Ashley quien no dejaba de cargar a la aterrada niña, se pusieron a salvo mientras que sus compañeros se detuvieron en la entrada, notando que unas grandes piedras estaban a punto de derrumbarse. Esa sería su salvación, usando sus manos para empujarlas con desesperación aquellas criaturas se acercaban cada vez más.

Un éxito cuando las piedras cayeron, haciendo una perfecta pared tan pesada y dura, soltando suspiros de alivio y tratando de recuperar el aliento.

-¡¿Qué demonios fue eso?!

-Nick, necesito que mantengas la calma...

-Como me voy a calmar, estuvimos a punto de ser alcanzados por esas cosas.

La niña ya no aguantaba mas, el miedo y la situación donde se encontraban le provocaron lágrimas y sollozando con temor buscando refugio con Ashley, abrazándola con fuerza.

-Lil, debemos seguir avanzando, no podemos quedarnos aquí. –concluyo Ashley.

-¡Estoy de acuerdo con las chicas! Debemos irnos de aquí, no sabemos qué otra cosa encontraremos aquí. Vamos Nick esto aún no termina.

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