CASADA CON LA DUQUESA (G!P)

3

Jennie

- Me despierta una luz cegadora, apenas puedo abrir los ojos...

Me siento en la cama y de nuevo veo a las sirvientas,- a veces es bueno tener gente que te cuide pero no es necesario que estén aquí a todas horas, puedo hacer las cosas sola.- pienso

-Bueno hoy intentaré no ponerles las cosas difíciles, así que voy a tratar de coperar, me dan un baño de rosas con aceites de azahar y peinan mi cabello en una trenza.

- Señora y su ropa?- dice una de las chicas.

- Solo tengo un vestido debe de estar en silla, allí lo deje anoche- les digo.

Estoy pensando que ayer todos me llamaban señorita en cambio hoy es señora ¿ será qué ya saben que estoy casada?

-Veo moverse a la chica de un lado a otro, su cara está roja y sus ojos vidriosos.

- Lo siento señora, yo no sabía... Tire su vestido por favor perdóneme.- me dice

- No importa señorita, usted no lo sabía, bueno de momento no podré bajar a desayunar así que me pueden servir aquí. También necesito aguja, hilo y unas tijeras- les digo suspirando.

-Busco algo con lo que poder, hacerme un vestido, abro los cajones y solo hay sábanas, miro las cortinas pero son demasiado pesadas, vuelvo al cajón y saco un juego de sábanas en un tono salmón, bueno quizás con esto...

-Gracias a una de las chicas he conseguido confeccionar un vestido sencillo, como todavía no es época fresca lo he hecho de mangas largas, bueno después de todo es bonito tiene un poco de vuelo y me queda justo por las rodillas, se que debería ser más largo pero no había más tela.

-Bajo a cenar, -Teddy me mira de arriba abajo.

- Señora se encuentra bien no ha bajado a desayunar ni a comer, estaba un poco preocupado-

- No se preocupe Teddy estoy bien solo un pequeño problema con mi vestido pero ya me he hecho otro. - le digo sonriendo.

-Está es la segunda noche en la que ceno sola, la verdad es que no se está tan mal, solo que aveces me siento un poco sola.

-Termino de cenar y voy a la cocina, todos me hacen una reverencia y dejan de cenar.

- No por favor sigan cenando, yo me sentía un poco sola y quería conversar,
- les digo .

- Señora, este no es lugar para una dama...- Me dicen ...

- me resigno y salgo de la cocina y miro hacia el jardín, salgo un momento y recorro solo unos metros,- Teddy me llama desde la puerta eso me asusta y caígo al suelo, me levanto y corro hacia el interior, pierdo los zapatos en la carrera.

Llegó a la puerta y Teddy me regaña.

- Señora no puede salir sola a estas horas y sus zapatos?

- Los he perdido, digo agachando mi cabeza,- apenada.

- Está bien señora, mandaré a alguien para que los busque.- me dice

- Gracias - le agradezco

- Ahora pase a la sala la Duquesa
desea conocerla-me dice ...

Paso a la casa, me cruzo con una mujer alta, de unos veinticinco años, su pelo es rubio y alborotado, sus ojos azules como el cielo y me miran con curiosidad. Es guapa supongo, saludo y paso de largo.

- Teddy desde cuándo el servicio se pasea por casa como si nada, además por si no te has dado cuenta iba descalza, ¡ha qué tipo de gente contratas!- dice la Duquesa un tanto molesta.

- Mi Señora, ella no es del servicio, ella es su esposa- le dice

-Estoy sentada en un sillón, me está entrando el sueño pero Teddy me ha dicho que tengo que esperar, miro mis rodillas y puedo ver barro y sangre seca, mis pies también están sucios. -Soy un desastre, miro mi vestido al menos no se ha manchado ni se ha roto. Algo es algo.

La misma mujer de antes pasa a la sala, yo no me muevo de mi sitio.

- Veo que no te han enseñado modales, cuando alguien pasa a una sala el que está dentro debe de levantarse...- dice molesta.

- Perdóneme pero modales si tengo lo que no tengo es etiqueta, oh algo así, no recuerdo cómo dijo Teddy que se decía,
- digo frunciendo el ceño.

- No sabes quién soy verdad?- me pregunta.

-Niego con la cabeza.

- Teddy, -explícame una cosa de que familia proviene está señorita- le pregunta a Teddy.

-Mi Señora, ella es una plebeya, usted no dijo nada de clases sociales solo pidió casarse con la chica más bonita de todo el reino de Seúl . - le dice Teddy a la mujer.

- Ella, es mi esposa,- creo que le he causado una mala impresión, quizás haya sido bueno y ya no quiera estar casada conmigo.

- Apenas hice ayer unas rayas en el papel, solo Teddy me vio, si quiere puede romperlos, yo me iré de su casa y no diré nada- respondo con la mirada alta.

- Veo como se acerca a mi y me examina, su presencia me incómoda, está demasiada cerca y eso me pone muy nerviosa.

- Teddy, porque lleva esto puesto, parecen unas sábanas...- dice.

- Señora ,es porque lo son, ella trajo un solo vestido y una de las criadas lo tiró pensando que eran trapos viejos, también ha perdido los zapatos cuando ha salido al jardín , - dice Teddy un tanto avergonzado.

- ¿Entonces puedo irme a mi casa?- le pregunto.

- Ya estás en tú casa, no eres precisamente lo que buscaba pero al menos eres bonita. Dice viéndome de arriba para abajo.

-Siento que la sangre me hierve estoy apunto de darle una cachetada pero recuerdo lo que dijeron esas mujeres,- si le pegó igual me mata o me hace algo peor así que está vez optó por quedarme en silencio.

- Señora, ¿ puedo retirarme a mi dormitorio?- digo agachando la cabeza.

- Si puedes marcharte y haz el favor de no usar la ropa de cama como vestimenta.- dice ,dándome la espalda.

-Pues no sé que quedra, que me ponga si no tengo otra cosa.- le digo...

Subo a la habitación y otra vez tengo el baño preparado, en serio que no entiendo que les pasa con la limpieza está vez no me quejo ya que lo necesito.

- ¿ Alguna de vosotras esta casada?
- les pregunto...

- Yo soy viuda y ella está recién casada, - dice una chica no mucho más mayor que yo.

-¿ Quiero saber qué es consumar el matrimonio?- Pregunto disfrutando de mi baño.

-Ellas se miran entre si y se sonrojan.

-Poco a poco me van explicando en que consiste, mi cara pierde el color, yo no puedo hacer eso... - digo dentro de mis pensamientos.

-Me meto en la cama esperando que ella no venga a hacerme eso, se que no me puedo negar pero no quiero hacerlo.

-Estoy medio dormida cuando la puerta de la habitación se abre, y cierro los ojos lo más fuerte que puedo para hacerme la dormida y evitarla ...

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