2 - Jennie

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A las 4:14 ella salió de allí. No se despidió, pero tampoco esperaba que lo hiciera, así que simplemente suspiré y me acerqué a la mesa que había estado ocupando para limpiarla.

Tomé el envase donde anteriormente había estado su café y me sorprendí al ver algo más escrito en él.

"Hola, iba a escribir algo más, pero no se me ocurre nada. Hola". Había escrito yo casi temblando y justo debajo de eso, ella había contestado: "Hola... Preparas un buen café".

Me reí, por alguna razón. Lo que había escrito me causaba gracia y agradecí que hubiese respondido, pues... Estábamos hablando, ¿no?

Cuando salí del trabajo, fui directamente a casa, más específicamente a mi habitación para dormir. Al despertar era casi medio día, así que me puse de pie rápidamente para bajar al primer piso y comer algo.

Mamá y mi hermana habían salido, así que tenía la casa para mí solo... Genial. Me senté en el sofá para comer la pizza que había quedado de la cena de ayer.

Sentí que llegaba un mensaje, así que tomé el teléfono para revisarlo. Era Irene.

Irene: Hey Jen, los chicos están en mi casa, ¿te unes?

Yo: Por supuesto que sí.

Cuando nos reuníamos en casa de Irene, sólo significaba una cosa; piscina. Así que tomé mi short de baño y me alisté para salir de casa.

Al llegar a casa de mi pálida amiga, fue ella quien me abrió la puerta.

- Hey, al fin llegas - dijo ella.

- Ya llegó por quien llorabas - ella río y me dejó pasar-. ¿Dónde están los demás?

- En la piscina.

Nos encaminamos allí y al llegar Irene me ofreció una hamburguesa. Comenzamos a comer y charlar como siempre, Seulgi, la novia de Irene la llamó por Skype, así que se alejó de allí para charlar con tranquilidad.

- ¿Cómo van tus cosas, Jen? - Me preguntó Nayeon volteándose sobre la toalla, quitándose el nudo de la parte de arriba de su traje de baño para broncear su espalda. Jisoo no lo perdió de vista.

- ¿Mis cosas? Amm... Bien, no lo sé.

- ¿Qué hay con esa chica, la de la cafetería?

Me volví hacia Jisoo con el ceño fruncido.

- ¡Jisoo! ¡Le contaste!

- Es mi novia, ¿qué esperabas? - Ella se encogió de hombros como si nada.

Rodé los ojos y me acomodé para acostarme.

- Entonces, ¿cómo van? - Insistió Nayeon.

- ¿De qué hablan? - Irene había terminado su llamada y se acercó a nosotras con una pequeña sonrisa.

- Hablamos de Jen y su vida amorosa.

- Oh, ¿la chica de la cafetería?

Volví a rodar los ojos, viendo que todas mis amigas sabían sobre mi enamoramiento hacia esa chica.

Negué y me encogí de hombros.

- Ayer le hablé - dije y de pronto todas estaban sobre mí pidiendo información.

Me causó gracia cuando Nayeon tuvo que sostener su traje de baño para que no se le cayera, mi vista inevitablemente se fue hacia ese lugar en particular y Jisoo golpeó ni hombro ayudando a su novia a atarlo otra vez.

- Bueno, cuéntanos - dijo Irene sentada en mi regazo, tomando mi cara para que no se me ocurriera escapar.

- ¿Qué quieren que les cuente?

- Pues cómo te fue, ¿qué te dijo? ¿Cómo se llama? - Habló Nayeon.

Suspiré y me acomodé quitándome a Irene de encina, porque era pequeña, pero pesaba.

- Bueno, no conversamos como tal... Le... Le dejé una nota en su café y ella contestó.

Lo próximo que sentí fue el golpe de Jisoo en mi cien.

- Eres idiota, Kim - me dijo negando, utilizando el apellido que tanto odiaba.

- ¿Qué esperabas que hiciera? - Pregunté sobando donde ella me había golpeado-. Además, fue la primera noche desde que la conozco que ella no lloró...

Irene me sonrió y ayudó a sobar la zona donde Jisoo me había golpeado casi dejándome inconsciente.

- Eso es algo bueno... La ayudaste a sentirse mejor, ¿no?

Yo asentí y sonreí, porque quizás lo había hecho, yo había logrado que esa chica, tan destruida como estaba, sonriese y dejase de llorar por una noche.

Tears || JenlisaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora