Capítulo 1

776 40 19
                                    

El pirata.

-Un paseo en barco... -resoplaste por lo bajo.

Tu escuela había sugerido pasear en barco para conocer más el mar, pero a ti lo único que te interesaba realmente era poder saber si las sirenas realmente existían o si eran solo un mito de los piratas.

-No te ves muy animada -tu mejor amigo Tyler revisó tu expresión con determinación

Él estaba sentado a tu lado. Por el contrario él se veía mucho más animado por el paseo por el mar.

El barco en cuestión era grande, pero se veía un poco antiguo, a juzgar por su fachada. En la fotografía podía verse en buen estado, pero había algo peculiar en él. La madera se veía que estaba en buenas condiciones, pero la pintura se veía un tanto desgastada, como si hubieran pasado años sin haberla pintado.

-¿Sigues creyendo que las sirenas existen? -su expresión era burlona mientras te vía.

-Claro que existen, Tyler -dijiste obvia.

-Si tú lo dices... -hundió sus manos en sus bolsillos delanteros.

Estaba claro que él no te creía ni una palabra, pero no quería discutir sobre el tema.

-Mañana en el viaje estaré tan alerta de encontrar una y te darás cuenta que digo la verdad.

-No deberías asegurar algo así, nadie ha podido demostrar que en realidad existen, nosotros tampoco podremos hacerlo -se levantó de su asiento mientras hablaba.

Su cabello azabache tenía rulos no demasiado marcados.

-¿Me acompañas a casa? Mamá volvió a pedirme que no regresara sola -guardaste todas tus cosas en tu mochila.

Tyler era alto, pero solo te rebazaba por una cabeza.

-Claro, no dejaría a mi mejor amiga volver sola a casa -sonrió mientras ponía su mochila sobre sus hombros.

*

-Ya llegué, mamá -gritaste en cuando entraste a casa.

Estaba demasiado silenciosa la sala.

-¿Mamá? -gritaste mientras entrabas a la cocina.

Al parecer ella no estaba en casa, pero había dejado una nota pegada en el refri.

No necesitabas leerla, porque perfectamente sabías que diría que llegaría tarde a comer o que probablemente llegaría hasta la hora de la cena.

Sin muchos ánimos, comiste sola, a veces el tiempo que pasabas con tu mamá era tan poco, que parecía que solo te visitaba.

Y por un momento te preguntaste qué se sentiría no crecer. Ser joven por siempre.

Sentiste una mirada y volteaste de inmediato.

-¿Mamá? -frunciste el ceño.

-Ya llegué con la despensa de la semana -te sonrió mientras dejaba las bolsas sobre la barra.

-Pensé que llegarías hasta más tarde -te sentaste a su lado.

La observaste un momento, se veía tan... feliz.

-No, te dejé una nota diciéndote que iría a hacer las compras y que regresaría más tarde.

La nota. Ni siquiera te habías molestado en leerla.

-Sí, claro -tu nerviosismo era evidente-. Ya te ayudo a acomodar la comida.

Ayudaste a guardar la comida torpemente.

-¿Estás emocionada por el paseo de mañana?

-El barco no tiene la mejor pinta, pero seguro que será divertido -suspiraste-. Creo que ésta puede ser mi oportunidad para poder ver una sirena.

-Cariño, tal vez deberías dejar tu obsesión con las sirenas, no es sano -te juzgó por loca.

-Mamá, yo sé que existen.

-Tal vez sí, pero no deberías enfocarte solo en eso cuando estés de paseo, hay otra variedad que animales acuáticos.

-Y ninguno de ellos es tan impresionante como una mujer con cola de pez.

Pasaste horas hablando de lo importante y significativo que era para ti ver a las sirenas sin que fuera en una película o en algún documental con mala calidad. Uno de tus mayores sueños era comprobar que existían, aunque ni siquiera estabas segura de que fuera verdad.

Cuando llegaste a tu habitación no dejabas de ver la ventana y preguntarte qué se sentiría poder volar.

Si Peter Pan existiera, podrías volar por cualquiera lugar sin importar que tan lejano estuviera. Volar y sentirte tan libre como un ave.

*

No pudiste dormir casi en toda la noche, no dejabas de pensar en lo emocionante que sería poder ver a una sirena en la vida real.

¿Su cola sería tan rasposa como la piel de un cocodrilo? ¿Sería biscosa?

Miles de preguntas se inundaban en tu cabeza cada que pensabas en la posibilidad de ver una sirena.

¿Hablarían español? ¿Su canto sería realmente encantador? ¿Su cabello sería tan suave como un algodón de azúcar?

-Si sigues pensando en lo que sea que estás pensando, probablemente te agobies en cuanto estés ahí -el pelinegro señaló el barco frente a ustedes.

Estaban formados en fila para poder subirse al barco. El aire daba directo a tu rostro cada segundo que pasaba.

-No pensaba en nada -mentiste, mientras evadias cualquier pregunta sobre tus pensamientos.

-Podrás ser buena en cualquier cosa, pero eres malísima mintiendo -te susurró en tu oreja.

-No es verdad.

-Es tan cierto como puedo asegurar que pensabas en las sirenas -alzó las cejas victorioso.

Antes de que pudieras decir algo para defenderte de lo que había dicho tu mejor amigo, la fila avanzó al barco.

En realidad no era como que pudieras negar lo que Tyler acababa de decir, él te conocía demasiado bien como para saber que la única razón por la que habías accedido al paseo en barco era para poder ver a las sirenas. Y tú lo conocías demasiado bien para saber que él solo había ido para no dejarte sola en esa aventura.

-Me voy a presentar con todos ustedes, muchachos -un hombre de cabello marrón oscuro saludó desde el timón-. Soy el dueño de este barco, quien les dará un recorrido por el mar. Mi nombre es Killian Jones. Seré su capitán en esta gran aventura.

Parecía un auténtico pirata, vestía como uno, incluso tenía un garfio en vez de su mano, pero lo más impresionantes era que su voz podía escucharse desde varios metros de distancia a pesar de estar en un lugar con mucho aire

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Parecía un auténtico pirata, vestía como uno, incluso tenía un garfio en vez de su mano, pero lo más impresionantes era que su voz podía escucharse desde varios metros de distancia a pesar de estar en un lugar con mucho aire.

-Pónganse todos cómodos y recuerden no acercarse demasiado a la orilla -dio un paso al frente-. Les recomiendo usar protector solar, porque el sol está en su máxima resplandor.

¿Peter Pan es real? (Robbie Kay) OUAT On viuen les histories. Descobreix ara